Libertad mostró con buen funcionamiento su ambición copera en el partido de ida ante Palmeiras y entusiasma a los futbolistas, dirigentes y seguidores. Adrián Martínez pone su ficha por el equipo. “Nosotros tenemos plantel para pelear la Copa”, confió el goleador, reconociendo que a “ninguno se le hace fácil” en la Libertadores.
“Tenemos que mejorar, los jugadores son los mismos, el plantel es el mismo. Nosotros queremos ganar siempre y a veces las cosas no se dan”, justificó.
La buena nota es que el equipo puede dar más, especialmente aprovechando las oportunidades creadas. “La verdad que nos quedó la sensación amarga, porque podíamos un poquito más. Podíamos anotar un gol más”, explicó Martínez, quien justifica su momento con una obra del Todopoderoso.
“De no hacer escuela de fútbol ni inferiores a jugar una Copa Libertadores, solo Dios hace eso y estoy muy agradecido”, confesó Adrián.
Mientras que el presidente gumarelo Rubén Di Tore reprochó algunos errores, pero aplaudió la actitud y temperamento del grupo.
“Creo que fue un error táctico, dejarlo solo (Gustavo Gómez cabeceó solo en el gol del Palmeiras). Si hay un tiro libre, yo le pondría dos jugadores que le marquen a él”, se quejó.
“Nos quedamos con un sabor agridulce, pero esto es lo que queríamos, un equipo fuerte, que pueda jugarle de igual a igual a cualquier rival”, valoró el presidente. “Es una cuestión de que se va armando la estrategia”, expresó sobre el funcionamiento del equipo.