Cada equipo tuvo su momento en el encuentro y la paridad de 1 a 1 entre Libertad y Cerro Porteño se justifica. En los primeros minutos pareció que el Gumarelo arrasaría con su rival, pero no tardó el Ciclón en aparecer frente al arco de Silva y fue el lateral Blas Riveros, con sus incursiones ofensivas y sus pelotas cruzadas al centro del área, el que creaba problemas a la defensa local.
La labor de Riveros se puede dividir en dos partes; por un lado, sus apariciones en ofensiva fueron impecables, sin embargo, defendió muy mal.
Con el partido emparejado, el cuadro liberteño empezó a perder precisión aunque de todas maneras tuvo dos ocasiones para abrir el marcador, pero fueron por fallas defensivas y no por méritos propios. Un cabezazo de Sanabria fue al travesaño, ante la inacción de los centrales visitantes y en otra Melgarejo tiro al gol, tras desatención defensiva, salvando el golero Arias.
El gol azulgrana se produjo a los 21 minutos. Un impecable tiro libre de Aliseda fue cabeceado a la red liberteña por Jonathan Torres, quien ganó en el salto a Viera y al estatismo del arquero Silva. Lo que siguió hasta el final de la etapa fue un juego de mucha movilidad, aunque el marcador ya no se movió.
En la complementaria, Libertad imprimió mayor presión en el encuentro y el gol de empate llegó a los 13’, cuando un espectacular tiro libre de Hugo Fernández, la figura del partido, entró en el ángulo superior izquierdo de Arias. Tras el empate repollero, el cotejo se fue apagando con el trascurrir de los minutos, porque la gran intensidad le pasó factura a los protagonistas.