• POR IRENEO ACOSTA 
  • Periodista 
  • ireneoacosta@gruponacion.com.py 

Los triunfos no tie­nen sustitutos, es la frase que se adecua al momento de Guaraní. Venció por una mínima diferencia de 1-0 a River Plate en su propio terreno y escala posiciones, incluso poniendo en peligro la ubicación de los dos equipos que están por encima de ellos, como Cerro Porteño y Libertad.

El solitario tanto de José Orti­goza, anotado en el segundo tiempo, sirvió para que el equipo dirigido por Gustavo Florentín se lleve los tres pun­tos en juego.

Un primer tiempo para el olvido fue lo que presenta­ron riveristas y aborígenes, en el que una llegada de Col­mán por parte de los locales y varios avances de la visita, pero sin definición, se pudie­ron ver en acción.

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La lucha por el balón en el mediocampo, con esporádi­cas apariciones de los volan­tes de creación, hicieron que el nivel de los dos equipos sea muy por debajo de lo espe­rado. Los dirigidos por Farrar dependieron mucho de Col­mán y Viera, pero ni Tora­les ni Salinas llegaron para el apoyo. Solitario, Ortigoza intentó hacer sus jugadas, pero sin Redes ni Aquino para apoyar. Mucho atacó, pero sin convencer.

En la complementaria todo cambió. La necesidad de sumar los puntos obligó a ambos elencos a jugar más abiertos y poner las pelotas en el área rival. Pero fue la visita el que llegó al gol, merced a su artillero. Después, los dirigi­dos por Daniel Farrar bus­caron el empate, con Robin Ramírez, quien estrelló un balón por el horizontal y se salvó la valla de Nacho Don.

Tres valiosos puntos que suma Guaraní le dan tran­quilidad tras la eliminación de la Sudamericana y apunta a buscar el vicecampeonato. Jugando así, lo puede con­seguir. El equipo riverista pierde terreno y promedios, lo que puede complicarlo en el futuro.

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