En la segunda parte de las transferencias más insólitas de la historia del fútbol, recordamos algunos casos de jugadores que fueron noticia por ser transferidos a diferentes clubes, a pesar que ellos nunca existieron.

La cobertura de los medios durante los mercados de pase siempre es criticada, por la supuesta “venta de humo” de jugadores transferidos, sin información para sus­tentar. En algunos casos, unos internautas decidie­ron llevar esto a otro nivel: inventaron jugadores para ver si algún periodista o club caía en la trampa.

“EL COLIBRÍ”

Uruguay siempre ha sido una fuente inagotable de talento joven para el fút­bol mundial. Jugadores que recién empezaban su carrera, con poco renom­bre, fichan siempre por clubes europeos, quienes apuestan por su resiliencia y capacidad para sobresalir en diferentes situaciones. Por esta razón, la noticia de que en el 2010 el Villa­rreal de España fichó a un tal Néstor Coratella por 3 millones de euros no sonaba para nada descabellada.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Según la información, Cora­tella, a quien le apodaron “Colibrí”, por su velocidad y fluidez con la pelota, era un jugador uruguayo del Danu­bio, uno de los clubes for­madores de talentos de los charrúas. Tenía 18 años y jugaba como extremo según los datos que se manejaba en un foro de hinchas del Danubio y en una página con los juveniles del club. No había mucha más infor­mación, aparte de un video pixelado en el cual se lo veía al jugador convirtiendo goles en partidos juveniles.

En realidad todo esto era un invento de unos usua­rios de internet con mucho tiempo libre. Eran parte del foro de Forocoches.com, que en varias ocasio­nes habían realizado bro­mas con medios de comu­nicación. En este caso, buscaron demostrar que los medios no realizaban con­troles al publicar nombres de supuestos fichajes que llegaban a los clubes. Para llevar esto adelante inven­taron el foro uruguayo y la página de juveniles del club, utilizaron vídeos de diferentes jugadores con poca resolución, crearon una página de Wikipedia con los datos y empezaron a publicar información en los foros del Villarreal sobre la transferencia.

Al ver el movimiento y las páginas que supuestamente respaldan la información, varias cuentas partidarias del Villarreal confirmaron la transferencia. También lo hicieron diferentes dia­rios españoles, señalando la llegada de un nuevo juvenil. Varios periodistas españo­les llamaron a colegas del diario El Observador de Uruguay a preguntar sobre este nombre poco conocido, ya que los miembros del foro habían editado un artículo de su página con la supuesta noticia de la transferencia de Coratella. Al hacer las averiguaciones con el club, se dieron cuenta que el juga­dor nunca estuvo en Danu­bio y ni siquiera existía.

Tras publicar que el gran fichaje en realidad era un fantasma, los miembros de Forocoches felicitaron al diario por el trabajo y develaron todo el trabajo que habían hecho. Dece­nas de sitios de noticias tuvieron que borrar sus publicaciones y dejar de lado la información tras caer en la trampa.

ROSALES Y LA PRUEBA QUE NUNCA LLEGÓ

El engaño no solo tuvo como víctimas a hinchas y medios de comunicación, ya que en otros casos fueron los propios clubes los que terminaron siendo embaucados. Esto fue lo que le ocurrió al Adelaide United, que, en la búsqueda de jugadores para potenciar su plantel, se encontró con un jugador con experiencia en grandes clubes, con el único inconveniente que en reali­dad era un invento.

En junio del 2012, el club australiano publicó que recibiría a 2 jugadores en forma de prueba para ver si eran fichados por la insti­tución: un jugador portu­gués que estuvo en el Chelsea y el norteamericano Dexter Rosales. Su ficha era de un jugador con gran historial: con solo 25 años ya estuvo en el Ajax y el Valencia, estuvo en River Plate en Argentina y jugó en las selecciones juveniles de Estados Unidos.

La sorpresa llegó cuando, pocos días después, el club mencionó que en reali­dad Rosales no existía y que habían sido engaña­dos. Todo comenzó con el agente de jugadores aus­traliano Lou Nesci, quien había ofrecido al jugador. Meses antes, Nesci reci­bió un correo de un agente ruso, Dimitri Kaskovic, quien ofrecía a Rosales, presentando, fotos, datos e incluso un video de sus talentos. En las imágenes se veía a un jugador de enorme talento, pero esto era por­que el video correspondía a Mauro Rosales, quien sí jugó en el Ajax años antes.

Nesci pasó el contacto del jugador a otros clubes, entre ellos Adelaide, quienes fue­ron los que eligieron llevarlo para una prueba luego que el propio jugador ofreció pagar el pasaje para llegar a la ciudad. Luego de hacer la oferta, tanto el agente como el club comenzaron a darse cuenta que varias cosas no cuadraban. Esperaron para ver si es que la persona que decía que era Rosales se presentaba, pero antes los medios descubrieron el engaño. Fue una humilla­ción a nivel mundial: el club que convocó a un fantasma.

Finalmente se develó que todo fue obra de Dexter Rosa, un estadounidense que tra­bajaba como DJ y que nunca había jugado en alguno de estos clubes. Según Rosa, el había jugado a nivel ama­teur y que era su agente el que había exagerado los datos. Kaskovic, el que había con­tactado al agente australiano, también era un invento de Rosa. Pidió disculpas por la situación, pero insistió que no había mentido.

Es así como jugadores inexistentes pueden termi­nar siendo fichajes, siem­pre que no haya control sobre la información. Tanto la prensa como los clubes han sido víctimas, todo por la necesidad de tener una primicia o a un talento que nadie haya visto antes.

­Fuentes:

1 - “Néstor Coratella: el jugador fantasma” - Diario El Observador (Uruguay)

2 - “El fichaje fantasma de Néstor Coratella” - Diario ABC (España)

3 - “El curioso caso del futbolista fantasma” - Diario Marca

4 - “Agent: How Rosales Fooled ME” - www.ftbl.com.au

Dejanos tu comentario