Cerca del final del par­tido, Olimpia encajó el tercer gol que defi­nitivamente le pone muy cuesta arriba la serie porque hasta el 2-1 en contra todavía representaba un resultado aceptable y un precio bara­tísimo para una mala noche del equipo de Daniel Gar­nero. Pero hay que decirlo, el 3-1 condice más con el trá­mite general del partido.

Olimpia fue superado en casi todo, pero especialmente en la velocidad. Los ecuatoria­nos jugaron todo el partido dos cambios más arriba que Olimpia y la diferencia física fue demasiado evidente. Los dos primeros goles de la Liga, y hasta uno que lo anularon por el VAR, fueron claros ejemplos de esto.

Los extremos de la Liga des­bordaron siempre a los latera­les, que a su vez tuvieron nula participación en ataque; en el medio Leguizamón, Rojas y Sánchez llegaban a des­tiempo y en la defensa Jorge Arias tuvo una noche para el olvido, siendo principal res­ponsable del primer gol y no pudiendo con la potencia del delantero Rodrigo Aguirre. Lo rescatable: Roque Santa Cruz, una vez más.

Se cansó de bajar pelotas y aguantar arriba, pero ninguno de sus intentos surtió efecto. Ade­más, durante las pocas veces que el Decano se pudo juntar y comprimir en el medio, ya que ayer mostró ser un equipo largo y de mucho recorrido teniendo a la altura como verdugo, generó cosas inte­resantes y consiguió el gol de Rodrigo Rojas, lo que lo man­tiene vivo dentro de la serie. Es esto lo que deberá forta­lecer en el partido de vuelta para conseguir la diferencia que necesita.

La debilidad de la Liga estuvo en la falta de inteligencia para ocupar y atacar los grandes espacios entre líneas que dejaba el Franjeado; de lo contrario, la serie pudo aca­bar anoche en Quito.

Daniel Garnero explicó la mala noche de su equipo en Quito y manifestó que nunca fueron capaces de controlar el juego, pero está confiado en que las cosas serán completamente distintas en el Defensores del Chaco.

“No pudimos controlar el juego, al tener las imprecisiones no pudimos generar las ocasiones que solemos tener. No fue nuestro mejor partido, pero en Asunción las cosas serán diferentes”, aseguró el DT en conferencia de prensa.

Apenas finalizado el encuentro, la delegación de Olimpia emprendió viaje de retorno a nuestro país, con las mismas esca­las realizadas en el periplo de ida. El Decano enfrenta a River Plate el sábado y el siguiente martes tendrá el desquite ante los ecuatorianos en el Defensores.