Montevideo, Uruguay. AFP.
El clásico del Río de la Plata entre Uruguay y Argentina por eliminatorias hacia Rusia 2018 tiene hoy un ingrediente añadido, por la expectativa de sus grandes estrellas y un duelo de entrenadores.
Con los dos equipos buscando pasaje directo al Mundial –los uruguayos van terceros, en zona de clasificación en tanto los argentinos, quintos, en área de repechaje–, el partido será de dientes apretados.
El DT celeste, Óscar Tabárez, había adelantado el lunes que Suárez está "en buen momento de esa recuperación", aunque no arriesgó opinión sobre su presencia en alguno de los dos cotejos de la fecha de eliminatorias ante Argentina y el 5 de setiembre frente a Paraguay, en Asunción.
"Es un partido muy, muy difícil. Pero el desafío pasa por ganar. Vamos a ver a quién le da más el cuero", resumió Tabárez, quien recordó que tuvo varias bajas "importantes" por lesión antes de este encuentro clave.
"Nos jugamos todo ante Uruguay", admitió el entrenador argentino Sampaoli.
El técnico asumió la conducción de una Argentina que no encuentra su juego, e introdujo algunas modificaciones en la estructura del equipo que sigue anclada en Messi.
Ante Uruguay, Argentina se presentará con Mauro Icardi, del italiano Inter de Milán, y sin Gonzalo Higuaín, de la italiana Juventus que no fue tenido en cuenta. Además, sumó a varios futbolistas del medio local para conformar un equipo con clara vocación ofensiva.