Tras el épico debut de Imagine Dragons, con lluvia incluida, en la primera fecha del Asunciónico, el martes último; todas las fichas se encimaron sobre The Killers, por la noche del miércoles, y la banda arrasó. A cinco años de su primera visita, la banda norteamericana sostuvo el auténtico espíritu de "mega" que necesitaba el megafestival, y con estridencia rockera.
Más temprano, la dupla sueca Galantis desplegó –hasta ahora– uno de los mejores sets de sonidos electrónicos, sintonizado con una furiosa puesta en escena de luces y efectos, que solo podía irradiar la máxima fiesta a la multitud, que se mostró mayor que la de la primera jornada. Destaque aparte merece Kchiporros, que tocaron con 40% de sus integrantes (pero luego el resto se fue sumando), para dar un mensaje de Unicef: 6 de cada 10 jóvenes no terminan la escuela secundaria en Paraguay. En tanto, Babasónicos mostró sus hits, aunque la banda transmitió poco entusiasmo. En el escenario alternativo, las bandas Mothership, Eeeks y Kita Pena agitaron a un público paralelo, con una interesante variedad de sonidos emergentes. Este espacio es una gran conquista para la música local.
Con el barro heredado, y 9 minutos de atraso (que jamás importó), The Killers tiró toda la carne al asador: "Bienvenidos a nuestro maravilloso show", saludó Brandon Flowers, en español, tras abrir con "The man".
Desde allí fue un viaje de 100 minutos, a través de 19 hits, en el furor de un cuarteto prolijo, que suena intenso; también con una puesta visual estremecedora. "Hola paraguayos, ¿nos extrañaron o qué?", dijo Flowers, también en español. Para la anécdota, el cantante tuvo una caída. Para el clímax fue subiendo el pogo de satisfacción: "Read my mind", "All these things that I've done", "When you were young" y "Mr. Brightside". Asunciónico se despide el próximo martes, con Gorillaz como lujo.