Colegiales ganó su primer partido y Luqueño igualó
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No cabe dudas que la primera victoria de Colegiales es una de las grandes noticias de la cuarta fecha del torneo de la Intermedia, pero, además, que Sportivo Luqueño no pudo vencer a Fernando de la Mora y los líderes de la competencia comparten con 10 unidades.
Los rojos de Cuatro Mojones, de la mano de Miguel Mendoza, pudieron vencer a River Plate 2 a 1 en los Jardines del Kelito. Los goles fueron anotados por Luis Mendoza y Guillermo Denis para los “libreros”, mientras que el descuento fue obra de Pablo Velázquez. Los dos equipos quedaron con 3 unidades.
En otro partido dominical, Fernando de la Mora y Sportivo Luqueño no se castigaron y empataron sin goles. Los auriazules se suman a los que están en primera posición con 10 unidades.
Hoy se completa esta ronda con dos encuentros. En Ciudad del Este, el Atlético 3 de Febrero se mide con el Sportivo Trinidense en el estadio Antonio Aranda, desde las 16:00, con arbitraje de Sixto Mercado. De fondo, Deportivo Santaní recibe a Pastoreo en su estadio Juan José Vázquez de San Estanislao, a partir de las 18:15, con Gedidías Zacarías como árbitro. Por ahora, Independiente, San Lorenzo y Luqueño están con 10 puntos, Pastoreo y Trinidense con 7 unidades.
Intenso pero improductivos. Buen trato de la pelota pero sin golpear arriba. Así fue el trámite de un partido que pintaba para más, entre Sportivo Luqueño y Deportivo Recoleta, que igualaron sin goles en Itauguá.
Mirando el marcador, perjudicó a ambos. Al Auriazul porque cortó su racha de dos victorias seguidas y de perder una magnífica oportunidad de acercarse mejor al puntero Cerro Porteño. En tanto, para el cuadro funebrero, ganar ya era una necesidad, pero ahora suma seis partidos sin hacerlo, tres de ellos con derrotas, y con panorama inquietante en su promedio.
No fue un mal partido ni mucho menos pero los intentos ofensivos de ambos equipos chocaron con sus muy buenas coberturas defensivas. Además, las veces que los arqueros tuvieron que intervenir lo hicieron muy bien. Fue Recoleta el que tuvo la primera clara del partido en una acción en la que Hugo Sandoval se quedó “sin piernas” para definir ante Aguilar.
Luqueño, bajo la batuta de Sebastián Quintana, también inquietó pero recién en el segundo tiempo Sergio Díaz tuvo la gran chance de poner al frente a Luqueño, pero su remate salió desviado. Ya después hubo intentos, pero todo quedó ahí.
Con dos partidos continúa hoy la disputa de la 9.ª fecha del torneo Clausura. Cobra relevancia el duelo entre el 2 de Mayo y Ameliano, en Pedro Juan, con dos equipos que están en la parte baja de la tabla, principalmente la V Azulada, que suma varias derrotas.
No menos importante será el duelo entre Recoleta, otro necesitado de puntos, y Sportivo Luqueño que intentará sumar otra victoria para seguir como escolta de Cerro Porteño.
Sportivo Trinidense volvió a la victoria tras unas cuantas fechas. Haciendo gala de efectividad, dejó sin nada a un Sportivo Luqueño poco productivo y que ni siquiera aprovechó el hombre de más que tuvo en un tramo del partido.
El primer tiempo fue de pocas emociones, con apenas algunas aproximaciones por parte de ambos equipos. La expulsión de Luis de la Cruz, a instancias del VAR, por un pisotón en el tobillo de Julio Báez, le dio a Luqueño esa ventaja que no pudo aprovechar.
Todo se igualó en el segundo tiempo cuando Brahian Ayala también vio la roja por un golpe en el tobillo de Juan Salcedo. Trinidense sí aprovechó esta situación porque apenas unos minutos después, Fernando Romero aprovechó un penal otorgado por el juez Blas Romero, para poner el primer tanto del partido a los 62’.
Ni siquiera ese tanto en contra despertó a Luqueño, que con cambios ofensivos buscó en vano la paridad. Por el contrario, en otro ataque de Trinidense, el recién ingresado Nelson Gauto puso el segundo con disparo fuerte a ras del piso, sin oposición y luego de tener todo el tiempo para acomodar el balón. Un triunfo justo para que quiso más y que aprovechó su momento.
Cuando hay cuestionamientos a labores arbitrales, generalmente los protagonistas afectados (dirigentes, técnicos y jugadores) utilizar calificativos moderados para expresar sus quejas.
Sin embargo, eso no ocurrió tras el partido entre el 2 de Mayo y Sportivo Luqueño, que terminó con derrota auriazul (3-2), dos de sus jugadores expulsados y un mar de nervios en su plantel.
El juvenil delantero de Luqueño, Jonathan Ramos, de 17 años, autor de uno de los goles de su equipo, literalmente destrozó al árbitro Derlis Benítez, asumiendo de hecho, el sentir de todo el equipo.
“Desde que empezó el partido hasta que terminó, lo que cobró el árbitro fue impresionante. Lastimosamente es lo que el fútbol paraguayo ofrece, árbitros miserables que no están capacitados”, disparó Ramos en declaraciones a Tigo Sports.
La decisión que comenzó a desatar la furia de los luqueños fue el penal en contra y la expulsión de Ángel Benítez, por doble amonestación, por un codazo sobre Rodrigo Ruiz Díaz, que terminó en el hospital. Benítez amonestó a media docena de jugadores luqueños a lo largo del partido y sobre el final, también expulsó al capitán