Nacido en Asunción (Paraguay), su labor creativa se ha desarrollado tanto en esta ciudad como en San Pablo (Brasil), donde reside desde la década de 1970, Bernardo Krasniansky es considerado como un artista fundamental en la escena contemporánea latinoamericana. Por ello, el Walden Gallery, una plataforma experimental establecida por Ricardo Ocampo desde el 2016 en el Distrito de las Artes del barrio de La Boca, en Buenos Aires, presenta la exposición de xerografías denominada “Autorretratos y geometrías”.
La muestra ofrece un importante grupo de obras nunca antes expuesto, conformado por cuatro series de obras realizadas en Brasil en las postrimerías de los 70 y comienzo de los 80, partiendo de la experimentación con sistema de fotocopias, especifica el curador Manuel Neves.
La exposición está integrada a las series de “El Caballero” y “Las parcas” de 1977 y 1982, “Sueño” y “Geometría” de 1979 y algunos experimentos con autorretratos de 1979, 1982 y 1983. Durante el proceso de producción de estas obras, realizadas en hojas comúnmente utilizadas para esa función, fotocopiar, Bernardo Krasniasky mostró su resultado a su amiga Mariajosé de Carvalho (San Pablo 1919/1995).
Krasniansky relata que cuando Mariajosé de Carvalho conoció la serie de autorretratos realizados con fotocopia, donde básicamente el artista reproduce su rostro en diferentes posiciones y en algunos casos también su mano, vio en ellos a un personaje medieval, frente a su destino después de una batalla.
Krasniansky comenzó a actuar en el ambiente de las artes visuales desde muy joven, apenas a los 15 años, a mediados de los años 60. El artista produjo pinturas iniciales, influenciado por el arte pop, pero también por la visualidad generada en Hollywood, las historietas, la publicidad y el music hall. En 1969, el artista se presentó en la 10ª Bienal Internacional de San Pablo y esto posibilitó su traslado a Brasil para realizar estudios terciarios.