Sin los funerales que le hubieran correspondido como gran artista de décadas de trabajo de calidad y cualidades humanas únicas, a causa de la pandemia de la COVID- 19, el mundo despidió en la semana que termina al cantautor español Luis Eduardo Aute. Según lo dice con claridad una nota de El País, de España, “Nunca nadie habló mal de Aute”, pues era, además de un gran cantautor y artista plástico de renombre, una persona íntegra que trataba a la gente de una manera cálida y respetuosa, mostrándose humilde e interesado en lo que tenían que decir o mostrar los demás.

Representó un estilo, una altura y calidad artística impecable, desde los años 60 y 70 especialmente. La capacidad de abrir su mente a diferentes expresiones y artistas, hizo que América Latina, como lo hizo con Serrat y Sabina, lo amara y “adoptara” como artista propio, aunque fue en la zona del Caribe, especialmente en Cuba, donde Aute siempre jugó de “local”, por usar una expresión futbolera. Ha grabado y ofrecido numerosos conciertos con Pablo Milanés, pero sobre todo, con su amigo entrañable y “hermano”, Silvio Rodríguez. Nacido en Manila, Filipinas, en 1943, debido a que su padre, español, trabajaba en una empresa, al terminar su infancia se trasladó a Madrid, en donde fue creciendo y creando en momentos muy especiales de la historia. En 1962 se casó con Martichu Rosado, con quien tiene 3 hijos. En el 2006, padeció un infarto que lo alejó para siempre de los escenarios, y los artistas más famosos de España y muchos de Latinoamérica, así como los más jóvenes que lo admiraban, hicieron un homenaje a Luis Eduardo Aute en vida, especialmente para ayudar económicamente a su familia y, más aún, poder agradecerle lo mucho que dio como artista, a través de la música y en su faceta de dibujante y pintor. Aute es patrimonio de la historia musical de varias décadas de España e Hispanoamérica.

Concierto desde la Catedral de Milán

“Concierto para la esperanza”. Así lo llaman al encuentro a través de las redes sociales que tendrá lugar hoy domingo y será transmitido en vivo por Youtube desde la Catedral de Milán. Este domingo de Pascua de Resurrección tendrá un sabor especial desde la voz del prestigioso tenor Andrea Bocelli. El mismo, en solitario, ofrecerá al mundo un concierto desde la Catedral de Milán, Italia, una ciudad que ha sido epicentro y aún permanece bajo peligro por la COVID-19. Para el concierto, el artista estará acompañado solamente por el organista de la catedral, Emanuele Vianelli. La presentación será a las 11:00 y no habrá audiencia, ya que el acceso al público estará estrictamente prohibido. El concierto representará un mensaje de amor, cura y esperanza para Italia y el resto del mundo.“Este año, la Pascua será muy diferente para todos nosotros. La alegre serenidad que suele traer este día ha sido aquejada por la pandemia que estamos viviendo. Estoy seguro de que la extraordinaria voz de Bocelli será el abrazo que echamos en falta estos días”, dijo Giuseppe Sala, alcalde de Milán.