El entorno de Luqueño está que arde desde el partido contra Trinidense. La chispa que desató la hoguera fue el penal cobrado sobre el final del partido por el árbitro Juan Gabriel Benítez, por supuesta mano del capitán Pablo Aguilar, que solo el juez del encuentro lo vio y que significó el empate final de 2-2. En consecuencia, la directiva del cuadro auriazul decidió presentar una nota de protesta a la APF.
Ayer, el vicepresidente de la entidad, Juan Darío Cáceres, expresó a “Versus radio”/ Nación Media, con respecto a las medidas tomadas: “Haremos una nota, no queremos que este señor (Juan Gabriel Benítez) arbitre más nuestros partidos. Por eso el arbitraje paraguayo no figura ni a los premios. No sé qué clase de ojos han de tener porque muchas personas no vieron la infracción. Pablo jamás tocó con la mano. Lamentable es, con lupa debemos buscar el penal. No sería mejor que ante la duda no se cobre nada”, expresó con amargura.
Cáceres remató con “que no venga este señor a Luque, porque corre peligro, que venga Zulma Quiñónez, que cobró una maravilla la vez pasada”.
En el estadio La Huerta de Libertad, Sportivo Luqueño se enfrentó anoche por cuarta jornada de la Copa Sudamericana al argentino Godoy Cruz, líder del grupo, que confirmó su condición en la cima y es principal candidato a clasificar a los octavos de final.
El auriazul paraguayo cayó 1-0 ante el Godoy Cruz y quedó oficialmente eliminado con solo un punto. El único gol llegó mediante Agustín Auzmendia, quien a poco de ingresar, definió con remate potente al aprovechar una mala salida de Guillermo Hauché.
Solo el triunfo servía a los dos equipos por la incómoda posición en la tabla y salieron a buscarlo. El Auriazul en el funcionamiento general fue mejor y, si no fuera por las manos de Servín, hubiera logrado el objetivo.
El Gallo Norteño madrugó con la gran proyección del lateral izquierdo César Castro, quien se internó en el área y sirvió un gran pase a los pies de Sergio Bareiro para abrir el marcador al minuto 2.
Luqueño comenzó en desventaja y se armó de valentía para llevar peligros. Tuvo dos claras chances, primero con Rodi Ferreira y luego con Federico Santander, pero emergieron las manos salvadoras de Servín para proteger en tres ocasiones su arco, todas de cabeza.
En tanto que Diego Acosta tuvo en sus pies para aumentar la ventaja al local, pero su disparo salió desviado tras un rebote concedido por Aguilar.
Luego del descanso, el Auriazul, con los ingresos de Brahian Ayala y Lautaro Comas, salió decidido a tomar mayor protagonismo. Julián Marchio puso la paridad luego de un córner y se hizo justicia por el trámite del juego.
El elenco de Gustavo Morínigo con el gran trabajo de Ayala generó mucho peligro y estuvo cerca de la victoria, solo las intervenciones de Servín evitaron la caída del 2 de Mayo, que sobre el final igualmente salió con todo en busca de los tres puntos en casa, mas no pudo.
El triunfo es la única opción del Sportivo Luqueño, que esta noche desde las 23:00 de Paraguay visita en Lima al peruano Atlético Grau, que tampoco ha podido ganar en el marco del Grupo D de la Fase de Grupos de la Copa Sudamericana.
El Auriazul paraguayo busca cortar una mala racha, que se inició con derrota de local por 2-1 frente a Gremio de Brasil y otra caída de visitante ante el Godoy Cruz de la Argentina por 2-0.
La mala racha del representativo paraguayo también se da a nivel local, ya que el equipo dirigido por Gustavo Morínigo no levanta cabeza en el torneo Apertura y cayó 3-1 el último fin de semana ante Olimpia.
El Grupo D tiene en punta al Godoy Cruz argentino, con seis puntos, igual que el Gremio brasileño, pero con mejor diferencia de goles.
En la continuidad de la fecha 14 del torneo Apertura en la cancha del 12 de Octubre de Itauguá, Luqueño hizo de local en pleno Martes Santo frente al Sportivo Trinidense.
Pese al estropeado césped con tantos partidos en su haber, el trámite fue dinámico y bastante peleado, aunque no se pudo abrir el marcador en le primer tiempo.
Con los cambios de la etapa complementaria en ambos equipos, el desarrollo ganó en vivacidad y emociones.
A los ochenta minutos se produjo la jugada clave y fabulosa que decidió el partido. El ofensivo Lautaro Comas marcó un golazo al rematar en gran forma desde fuera del área, sorprendiendo al arquero Víctor Samudio. Previamente, Walter González primero y después Federico Santander peinaron el balón ganando de cabeza a los defensores del Sportivo Trinidense. El conjunto luqueño volvió al triunfo luego de bastante tiempo para recuperar en algo la parte anímica en el torneo local.