París, Francia. AFP.
El enfado de Kylian Mbappé el sábado, tras ser sustituido por su entrenador Thomas Tuchel en la victoria (5-0) ante el Montpellier, enturbia la marcha triunfal del PSG en el campeonato. Un nuevo capítulo de su distanciamiento, antes de jugar con el Nantes el martes en la 23ª jornada.
Hay algo que no funciona en la gran temporada del PSG, líder del campeonato francés con 12 puntos sobre el Marsella, clasificado para octavos de Champions, para la final de la Copa de la Liga y para cuartos de la Copa.
“No son unas imágenes buenas, pero no somos el único club que vive ese tipo de reacción. No estoy enfadado, pero estoy triste porque no es necesario”, señaló Tuchel tras el duelo.
“Pero seguiré así, tomaré decisiones deportivas. No jugamos a tenis, jugamos a fútbol, debemos tener respeto por todo el mundo”, añadió el alemán.