La Misión Mágica – que se presenta en el Teatro Guaraní- incluye escenas y canciones de personajes de cuentos clásicos que los chicos admiran. Los protagonistas de esta pieza teatral con elenco internacional, cuentan cómo viven la aventura de compartir la fantasía desde el escenario.

Nina es una niña que sueña con viajar a ese mundo que forma parte de sus libros y sus sueños. La varita mágica la elige para hacer la travesía con el fin de resolver los conflictos en los que se encuentran atrapados los protagonistas de los cuentos de hadas, porque los niños ya no leen ni creen en la fantasía.

“En cada historia hay un aprendizaje y los problemas se resuelven entre todos gracias a la ayuda de los niños”, explica Gina Paturzo, codirectora y coautora de la obra teatral, cuyas entradas para las últimas funciones de los días sábado 21 de julio, a las 18:00 y el domingo 22 a las 17:00 pueden adquirirse por Red UTS.

“El objetivo es reunir todos esos aprendizajes que nos enseñarán que para que los cuentos tengan sus finales felices, los niños deben seguir creyendo, los padres leyendo y compartiendo cuentos y fantasías con los niños”, menciona la artista rosarina que se encuentra por cuarta vez en Paraguay.

Con Lourdes Estrella codirigen el espectáculo, un trabajo muy complejo porque también son actrices de la obra. “Nos dedicamos a montar la obra, y una vez que ya está la estructura armada y las marcaciones aprendidas, nos dedicamos a nuestros personajes. Las dos escribimos los textos en base a nuestra idea. Yo me encargo de la parte musical y Lourdes de la parte actoral. También tenemos dos bailarines y coreógrafos en el elenco que nos ayudan con las coreografías, Lara Torres y Kevin Quiroz”, explica.

-¿De qué manera se busca recuperar la magia y la fantasía en una época en que los chicos tienen acceso a todo tipo de estimulación a través de la televisión e internet?

-El teatro es ese instante real, compartido inmediato que nos hace crear una magia entre todos los que nos encontramos inmersos en la historia, tanto el público como los artistas. Buscamos que la obra sea el disparador de la curiosidad e interés que queremos despertar en niños y padres para que quieran seguir compartiendo fantasía. Como en una película o en un libro principalmente, en el teatro se abren las puertas a la imaginación, y a todo aquello que permite transitar la infancia de manera creativa y real.

-El musical es un estilo de teatro muy demandante, ¿podrían comentarnos, vos y el elenco la formación que tienen y cómo se preparan ante cada desafío escénico?

-Todos los artistas de la obra tenemos una formación en teatro musical de años de estudio. Todos somos cantantes y tenemos un entrenamiento vocal semanal. También hay bailarines en el elenco y todos entrenamos danza jazz y otros estilos. También integramos una compañía de espectáculos tanto infantiles como adultos en Rosario, siempre en lo que es la comedia musical.

-Estuvieron anteriormente en Paraguay, ¿podrían comentarnos la experiencia de presentarse fuera de su país?

Ya es la cuarta vez que venimos a Paraguay. Nos sentimos muy cómodas en Asunción, nos reciben muy bien y amablemente. El público es cálido y siempre demuestra estar muy a gusto con lo que presentamos. Genera mucha expectativa actuar para niños de otros países. Pero por suerte siempre cumplimos con nuestro objetivo.

-El acceso al arte, además de entretener, ¿qué le aporta a los más pequeños?

-Les aporta la posibilidad de desarrollar la creatividad, la imaginación. El arte nos brinda herramientas para cambiar la forma en la que vemos las cosas. Nos da un mayor optimismo.

-¿Por qué los padres deberían instar a sus hijos a disfrutar del teatro?

Porque es un momento real compartido donde la magia ocurre. Hay que estar abiertos a recibir lo que esta ocurriendo. Es comunicación real.

Del arte hacia la comunicación

“Es la posibilidad de compartir un instante único, un momento de comunicación real entre los personajes de la fantasía, los artistas, los niños y sus padres”, continúa diciendo sobre “La Misión Mágica”, Gina Paturzo, quien también hace el papel de Hada Madrina.

La licenciada en Fonoaudiología, cantante y docente de canto de niños es la directora y entrenadora vocal del elenco.

"Mi tarea siempre fue imbrincar mi profesión con mi arte, en la enseñanza y el cuidado vocal a los cantantes, es algo que ocurre diariamente”, asegura.

“Cada uno de los personajes de la obra enseña a creer que los sueños pueden hacerse realidad si uno cree en ellos". Así lo manifiesta María Lourdes Estrella, que es la directora comedia musical y la otra autora de “La Misión Mágica”. Además se pone en la piel de La Bella y Ursula.

"Entrar y salir de cada cuento, transmitir la magia de cada uno de ellos a los niños es un desafío para mí, resalta Lara Torres, quien hace de Nina. “Al ser mi personaje una niña me hace sentir una más de ellos. Ver la cara de cada niño cuando ven a su princesa preferida o a su personaje favorito me remonta a mi infancia y me recuerda a mi niña interior. Nina es un personaje muy lindo y divertido. Puedo vivir la aventura de los cuentos desde adentro y puedo disfrutarla junto al público ", agrega la actriz bailarina, cantante y estudiante de Fonoaudiología, también se desempeña como vestuarista y coreógrafa del elenco.

"La oportunidad de disfrutar de la magia y la fantasía, de ver la ilusión de los niños hecha realidad" no tiene precio, según Sofía Labadie, quien hace de Elsa y Campanita. Cantante y actriz, docente de canto para niños y estudiante de la carrera Fonoaudiología, Sofía dice disfrutar mucho de sus personajes.

Carolina Estrella, actriz cantante y docente y traductora de inglés, es La Sirenita y Ana piensa que la obra muestra que nunca se debe perder el niño interior. “Sii uno tiene fe en los sueños, ellos siempre se cumplen", agrega.

El desafío de “La Misión Mágica”, para Carla Paturzo -sonidista y musicalizadora de la pieza- es lograr desde la fantasía que los chicos de quieran formar parte". Mientras que para Kevin Quiroz, quien hace del Capitán Garfio, lo principal es divertirse y jugar para poder crear personajes y roles tan diferentes dentro de una misma historia" . El actor, bailarín y cantante del elenco es también coreógrafo y profesor de danza.

"Cuando creemos en algo con mucha fuerza, se vuelve realidad", asegura Bruno Aragonés. El cantante y músico con esa fe se convierte en Olaf, el hombre de nieve y se pone a volar con el polvo mágico de Peter Pan.

“En la actuación, se trata de comunicar un mensaje más allá de la forma artística en que se elija hacer. Se comunica acerca de la comunicación. Lejos de ser redundante, es específico y actual. Queremos hacer reflexionar sobre cómo se concibe el tema de la comunicación hoy en día. Para conectarnos tiene que haber un disparador que nos despierte el deseo de querer hacerlo. El arte es el mejor disparador. Pero no es actuar por actuar, el mensaje tiene que estar claro, y la manera tiene que ser divertida y con los estímulos justos para que la comunicación sea efectiva", resume Gina Paturzo.

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