Guaraní es el primer equipo paraguayo que comienza a tra­jinar en la Copa Libertado­res de América. En el marco de la fase 1 de la competición, el Legendario visita hoy en la altura de Oruro (3.800 metros sobre el nivel del mar) al San José boliviano, que además de muchas debilidades en lo fut­bolístico, atraviesa una grave crisis económica y dirigencial. Es dirigido técnicamente por el argentino Omar Asad, en su momento compañero del ex arquero paraguayo José Luis Chilavert en Vélez de la argentina.

El representativo legendario tomó recaudos para amai­nar los efectos de la altura. El viaje se realizó ayer desde Asunción en un vuelo chár­ter hasta Santa Cruz. Recién hoy será el traslado a la sede de Oruro, horas antes del compromiso.

Todo el dinero que San José debe recibir por la Liberta­dores en premios está como garantía para pagar deu­das por más de 1,2 millones de dólares planteadas ante la FIFA, entre estas una al técnico peruano Julio César Uribe.

Guaraní y el director técnico Gustavo Costas lamentan no poder con­tar con el volante uru­guayo Rodrigo Fernández Cedrés, mal inscrito en la lista de buena fe, hecho que lo dejó sin posibilidades de tomar parte de la compe­tencia en esta instancia. El afectado fue anotado erró­neamente como Roberto Fernández en un caso insó­lito que tuvo sus repercu­siones.

El gerente administrativo fue cesado en sus funciones al asumir la responsabili­dad. El director técnico Gus­tavo Costas se mostró muy molesto, incluso dijo que si no se trataba de Guaraní, iba a renunciar al cargo.

El partido revancha se dispu­tará en Villa Elisa el próximo 29 de este mes. El ganador de la llave enfrentará en segunda ronda al Corinthians de Brasil.