Por primera vez en mucho tiempo, una jirafa sin manchas nació a finales de julio en el zoológico “Brights” de Tennessee, Estados Unidos. Se trata de una hembra, con pelaje de color marrón sólido, según reveló la prensa internacional. No hay otro ejemplar conocido en el planeta.
Científicos reconocieron que en lo que refiere a la especie, las jirafas reticuladas, podrían nacer ocasionalmente ejemplares sin manchas, pero hasta el momento no hay otro ejemplo conocido que viva en algún lugar de la Tierra. No sería el único caso registrado en la historia. En 1970, Japón documentó un caso similar, pero no existen fotografías del ejemplar.
Según investigaciones, las manchas distintivas del pelaje oscuro que se encuentran en las jirafas reticuladas no son aleatorias en patrón o forma, sino que se heredan desde la madre. Los patrones distintivos proporcionan camuflaje, lo que sugiere que las jirafas nacidas sin ellos podrían tener dificultades para esconderse de los depredadores en la naturaleza.
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Dadas sus características y los riesgos que supone, se cree que la jirafa sin manchas de Tennessee estará mejor en cautiverio. Apenas tres semanas después de su nacimiento, ya mide 1,83 metros de altura, reportaron desde el zoológico. Por el momento, aún no se decidió un nombre para la hembra que ya cautivó las redes sociales.
Desde el zoológico hicieron hincapié que este bello ejemplar sin manchas sirve para recordar que, desde hace décadas, las jirafas están transicionando hacia una “extinción silenciosa”, principalmente debido a las pérdidas de hábitat sin restricciones, los disturbios civiles y la caza furtiva. En los últimos 30 años, la población de jirafas en África se ha desplomado un 40%, dejando solo 16.000 ejemplares de la especie de “reticuladas”.
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