“En 1975 Armando Manza­nero vino para presentarse durante una semana en ‘Can­dilejas’ y en el penúltimo día de sus shows, se le acercó un miembro del Ceremo­nial del Estado, Pappalardo, para comentarle que el pre­sidente estuvo presente de incógnito durante el reci­tal. Acto seguido, le ofreció conocer la construcción de Itaipú como un gesto hacia él. Yo estaba presente ahí y le dijo ‘ahí está Kike, ¿por qué no vas con él?’. Y así fue”, comenta Adolfo “Kike” Kro­nawetter, músico y hombre de leyes acerca de cómo se dio inicio a la amistad que lo une con el cantante y com­positor mexicano Armando Manzanero.

En la última semana, Man­zanero ofreció un concierto junto al grupo Mocedades, ocasión en la que “Kike” logró cruzarse con un abrazo fra­terno con su amigo de tantas décadas. Se acercó a los came­rinos después del concierto y logró compartir impresiones del espectáculo montado por Inout Music.

“Después de irnos a Itaipú, que estaba en construcción aún, fuimos a comer a un res­taurante ahí, en Brasil. En un momento, Armando me dijo: ‘Oye, Kike, vamos a cantar­nos algo’, sin que nadie nos haya pedido él quiso tocar. Así a veces somos los músi­cos, cuando nadie nos pide tenemos aún más ganas de subir al escenario”, narró Kronawetter. En dicha oca­sión interpretaron la canción “Mía”, obra del mexicano que forma parte del repertorio del paraguayo.

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La primera vez que ambos músicos se vieron fue en el marco del Festival de Viña del Mar, en Chile en el año 1971. En esa edición, “Kike” formó parte de la etapa com­positiva, mientras que Man­zanero asistió en carácter de estrella invitada.

En una de sus visitas al Para­guay, Armando confió en su amigo para la conformación de grupo de soporte durante un show en el Yacht y Golf Club, favor que logró conso­lidar todavía los espacios de cercanía entre ambos.

TODA LA VIDA, MANZANERO

Kike comentó que tiene una gran afinidad con la música romántica desde los recorda­dos tiempos de las orquestas, entre los 60, 70 y 80. “Yo era el único que cantaba boleros en las fiestas”, confesó.

“Yo canté casi todos los temas de Manzanero a lo largo de mi carrera y fue el causante de varios matrimonios, incluso el mío. Yo conocí a mi esposa con el tema ‘Mía’ y con ese tema me casé. Estaba cantando en un concierto, la vi, me acer­qué y le canté. Después vino el noviazgo y finalmente me casé”, comentó Kronawetter.

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