En el estadio Emiliano Ghezzi de Fernando de la Mora, Sportivo Trinidense venció 1-0 a Colegiales y se consagró campeón de la Intermedia anticipadamente a falta de una fecha para el final del torneo.
Triqui, que en la fecha pasada aseguró su retorno a la Primera División, se impuso en la doble jornada del domingo con el gol de Tomás Rayer (70′), además el nuevo monarca se benefició de la derrota del Sportivo Luqueño 2-0 frente al Sportivo San Lorenzo en el estadio Erico Galeano de Capiatá. Luqueño estaba a dos puntos y tenía chances de pelear el título hasta la última fecha tras lograr también el ascenso a Primera División para el 2023.
Para la victoria de San Lorenzo anotaron los goles Ignacio Miño (29′) y Fernando Cáceres (42′).
Tanto Trinidense (campeón) y Sportivo Luqueño (subcampeón) se aseguraron 1.500.000 dólares en materia de premios como nuevos equipos de la Primera División en concepto de derechos de televisación, según el régimen de incrementos que se plasmó en el último contrato con la APF y la empresa poseedora de los derechos.
Guaraní superó a Luqueño 2 a 1 y sigue con chances de consagrarse campeón. La primera etapa concluyó con un merecido triunfo aborigen por 1-0. El trámite al comienzo del cotejo fue parejo. Ambos equipos buscaron la apertura del marcador utilizando los costados para crear peligro.
El cuadro legendario avisó a través de Diego Fernández, quien despidió un zapatazo que el arquero Mongelós desvió al córner en forma espectacular y enseguida Rodi Ferreira realizando gran jugada dejó solo a Walter González, pero el delantero desperdició la ocasión para Luqueño rematando a las nubes.
A partir de la segunda mitad de la etapa, el Cacique tomó el control del balón, tuvo mejores argumentos que los auriazules para generar ocasiones frente a la valla rival, pero era un dominio intrascendente, hasta que apareció Agustín Manzur sobre los 33 minutos, rematando un poderoso tiro libre que pasó al costado de la barrera, ante la inacción del golero Mongelós, convirtiéndose en el gol para el Indio. El primer acto concluyó con ventaja aurinegra por 1 a 0.
Al minuto de la complementaria Diego Fernández tuvo el gol a sus pies, pero su remate encontró el achique del golero Mongelós y la chance aurinegra se diluyó. Fernández tuvo su revancha diez minutos después y ahora sí logró vencer la valla luqueña, tras una estupenda habilitación de Aldo Maíz.
Faltando 15 minutos para el final, el descuento de Luqueño, por intermedio de Walter González, le puso incertidumbre al resultado, pero después los avances de los auriazules nunca tuvieron claridad. Sobre el final Alcides Benítez increíblemente desperdició una gran ocasión para el Cacique y el 2-1 no se modificó. La fecha final del Apertura será al rojo vivo, teniendo en cuenta que el Legendario aun conserva su chance de lograr el cetro de campeón.
La gente del Sportivo Trinidense sabe que los minutos son importantes y esperan por ello un retorno económico. Jonathan Santana contó que la institución auriazul aplicará una condición a la hora de negociar futuros préstamos.
El exjugador dijo que de las transferencias de Fernando Romero (USD 700 mil) y Gilberto Flores (USD 2.8 millones), que no pertenecen al club, dejaron solo buenos recuerdos.
En este sentido, la idea pasa por hacer valer el rodaje y percibir un porcentaje. “Es importante que uno le da vidriera a los jugadores. Eso siempre lo hemos pensado de esa manera, es razonable de parte de nosotros. Estamos muy contentos porque se hayan vendido desde Trinidense, entonces de alguna manera queremos implementar eso (cláusula), es justo”, señaló el gerente deportivo en charla con Versus radio.
A entender de Santana, es “cuestión de tiempo” que Trinidense gane de su cantera, porque se trabaja bien y hay proyectos interesantes. “Hoy tenemos a Brian Leguizamón, que salió campeón con la sub-17 en Suiza y fue MVP del partido”, celebró.
Por último, Santana explicó que Juan Salcedo, perteneciente a los registros de Cerro Porteño, sí posee una cláusula similar en su contrato, al igual que cualquier jugador que arribe desde Olimpia, con quien se firmó un convenio.
Casi impensadamente, Guaraní parece ser el único que le puede birlar la posibilidad de llegar al título a Libertad, tras la combinación de resultados que se dieron en la última fecha.
Con su victoria sobre Tembetary, el Aborigen se volvió a poner como escolta de Libertad y espera que el Gumarelo siga tropezando para intentar llegar al título.
Además de esto, la buena noticia para el técnico Francisco Arce es la recuperación de dos jugadores claves en su esquema titular. Hablamos del arquero charrúa Martín Rodríguez, que todavía no estará ante el Auriazul, pero sí en el partido de Copa Sudamericana ante Boston River de la otra semana; y de Luis Martínez, que ya estará en la nómina ante los luqueños
Haciendo gala de una mejor efectividad y también de un mejor juego, Sportivo Trinidense consiguió una gran triunfo de 2-0 sobre Nacional. Tras un primer tiempo, donde se contabilizaron apenas tres ocasiones de gol, el juego se abrió en el segundo tiempo.
A pesar de esa pobre primera fracción, fueron los locales los que mostraron una mayor ambición en ataque para luego llevarse el premio mayor en los 45 minutos finales.
Una gran asistencia de Néstor Camacho posibilitó el primer tanto de Joel Román, que con remate por bajo venció a Santiago Rojas, que salió para cerrar el ángulo de tiro.
Ese tanto movilizó al equipo de Pedro Sarabia, que ya al inicio de ese periodo recurrió a cambios, con los ingresos de los Caballero, Tiago y Gustavo, para intentar mayor poder ofensivo.
Lo logró en algunos pasajes, pero le faltó un referente de área ante la salida de Cristian Colmán. Trinidense incluso ajustó las marcas y cuando la defensa era vulnerada, aparecía la templanza y seguridad de Víctor Samudio para salvar su arco.
En contrapartida, Trinidense, bien resguardado, apeló al contragolpe, hasta que sobre el final, una mano de Claudio Núñez le permitió a Rodrigo Arévalo sentenciar el partido.
Premio mayor para los locales, que supieron golpear en los momentos claves. Y castigo para Nacional, por su poco poder ofensivo.