Por Carlos Giménez, periodista, cultura@gruponacion.com.py

Tras dos ediciones consecutivas con presencia institucional a través de un stand oficial en Ventana Sur (ventana-sur.com), Paraguay perdió un relevante espacio en el 2017 y 2018 en el principal mercado de cine latinoamericano. Aun así, del 10 al 14 de diciembre pasados el evento desarrolló su décima edición en Buenos Aires con la presencia de una docena de productores paraguayos, quienes relatan sus experiencias y acentúan la necesidad de volver a contar con un espacio paraguayo en la edición 2019.

En Ventana Sur 2018 acudieron: Aline Moscato (Amamos Cine), Joaquín Serrano y Carlos Martínez Ojeda (Kili Video + Otromundo Audiovisual); Osvaldo Ortiz Faiman (Puatarará Films), Gabriela Sabaté (Sabaté Films), Vicky Ramírez Jou (HEi Films), Sofía Paoli (Tekoha Audiovisual), Ramón González (Arandú Films), Lena Fernández y Simón Franco (Lemon Cine); Nicolás García y Martín Oviedo, así como Guillermina Villalba (Dirección Audiovisual de SNC) y Rodolfo Serafini, de la embajada paraguaya en Buenos Aires.

CINE DEL INTERIOR

“La experiencia de participación ha sido por demás positiva”, mencionó Aline Moscato, productora de Amamos Cine, quien acudió a Ventana Sur con los títulos “La redención”, de Herib Godoy; “Jubentú”, de Ricardo Morínigo; “Buenaventura, el custodio de Yaguarón”, de Nancy García; “Un cuarto para soñar”, de su autoría, y el cortometraje “Mymba”, de Néstor Amarilla Ojeda.

“Más allá del aprendizaje que conlleva la asistencia a charlas, encuentros y oportunidades de formación y negocios, para nosotros particularmente uno de los logros más significativos ha sido el intercambio enriquecedor de experiencias semejantes con relación al modelo de producción que queremos fortalecer en Amamos: un cine hecho con lugareños y profesionales, historias autóctonas y presupuestos reducidos. Hemos encontrado que varios países latinoamericanos tienen actualmente, a pesar de la historia particular de cada uno, realidades semejantes a la nuestra: una brecha entre el cine que se hace en las capitales y el cine del interior; una necesidad urgente de potenciar el cine departamental, provincial y regional, muchas necesidades de políticas de mercado que permitan más accesibilidad de nuestras películas a las salas de cine con una competitividad real ante los productos de Hollywood; diversidad de opciones de distribución: circuitos alternativos, por ejemplo. Y, por otro lado, historias ricas, deseo creciente de las comunidades de contarlas y sinceridad en el proceso creativo con intenciones claras de unir esfuerzos, más allá de lo económico, para crecer juntos”, describió.

“Es fundamental que podamos tener una organicidad en el ámbito audiovisual a nivel país, poder ser una ventana de lo que hacemos y de lo que se puede hacer en Paraguay”, opinó Moscato. “Mucho es lo que hemos logrado los productores autogestionados, lo cual demuestra que muchísimo más se lograría con una coordinación y fondos que garanticen la presencia como país con un catálogo de productoras y sus servicios, listado de obras en proceso, opciones para ofrecer como país a la industria regional, listado de locaciones, profesionales, etcétera. Son gestiones que, más allá del costo económico, demandan que nos unamos los profesionales de todo el país. Esto nos permitirá exportar e importar tanto servicios como productos audiovisuales con mayor facilidad. Auguramos que así sea en el 2019”.

HISTORIAS IDENTITARIAS

“Este año vine para reencontrarme con colegas que conocí en laboratorios de Bolivia Lab, DocTv y Labex, que generaron un vínculo muy importante y ahora estamos apoyándonos en los proyectos que cada uno tiene”, expresó Sofía Paoli Thorne, directora y productora ejecutiva de Tekoha Audiovisual.

“He participado con dos proyectos. Uno es mi película documental, por la que fui a citarme con varios productores argentinos y hemos conseguido un interés recíproco para hacer una coproducción en este 2019. En este proyecto también me encontré con Willi Behnisch, quien es mi director de fotografía, que trabajó con Paz Encina en ‘Hamaca paraguaya’. El otro proyecto es la película ‘La afinación del diablo’, de Juan Carlos Lucas, con quien hemos conseguido una importante distribuidora como aliada, y hablé con programadores de festivales, de los que tendremos novedades en breve”.

“También se realizaron alianzas con profesionales del cine a nivel latinoamericano para la realización de talleres de formación audiovisual en el interior del país”, señaló Thorne. “Creo importante la presencia de todos los sectores de Paraguay en este evento, más aún de los sectores independientes, como es nuestro caso, porque muchos festivales están interesados en las historias identitarias de Paraguay”.

“ALAS DE GLORIA”

“Fuimos por primera vez a conocer el evento y el mercado”, dijo Joaquín Serrano, más conocido por su faceta de actor como también productor de Kili Video y Otromundo Audiovisual, junto con Carlos Martínez Ojeda. “Lo que más destaco es la cantidad de profesionales de la industria a nivel mundial. Te codeas con productores, directores, guionistas, distribuidores y agentes de todos los continentes. Nosotros fuimos a buscar productores/as que estén interesados en coproducir animación y conocimos a muchos. Lo más importante para nosotros fue haber conocido a productores bolivianos que estaban muy interesados en coproducir. Queremos unir ambos países a través de la película”.

“Llevamos ‘Alas de gloria’, nuestro proyecto de largometraje de animación situado en 1932, en la Guerra del Chaco. Nos medimos con el universo de la animación de las grandes ligas y conocimos aún más sobre la demanda de animación de los diferentes mercados”, comentó Serrano.

“En esta edición fuimos varios paraguayos y es de suma importancia, ya que la industria cinematográfica genera un gran aporte económico en los países que la desarrollan. Es importante que tengamos una presencia formal de Paraguay, ya que esto trae mejores oportunidades de negocio, todos los países de la región tienen presencia oficial con stands: Argentina, Uruguay, Brasil, Chile, Perú, Colombia, entre otros. Y no podemos estar ausentes en uno de los mercados más importantes de Sudamérica, donde se define la compraventa de contenido audiovisual. Lo importante es mirar a futuro y en equipo”, finalizó.

RED DE PRODUCTORES

“Esta edición 2018 fue especial porque fue el primer año en el que participé con mi productora Arandú Films con varios proyectos bajo el brazo en compañía de dos socios productores, María Laura Buslemen (Argentina) y Rafael Prieto (Venezuela), con quienes armamos ‘Servicios Integrales de Producción’, que es una sociedad en la que estamos trabajando en producir contenidos audiovisuales de formación y de entretenimiento para las diferentes plataformas”, indicó Ramón González. “Durante el mercado logramos expandir nuestra lista de productores con la idea de armar una futura red de productores de América Latina, en la que la idea es ayudarnos entre todos con los proyectos de cada productora buscando levantar financiamiento en los países que representa cada uno”.

“Cerramos oficialmente coproducción con Paraguay a través de Aline Moscato, con su productora Amamos; en Chile, con Gonzalo Oyarce Cortés y la Corporación Fílmica La Marioneta; en Venezuela con Rafael Prieto, con La Camarita Productora; en Argentina con María Laura Buslemen Productora y, finalmente, desde Arandú Films (por Paraguay-Argentina) como agente nucleador de la red. La idea es trabajar en varios proyectos que están en diferentes etapas de producción y llevarlos a nuestros respectivos países en búsqueda de financiamiento para la realización y posterior distribución”, dijo González, cuya compañía preparó seis proyectos de largometraje en desarrollo: “Por ver si mato penas”, “Perros de arena”, “El porteño”, “Todo lo cercano se aleja”, “La verdad escondida” y “Chákope”.

“Ventana Sur es una ventana directa a la industria del cine con agentes de ventas de todas partes del mundo, productores, directores, actores, distribuidores, cadenas de cine, todos reunidos en un solo lugar donde podés concretar directamente negocios con el ‘face to face’. Es vital que haya cada año un stand oficial de Paraguay y, además, una delegación paraguaya en Ventana Sur para que se lleven las producciones y se puedan generar vínculos para la internacionalización de los proyectos. Pero pienso también que no solo es necesario ir a Ventana Sur, sino tratar de ir copando más mercados de Latinoamérica como el BoliviaLab o el Mercado de Guadalajara, los cuales al igual que Ventana Sur representan un trampolín que beneficiará de gran manera a las producciones nacionales en los siguiente años”, apreció.

“Paraguay es aún considerado un país en vías de desarrollo, de nosotros depende cambiar eso a corto, mediano o largo plazo y hacer que nuestra incipiente industria cinematográfica acapare la atención de todo el mundo (al igual que ‘Las herederas’), ya que tenemos miles o millones de historias que contar”, concluyó.