Alfredo Aguilar, quien paró dos penales y se hizo figura, abraza a Iván Torres, quien marcó el último penal que sentenció la serie a favor de Olimpia.FOTO:NÉSTOR SOTO
Con garra y aguante. Olimpia neutralizó el juego de Cerro Porteño, favorito irreal, que careció de profundidad y pagó su falta de gol.
En la tanda de penales, el arquero Alfredo Aguilar, con sus manos firmes y gran ubicación, desvió los remates displicentes de Nelson Haedo y Enzo Giménez. Los decanos fueron 100% efectivos. Cambiaron sus tiros por gol Alejandro Silva, Néstor Camacho, Diego Polenta y lo sentenció Iván Torres. Merecido para el Decano, que tuvo más firmeza desde los doce pasos, mayor fuerza mental ante un adversario, al que evidentemente le pesaron las piernas en el momento clave.
El Decano dio un golpe anímico grande al eliminar en los penales a su eterno rival y así avanza a las semifinales del torneo Clausura, instancia en la que irá por la final el domingo frente a Sol de América.
El Decano sorprendió con su frontalidad y llegó al tanto de apertura tras un largo pase de Richard Ortiz, conectado por Diego Torres, quien bajó para la definición de Jorge Recalde en el área rival. Se sacudió el Azulgrana, monopolizó la pelota, pero le costó pisar el área.
Arzamendia robó un balón, ganó el lado izquierdo para centrar, Enzo Giménez puso el empate, cerrando en la otra punta. Los goles ya no se hicieron presente en un segundo tiempo más equilibrado, cada uno aferrado a su estilo. Con Olimpia pisando fuerte, más vertical. Cerro intentó generar, sin apartarse del mejor trato de la pelota, pero intrascendente.
El Azulgrana no aprovechó el hombre de más cuando se retiró expulsado Luis de la Cruz por una entrada dura. Virtud del Franjeado, que supo arreglarse. Las cosas se pusieron iguales con otra tarjeta roja bien puesta al lateral cerrista Alberto Espínola. Polenta y Alcaraz tuvieron alto rendimiento en la defensa olimpista. Arriba, tuvo tarea de aguante Roque Santa Cruz. Jorge Recalde, además del gol, fue lo más peligroso de Olimpia. En el golpe a golpe, no se rompió
Hinchas del Olimpia agotan las entradas en casi todos los sectores para el partido de mañana frente al Sportivo Ameliano, ocasión en que jugará de local su último partido en el viejo estadio de Para Uno Osvaldo Domínguez Dibb, que será ampliado y modernizado totalmente con el objetivo inmediato de ser sede de la final única 2024 de la Copa Sudamericana, a jugarse en Asunción en noviembre, según confirmó la Conmebol.
Se espera un lleno total para dar una despedida a la actual estructura del estadio ODD, que será demolido por completo. Ya se realizó la palada inicial y el martes 30 de abril comenzarán oficialmente los trabajos, cuya finalización de la primera etapa está previsto para el 1 de noviembre.
Siete millones de dólares en la inversión inicial para la remodelación, mediante un aporte de la Conmebol, otro de la familia Domínguez y financiamiento con fondos propios que van a ser generados con la venta de palcos vip.
EL EQUIPO
En cuanto al equipo, se prepara para medir a Ameliano, rival duro que en la primera rueda triunfó por 2-1 en Encarnación, resultado que determinó en la salida del anterior entrenador Francisco Arce.
El equipo base es con Gastón Olveira; César Olmedo; Manuel Capasso, Saúl Salcedo y Facundo Zabala; Carlos Arrúa, Fernando Cardozo, Ramón Martínez y Derlis González; Lucas Pratto y Aaron Páez.
En Olimpia se valoró la vuelta a la victoria ante Tacuary, pero también hubo coincidencia de que no se debió sufrir tanto en el segundo tiempo, donde el rival estuvo cerca de la remontada.
Carlos Arrúa, que jugó de titular y aportó un golazo, además de un buen trabajo, se mostró feliz por el resultado y su gol. “Feliz por arrancar (de titular), aportar al equipo con el gol, que por suerte entró. Los compañeros siempre me dicen que tengo que patear más al arco, hoy se dio y fue adentro”, comentó.
En relación con el estado actual refirió que “siempre se puede dar un poquito más, necesito sumar minutos e ir soltándome para aportar mucho más de lo que estoy haciendo, espero que el próximo partido pueda volver a tener la oportunidad de arrancar”.
No obstante, refirió que el déficit de Olimpia son las pelotas aéreas para defender. “Yo creo que tenemos que trabajar más los balones aéreos. Practicamente todas las pelotas de gol que nos hicieron fueron producto de eso. De todas formas, hemos hablado en el grupo y dijimos que no podíamos dejar escapar más puntos”, remarcó.
CLAR, CRÍTICO
Por su parte, Walter Clar, de Tacuary, mencionó que su equipo regaló el primer tiempo. “No nos animamos, fuimos tibios y superados por el rival y en el segundo tiempo se vio otra cara. Tenemos que hacerlo de esa manera. Son cosas que debemos replantearnos, porque son más notorios ante rivales como este. Duele perder así porque tuvimos nuestras chances, además de ese penal que desperdiciamos, me voy conforme con lo que hicimos en ese segundo tiempo, pero muy preocupado por lo que fue el primer tiempo”, remarcó el lateral zurdo.
Muchas veces los arqueros son determinantes para sostener un resultado. Y en este caso, si Luqueño salió vivo de Pedro Juan Caballero fue porque tuvo su santo aparte. Ese fue Alfredo Aguilar. El arquero, que estuvo ausente en la semana de Copa por un problema muscular, reapareció para salvar –literalmente– de la derrota a Sportivo Luqueño ante el 2 de Mayo.
El Auriazul sufrió el desgaste hecho ante Racing en la semana y aunque presentó varias modificaciones, sufrió físicamente en la terraza del país, por lo que aguantó heroicamente el cierre del partido.
Tras un inicio impetuoso, se fue quedando a merced de los locales, hasta el punto de resguardarse en su campo ante la arremetida desde todos los flancos del cuadro local.
Luqueño tuvo la vuelta de Jorge Benítez. El Conejo fue el único que puso en aprietos a la defensa pedrojuanina, pero luego de los golpes recibidos, se tuvo que ir sentido en el cuarto de hora del segundo tiempo, por lo que el dominio local se hizo más evidente. Los cambios de Julio Cáceres equilibraron en algo el partido, pero el 2 de Mayo no cesó en su insistencia de llegar al gol, pero una y otra vez tropezó con la figura de Aguilar, que sacó, por lo bajo, unas seis pelotas que iban destino a la red.
A la hora del balance final, el que festeja el resultado es Luqueño, porque no lo pasó bien en el trámite del partido, ante un rival que quiso, lo buscó de todas las formas pero que se encontró con un murallón que le impidió sumar los tres puntos en casa.
El domingo 16 de marzo de 1980, en Asunción, Olimpia vencía 5-0 al FAS de El Salvador y se convertía en el “Rey de Copas” al ganar la Copa Interamericana.
Por Luis Irala
Nación Media
Fotos El Gráfico y La Hemeroteca Franjeada
Aquella vez el Decano se adjudicaba el tercer trofeo fuera del plano local, luego de ganar la Copa Libertadores y la Intercontinental. El 5-0 ante el FAS de El Salvador posibilitó al Decano dar su tercera vuelta olímpica internacional.
En principio los partidos por la Copa Interamericana estaban programados jugarlos contra el América de México, en setiembre del 79. De visitante Olimpia alcanzó el empate, 0-0 y en la revancha, en Asunción, venció 1-0. Sin embargo, el entonces presidente de la Concacaf, el mexicano Joaquín Soria, aclaró que el América fue campeón en 1978 y que los finalistas del 79 eran el FAS de El Salvador y CRKSV Jong Colombia de las Antillas Neerlandesas y que disputarían el partido definitorio recién el 29 de diciembre, donde ganó el FAS por 7 a 1. De común acuerdo los partidos entre el Olimpia y el FAS fueron programados para el 17 de febrero del 80, en El Salvador y la revancha el 16 de marzo, en Asunción.
En 1980, Luis Cubilla dejó Olimpia y se fue al Newell’s Old Boys de Rosario, Argentina y tomó la posta su hermano Pedro, con el propósito de traer a las vitrinas de los franjeados las copas Interamericana y la Intercontinental, cuyas revanchas se jugarían en marzo del 80. El 2 de ese mes el cuadro olimpista ya había ganado la Copa Intercontinental al superar al Malmö FF de Suecia, por 2 a 1, en el estadio Defensores del Chaco.
Olimpia tuvo que encarar los partidos ante los salvadoreños con bajas importantes como la de Miguel Ángel Piazza, que fue también al Newell’s Old Boys y Hugo Ricardo Talavera, quien se encontraba lesionado. Al final el Tala fue transferido también al cuadro rosarino atraído por Luis Cubilla.
Para cubrir el claro dejado por el “charrúa” Piazza se contrató a su compatriota Daniel Di Bartolomeo y en vez de Talavera arribó proveniente de Nacional Miguel María Michelagnoli. La llegada de MMM al Decano fue otra de las acertadas del presidente Osvaldo Domínguez Dibb, pues a partir de la revancha ante los salvadoreños empezó a convertir goles de todos los colores y no paró hasta llegar al final de la temporada como goleador absoluto del campeonato oficial, con 11 goles convertidos.
El partido de ida ante el FAS se jugó el domingo 17 de febrero en el estadio Cuscatlán de la ciudad de San Salvador. Fue empate 3-3 luego de estar en ventaja el Decano por 3-1, hasta 15 minutos antes del final. A la llegada a Asunción el entrenador Pedro Cubilla fue muy criticado por la prensa deportiva por la decisión de dejar en el banco al zaguero central Flaminio Sosa, uno de los artífices de la conquista de la Libertadores del año anterior.
En la revancha jugada el domingo 16 de marzo del 80, en el Defensores del Chaco apareció la fibra goleadora de Miguel María Michelagnoli, marcando tres goles en la goleada a favor de Olimpia, por 5-0. Los otros dos goles fueron obras de Osvaldo Aquino y de Eduardo Ortiz. El saldo negativo de la jornada fue la fractura de tibia y peroné que sufrió el delantero Evaristo Isasi.
Así Olimpia, con la goleada ante el FAS salvadoreño y la obtención de la Copa Interamericana, se convirtió para siempre en el “Rey de Copas”.
“El Decano al ganar la Copa Interamericana se adjudicaba el tercer trofeo internacional, luego de vencer en la Libertadores y la Intercontinental”
PARTIDO DE IDA – DOMINGO 17 DE FEBRERO DE 1980
FAS 3 – OLIMPIA 3
Síntesis. Estadio Cuscatlán de San Salvador. Árbitro: Carlos Alfaro (Costa Rica). FAS: Castillo; Guillermo Rodríguez Bou, Alcides Piccioni (Ramírez), Gonzalo Enriquez y Carlos Recinos; Manuel Álvarez, Amado Abraham y Edgardo Erazzo; Quinteros, David Arnoldo Cabrera (Jorge “Mágico” González) y Roberto Casadei. DT: Juan Francisco Barraza.
OLIMPIA: Éver Almeida; Alicio Solalinde, Roberto Paredes, Rubén Jiménez y Alberto Giudice; Luis Torres, Carlos Kiese y Miguel María Michelagnoli (Rogelio Delgado); Evaristo Isasi, Carlos Yaluk y Osvaldo Aquino (Eduardo Ortiz). DT: Pedro Cubilla. Goles: 1′ Alicio Solalinde, 27′ Carlos Yaluk y 60′ Evaristo Isasi (O); 59′ y 81′ Roberto Casadei y 73′ Abraham (F).
PARTIDO DE VUELTA – DOMINGO 16 DE MARZO DE 1980
OLIMPIA 5 – FAS 0
Síntesis. Estadio: Defensores del Chaco. Árbitro: Edison Pérez Núñez (Perú). OLIMPIA: Éver Almeida; Alicio Solalinde, Roberto Paredes, Flaminio Sosa y Daniel Di Bartolomeo; Luis Torres, Carlos Kiese y Osvaldo Aquino; Evaristo Isasi, (7′ Eduardo Ortiz), Carlos Yaluk, (70′ Julio Díaz) y Miguel María Michelagnoli. DT: Pedro Cubilla
FAS: Castillo; Carlos Recinos, Gonzalo Henríquez, (20′ Héctor Piccione), Jaime Rodríguez y Guillermo Rodríguez Bou; Norberto Huezo, Amado Abraham y Manuel Álvarez; Jorge “Mágico” González, David Arnoldo Cabrera, (35′ Roberto Casadei) y Edgardo Erazo. DT: Juan Francisco Barraza. Goles: 12′ Osvaldo Aquino, 43′, 58′ y 81′ Miguel María Michelagnoli y 60′ Eduardo Ortiz (O).