Con el agónico gol de Roque Santa Cruz y el silbatazo final de Juan López, la emoción des­bordó a Rodrigo Rojas, el hijo de la casa que retornó para esta temporada que ya tiene dos títulos en su historial con el Olimpia. En la previa habló de un “sabor especial” por ser campeón en casa y tras con­seguir el “tetra” no ocultó su felicidad y confesó que volver al Decano fue la mejor deci­sión que tomó en su vida.

En su primer ciclo, a Rojas le tocó vivir una de las épocas más complicadas de la his­toria decana, es por eso que este bicampeonato tiene real­mente un sabor especial para el volante. “Vine para vivir esto. Quería volver al club que me dio todo”, expresó Rojas en conver­sación con Universo 970 AM.

Sobre sus primeros meses tras retornar a un Olimpia con una realidad completamente dis­tinta a la que tenía cuando se fue y con un equipo ya armado y establecido, Rodrigo mani­festó: “Sabía que tenía que empezar de nuevo y remar desde atrás, sabía que si no jugaba de entrada no era por nada personal, sino que me tenía que volver a ganar un lugar. Y lo hice, esos son los pequeños logros personales que me ponen muy contento”.

Rojas no solo se ganó el puesto de vuelta, sino que se volvió imprescindible para Daniel Garnero. Es el tercer jugador más regular de Olimpia en el torneo Clausura, solamente por detrás de José Leguiza­món y Alejandro Silva.

Horas después de la consecución del tetracampeonato, comenzó a correr el rumor de que la Organización Nacional Antidopaje (ONAD) estaría realizando un control antidoping aleatorio y el jugador elegido sería Roque Santa Cruz.

Pero el Dr. Agus­tín Casaccia, presidente de la ONAD, desmintió dicho rumor. “Ayer (domingo) ya se hizo el sorteo para el control, pero no salió Roque. No es cierto que iremos por él específicamente”, mani­festó a nuestro medio. Los jugadores de Olimpia sorteados para el control luego del juego ante Guaraní fueron Alfredo Aguilar y William Mendieta.