“La salud del planeta está íntimamente ligada con la salud de los bosques”, comentó a La Nación Víctor Ibarrola, director ejecutivo de A todo Pulmón. La oenegé paraguaya que impulsa y promueve proyectos sobre el cuidado del medioambiente realizó esta mañana una plantación de árboles nativos para conmemorar el Día Nacional del Árbol, fecha que en Paraguay se celebra cada 19 de junio.

“Hoy más que nunca festejar el Día del Árbol con una plantación es un aporte muy concreto al medioambiente y un mensaje contundente de acción, porque nuestro planeta nos necesita”, expresó Ibarrola, que junto con su equipo y diversos voluntarios que se sumaron desde distintos puntos del país plantaron casi 25.252 árboles.

Foto: Gentileza.

“Este año, por la cuarentena, no pudimos tener miles de voluntarios como en la última plantación, pero plantamos en nombre de todos ellos, ya que muchísimas personas, familias y empresas donaron para que podamos hacerlo. Yo aliento a que todos planten y cuiden árboles porque es un acto de amor que nos permitirá dejar un planeta mejor del que recibimos. Además, es una manera de retribuirles todo lo que nos dan: oxígeno, vida, sombra, alimentos, etc.”, reflexionó.

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La plantación de A Todo Pulmón arrancó a tempranas horas en la Reserva Guarapi, en Yaguarón, donde se plantaron diferentes especies de árboles como el Samu ́u, Yvyra Pytã, Lapacho amarillo, Lapacho rosado, Inga, Ñangapiry, Yvapovõ, entre otros.

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¿Por qué los árboles son importantes?

Los árboles limpian el aire, marcan las estaciones del año, combaten el cambio climático, disminuyen la contaminación acústica, regulan el flujo del agua (previniendo inundaciones), proporcionan sus copas y un hábitat para la vida silvestre, generan oportunidades económicas, proporcionan oxígeno, ayudan a prevenir la contaminación del agua, refrescan las calles y ciudades, nos protegen de los rayos ultravioletas, proporcionan madera, conservan la energía, entre muchas otras cosas.

Los seres humanos inspiramos y espiramos entre 5 y 6 litros de aire por minuto, que en 24 horas son entre 7.200 y 8.600. Se necesitan 22 árboles para suplir la demanda de respiración de una persona por día. Es por eso que si los árboles se extinguen, estamos poniendo en peligro nuestra propia vida.

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