POR IRENEO ACOSTA R.

Lo que se pudo com­plicar en el primer tiempo se tranqui­lizó en la segunda etapa. Libertad sacó una buena diferencia de 3 a 1 frente al Jorge Wilstermann de Boli­via, al que visitará la próxima semana en Cochabamba.

El primer tiempo del partido fue netamente de dominio liberteño, pero sin profun­didad. No supo encontrar el camino para abrir los espa­cios en la defensa cerrada que propuso el elenco boli­viano. Por los costados, Bocanegra y Bareiro por derecha fueron incisivos. Por izquierda, Espinoza y Bogarín no aportaron mucho. Arriba, a Cardozo no le llegaba una pelota de buena forma y Ferreira fue bien marcado por los zague­ros visitantes.

Así, con ese panorama, Libertad no supo sacar provecho de las pelotas para­das. Ni tiros de esquina y menos los tiros libres. El equipo boliviano buscó herir de contragolpe y cuando lo hizo dejó eviden­ciado a Bocanegra y Viera, mal parados. Adorno salvó un avance del equipo rojo y Silva fue observador.

En el complemento entró el juvenil Julio Enciso y movió todo el equipo. Abrió el camino del triunfo con un remate de media distan­cia que se desvió en Zen­teno. Poco después Car­dozo aumentó, pero la defensa albinegra se dejó sorprender y descontó la visita. Ya en tiempo adicio­nal, Adrián Martínez encon­tró el gol tranquilizador.

Mejoró con los cambios el equipo de Gustavo Morí­nigo, pese a que el primer tiempo regaló al rival, por­que no hizo bien el trabajo de equipo en varias zonas. La revancha será complicada en la altura, pero con esa dife­rencia a favor el Gumarelo puede seguir soñando en pasar a cuartos de final.