Por Ireneo Acosta, periodista
Cuando todo parecía que en este torneo iba a comenzar con la pelea entre los más grandes del fútbol nacional, apareció uno de los “banjamines” para sacar pecho en estadio ajeno. River Plate venció a Guaraní en Dos Bocas por un contundente 3 a 1, después de mostrar buenos momentos de fútbol con Daniel Farrar, como el comandante de una nave que busca consolidarse en la categoría.
Con Gustavo Costas, los aurinegros comenzaron a creer que se podía marcar la diferencia de entrada, con la llegada además de Fernando Fernández y otros que quieren ser los grandes refuerzos del club. Se olvidaron que para armar un buen equipo se debe trabajar en conjunto y eso no mostró anoche el elenco legendario.
A lo largo del compromiso fue River el que se insinuó mejor en todas sus líneas, hasta que pudo pasar al frente con los aportes de dos grandes jugadores que tienen trayectoria. El regreso de Marco Prieto al fútbol local fue con el primer tanto para su equipo tras una asistencia de Jorge Salinas. Poco después se produjo una jugada donde el árbitro Ulises Mereles sancionó una falta, pero no dio penal. Por indicación de su asistente de fondo, David Ojeda, quien se convirtió en VAR humano, se marcó el punto penal. Salinas aumentó el marcador y creció la tensión en la toldería.
Costas no encontró la corrección y sacó a Ramírez para buscar con Contrera mejorar en la creación, pero no pasó nada diferente. En la complementaria Guaraní buscó descontar, mas Gavilán tapó todo. En una jugada no pudo y descontó “Fer-Fer”, pero enseguida Silvio Torales selló la victoria, que dejó preocupados a los aborígenes y satisfechos a los del Kelito.