El Sportivo Luqueño sigue moviendo el mercado de pases de cara a la temporada 2023. En ese sentido presentó oficialmente al defensor Pablo Aguilar, de 35 años, quien retorna al club con el que fue campeón del Apertura 2007 e iniciará un tercer ciclo.
“Estoy muy contento y emocionado por este nuevo reto que tengo en mi carrera. Vamos a ir por los objetivos que tenemos”, dijo Aguilar, cuyo vínculo es por un año.
Se desligó de Libertad, donde tuvo poca participación durante el último semestre (seis partidos), pero tuvo palabras de agradecimiento para el Gumarelo, que le abrió las puertas para regresar al país luego de su paso por el Cruz Azul de México.
“No tengo más que palabras de agradecimiento por esta nueva oportunidad. Siempre fue un sueño para mí volver a mi casa donde me inicié”, agregó.
YA SON SIETE
Sportivo Luqueño, que retorna a la Primera División tras un año de participar en la Intermedia, donde obtuvo el subcampeonato, sigue con las tareas preliminares de pretemporada bajo el comando del entrenador Gustavo Florentín. El 2 de enero, la plantilla se trasladará a Posadas, Argentina, donde realizará la parte más fuerte de la fase precompetitiva.
Rodi Ferreira (27 años) jugará en el 12 de Junio de Villa Hayes de la División Intermedia, según confirmó Ricardo Nuñez, presidente de la mencionada entidad chaqueña.
El polémico futbolista inició tareas de pretemporada en filas de Luqueño, pero quedó desafectado por otro acto de indisciplina, según resolvió el entrenador Julio César Cáceres, quien optó por apartarlo del plantel.
“De palabra, ya está cerrado lo de Rodi Ferreira. Para su venida, un actor importante fue Pablo Aguilar”, declaró el presidente Ricardo Núñez a la 1080 AM. “Es cierto que se dieron ciertas cuestiones extradeportivas, pero creo que aún no llegó al club indicado. Creo que habrá otra versión de Rodi Ferreira a partir de ahora”, deseó el alto dirigente del club villahayense.
Además de Pablo Aguilar (38 años), otros experimentados del plantel del 12 de Junio son el arquero argentino Hilario Navarro (44 años), el delantero paraguayo Santiago Gabriel Salcedo (43 años) y el lateral derecho colombiano Sergio Otálvaro (38 años).
La vergonzosa derrota por goleada (4-0) a manos de Nacional en la fecha que pasó movilizó a la dirigencia de Sportivo Luqueño, que en apenas una diferencia de minutos, despidió primero a Gustavo Morínigo y luego confirmó la vuelta de Julio César Cáceres al mando del equipo, por lo que resta de este Apertura y muy probablemente en el Clausura.
Utilizando sus cuentas de las redes sociales, el club recibió así al Emperador como nuevo técnico. “Damos la bienvenida al profesor Julio César Cáceres como nuevo entrenador del Sportivo Luqueño de cara a los próximos desafíos. ¡Éxitos, profesor! ¡Vamos, Luqueño!”, escribió.
Cáceres se había alejado del club el año pasado, justamente por lo malos resultados, más allá de haber dirigido al primer equipo por dos temporadas. Ahora, al exdefensor de Olimpia, Guaraní, selección paraguaya y otros grandes clubes del exterior, le espera un trabajo exigente y complicado, donde la principal tarea será levantar el nivel del equipo, que está complicado en su promedio. En su etapa anterior, Cáceres dirigió al equipo en 62 partidos, con 20 victorias, 16 empates y 26 derrotas.
En el estadio La Huerta de Libertad, Sportivo Luqueño se enfrentó anoche por cuarta jornada de la Copa Sudamericana al argentino Godoy Cruz, líder del grupo, que confirmó su condición en la cima y es principal candidato a clasificar a los octavos de final.
El auriazul paraguayo cayó 1-0 ante el Godoy Cruz y quedó oficialmente eliminado con solo un punto. El único gol llegó mediante Agustín Auzmendia, quien a poco de ingresar, definió con remate potente al aprovechar una mala salida de Guillermo Hauché.
Guaraní festejó por partida doble en Itauguá. No solo porque le ganó a Sportivo Luqueño por 1-0, sino porque con el resultado se ubica como nuevo escolta de Libertad, superando a Olimpia en la tabla de posiciones.
Para el Aborigen no fue un partido para tirar flores, pero hizo gala de efectividad, buena cobertura defensiva y una actitud de hierro para superar el escollo llamado Luqueño, que nuevamente careció de fuerza ofensiva para concretar algunas buenas acciones generadas en ataque.
De todas formas, la sensación de un mejor andar siempre lo tuvo el cuadro del Chiqui Arce, que gracias a la vitalidad del juvenil Alexandro Maidana, gran figura del partido, se posicionó siempre mejor en busca del arco de Aguilar.
Luqueño tuvo un inicio esperanzador cuando Lautaro Comas remató desviado tras un buen ataque de su equipo, pero después Guaraní se sacudió hasta que llegó la jugada por el sector izquierdo que terminó en el centro de Maidana. Aguilar se apuró en descolgar, pero se le escapó la pelota y Fernando Fernández, siempre oportuno, le punteó el balón para después mandarla adentro.
Ya en el segundo tiempo se dio el típico ida y vuelta, con el necesitado buscando el gol y el que estaba en ventaja metiendo contragolpes. Los cambios dieron otro aire, pero ya el resultado no se modificó, dejando a Guaraní en su nuevo espacio en la tabla.