• Por Juan Vicente Duarte
• PERIODISTA-NACIÓN MEDIA

Guaraní ahondó aún más la crisis de Cerro Porteño, al que ganó 1-0 con un tanto de penal y con un jugador menos gran parte del par­tido por la expulsión de Raúl Cáceres. El resultado pone fin a la era Diego Gavilán como técnico azulgrana.

El primer tiempo fue neta­mente favorable al Ciclón en el trámite. El ímpetu y la presen­cia constante de Arzamendia en ataque casi le dio el tanto inicial. Similar a aquel gol que le convirtió a Luqueño, el lateral encaró, dejó a un rival por el camino, pero esta vez su remate de derecha se fue apenas desviado.

La respuesta de Guaraní se dio con un pase profundo de Camacho para Romeo Benítez. Este, desde ángulo cerrado, remató de zurda y su tiro se fue rozando el palo izquierdo de Jean. Fue lo poco que produjo el Abo­rigen en esa etapa, que se vio enormemente perjudicado por la irresponsabilidad de Raúl Cáceres, que metió un planchazo sobre Luis Rive­ros y vio la roja directa.

Ese hombre de más reforzó el dominio azulgrana, que generó situaciones, aunque fue inoperante en ataque.

Fue precisamente eso lo que le pasó factura al inicio del segundo tiempo. Una avi­vada de Gastón Gil Romero en un lateral le permitió a Camacho enfilar decidida­mente hacia el arco, pero cuando ingresó al área forcejeó con Morel, que lo sujetó y lo mandó al piso. Juan Gabriel Benítez pitó penal y el mismo Camacho no perdonó a Jean desde los doce pasos para poner el 1-0.

Pese a la creencia habitual de que un equipo que recibe este tipo de golpes retruca con decisión para rever el resultado, Cerro se dur­mió y cayó en el juego de su rival, que cortó aún más los circuitos.

Recién en el tramo final apuró con más decisión, con algunos cambios ofensi­vos, pero su suerte ya estaba echada, pese al dominio territorial que siguió ejer­ciendo. Guaraní lo aguantó con tranquilidad y sumó una victoria importante, en tanto Cerro se mostró aún peor que en otras jornadas, resignando nuevamente puntos de oro en su intento por acortar distancias con Libertad.

Diego Gavilán dejó de ser entre­nador de Cerro Porteño y, tras la derrota ante Guaraní, acudió a conferencia. Acusó a la prensa de generar una campaña en su contra.

“Este es el club de mis amores, me duele mucho lo que está pasando, más allá de las bolude­ces que ustedes, los periodistas, inventan. Eso no se hace, uste­des humillan a los profesionales con sus especulaciones. Soy el que más sufre”, disparó Gavilán.

“Las especulaciones y boludeces que se dijeron empezaron desde cuando estaba en Chile (cuando dirigía la sub-20) e hicieron los periodistas”, añadió.

Sobre el encuentro ante Gua­raní, resaltó que “la sensación es de tristeza, teniendo en cuenta la forma que se pre­sentó el partido y el hombre de más que hemos tenido. Tris­teza, por no encontrar ese par­tido que nos permita despegar. El fútbol tiene esas cosas, que te encuentran en rachas nega­tivas. Nos faltó juego, capaci­dad de creación, finalización y no lo pudimos hacer”, recono­ció. Víctor Bernay lo sucederá en el cargo.