POR IRENEO ACOSTA R.

Periodista

Sportivo Luqueño regaló su partido anoche, le cedió el balón y la cancha a Defensa y Justicia y lo pagó muy caro. Se salvó de una goleada y ter­minó perdiendo en forma ajustada 2-1 en el partido de ida de la segunda fase de la Copa Sudamericana.

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Al regalarle todo el campo y el control del esférico, el equipo argentino lo manejó como quiso el juego. Si bien es cierto, Aldo Vera convirtió un gran gol de mediocampo en el minuto 8 y le dio esperanzas a su equipo. Pero el control siguió siendo del rival. A tal punto que Campisi salvó a su arco de varias caídas, pero no pudo cuando un balón rebotó en Vera y se metió en su propio arco. No tuvo reacción Luqueño y seguía metido atrás. En la comple­mentaria, con el aguerrido Ortega, poco pudo hacer y en los cambios, solamente con “Pulpito” Duarte acertó Paredes. Era inminente y llegó el tanto de Romero para marcar la diferencia.

Luqueño insinuó algo en los tramos finales, pero con Ortega expulsado y el cami­nar cansino de González Ozuna, aspirar a un empate era una utopía. Entonces, ni Ojeda con el arco en blanco pudo empatar y el cuadro de Varela se llevó el juego de ida. Respetó en demasía al rival el equipo auriazul y ahora debe buscar la hazaña para clasificar a otra ronda.

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