“En el show en San Bernardino vamos a hacer un paso por los temas clásicos de Los Cafres y también vamos a presentar algunas canciones que forman parte del último trabajo discográfico de la banda, son temas nuevos porque no los estamos tocando”, explica Gonzalo Albornoz, bajista del grupo Los Cafres, que forma parte del programa del Reciclarte 2020, que tendrá lugar el 1 de febrero en el Anfiteatro José Asunción Flores de San Bernardino.

La banda celebra con más música sus 30 años de trayectoria y así viene desarrollando una nueva dinámica de trabajo, que apuesta a la espontaneidad de su arte en miras a un disco triple, pronto a editarse.

“El disco tiene un par de reversiones, pero la mayoría son temas nuevos, hay algún cover también. La mayoría de los temas son lo-fi, porque queremos mostrar la forma en la que los temas nacen, entonces son grabados con un sonido como más caseros. De repente en un jardín, con un micrófono, en un estilo acústico”, explica Albornoz.

La banda nació a finales de la década del 80 y tras varias publicaciones, el éxito indiscutible llegó más de 10 años después, con el hit “Si el amor se cae”, del disco “Quién da más?”, del año 2004.

“Nosotros, después de 30 años encontramos el equilibrio, como un matrimonio múltiple. Hemos aprendido a respetarnos, a llevarnos bien a que las cosas fluyan. Siempre, igual como en todo matrimonio hay alguna cosita de vez en cuando, y siempre lo hablamos, y es más fuerte lo que nos une, que es la música y lo que disfrutamos viajando y conociendo diferentes lugares”, explica.

“La creatividad está intacta, que estamos haciendo 3 discos en 1, son como 30 canciones nuevas, y todas pensadas, creadas y grabadas sobre la marcha. Cuando terminamos el primero aún no se había compuesto los temas del siguiente”, agregó.

EL PÚBLICO

“Hemos ido menos de lo quisiéramos haber ido para Paraguay, y San Bernardino es un lugar increíble y más para gente como nosotros que vive en una ciudad de cemento. El público de reggae de Paraguay y de toda América es de sentir la música muy adentro y muy afuera, es de los que siente la música, tiene una forma de disfrutar de la música, a veces los miro y los veo bailando, y con los ojos cerrados. Cuando hemos ido a Paraguay hemos sentido que la gente lo vive así, lo disfruta mucho”, refirió el bajista.

Gonzalo explicó que en estas tres décadas con el género originario de Jamaica, vieron varias oleadas de auge del ritmo, pero solo con el tiempo logró quedarse en el gusto de la gente.

Una de las cosas que pasó fue “la evolución del reggae en español, porque es un género que fonéticamente hubo que adaptarlo para cantarlo en español. En principio era bastante complicado hacer reggae con letras en español”, comentó.

Además explicó que “hemos latinoamericanizado al reggae”. Este género musical contiene en sí toda una cosmovisión que no es propia de esta zona del globo, según dijo.

“Pero hay cosas que no cambiaron, esta cosa del ritmo que es más o menos tántrico o hipnótico. Además, el mensaje del reggae es universal, y hace a todos los humanos. Dentro de las letras dice cosas sobre la no discriminación, la igualdad social y está en contra del racismo”, explicó.