La arenga del vestuario y el ingreso de Matías Segovia por Fernando Ovelar en la complementaria mejoraron sustancialmente el funcionamiento albirrojo para revertir un marcador adverso y clasificarse a cuartos de final del Mundial.
Es que Paraguay estuvo nervioso y muy lejos del rendimiento de los primeros partidos en el período inicial. Se cometieron errores groseros en defensas y en ataque carecieron de precisión y claridad para dañar a la defensa argentina y encajó dos goles, primero de Exequiel Zeballos, de cabeza, y luego Matías Godoy amplió la ventaja antes de irse al descanso.
En la reanudación del juego, ya con la presencia de Segovia, apareció la Albirroja en todo su esplendor. Presionó bien arriba, tuvo precisión y se asociaron en la creación y llegó a la portería rival.
Segovia desaprovechó una clara ocasión, el portero le negó el grito. Torres también estrelló en el horizontal, presagiando el gol que llegó minutos después mediante un gol en contra de Lautaro Cano. Se entusiasmó Paraguay, presionó con todo y Diego Torres empató con un tiro esquinado.
Para cerrar una jornada épica, Diego Duarte, de contragolpe, con una excelente maniobra personal, clavó el balón en el ángulo para desatar la fiesta de la clasificación, demostrando todo el potencial en un momento crítico.
Ahora en cuartos de final medirá a Holanda, el domingo 10, a las 16:30.