El último viernes, el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión Europea (UE) firmaron un Tratado de Libre Comercio que facilitará el intercambio económico entre 31 países del mundo, cuatro de nuestro continente y 27 de Europa. Afectará a más de 700 millones de personas, entre las que estamos los paraguayos. El acuerdo suscrito en Montevideo debe ser ratificado por los parlamentos de las naciones firmantes para que luego entre en vigencia.
Aunque se trata solo de un primer paso constituye uno de los hechos políticos de mayor relevancia internacional que puede impulsar la economía de los países, especialmente la de Paraguay que necesita que se derriben las trabas para aumentar sus exportaciones hacia esa poderosa región del planeta. Este acuerdo es el tratado comercial de mayor relevancia que se ha suscrito en la historia de nuestros pueblos, ojalá se ratifique y se pueda poner en vigor para el provecho de nuestras naciones. Eliminar barreras y abrir nuevas puertas siempre será de mucha utilidad para todos, en especial para nuestro país, una de cuyas políticas es aumentar el intercambio de productos y servicios con la mayor cantidad de economías del planeta.
Las importaciones del bloque sudamericano de los países de la UE alcanzaron en 2023 el equivalente de 59.000 millones de dólares norteamericanos, en tanto que las exportaciones del Mercosur a las naciones de dicho bloque fueron por valor de 56.684 millones de dicha moneda.
Al importar más de lo que exporta a la UE, el Mercosur tiene un déficit comercial de 2.316 millones de dólares, con lo cual los europeos están en ventaja al vender más de lo que compran. Con este acuerdo nuestros países tendrían que revertir el saldo negativo comercial a favor del Mercosur con más ventas que compras. Paraguay como productor de alimentos se verá favorecido y tendrá que aprovechar las ventajas arancelarias que supone.
El documento que establece los puntos acordados entre el Mercosur y la UE lo firmaron el viernes último Úrsula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y los presidentes de los cuatro países miembros activos del Mercosur, entre los que estaba el de Paraguay, Santiago Peña. La cumbre del grupo estaba presidida por el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, a quienes acompañaban los otros mandatarios del grupo.
Si bien el acuerdo favorecerá al Mercosur al eliminar los aranceles de importación de los 27 países del norte, al parecer los europeos podrían ser los más beneficiados porque son más países con una producción de enormes proporciones.
La presidenta de la UE señaló que el tratado será muy ventajoso para los europeos, pues son alrededor de 60.000 empresas que venden a los países del Mercosur y que mediante el acuerdo podrán ahorrar 4.000 millones de dólares.
El comercio de automotores es uno de los sectores que cosecharán grandes ventajas, pues la eliminación de aranceles para los vehículos eléctricos se extenderá por 18 años en lugar de los 15 que se preveía inicialmente. Paraguay, gran productor de energía limpia, podría aprovechar más que otras naciones la importación de los autos eléctricos en gran cantidad para importar menos petróleo y no contaminar el ambiente con los residuos que producen los combustibles derivados del mismo.
Si bien el contrato suscrito el viernes último con los europeos es de extraordinaria importancia, enfrenta una dificultad fundamental: tiene que ser aprobado por los 27 gobiernos europeos entre los cuales hay opositores recalcitrantes, como Francia. En ese país los productores rurales no quieren ningún acuerdo de esta índole porque los productos del Mercosur serán una seria competencia por su calidad y precios, cosa que rechazan para mantener su exclusividad con el proteccionismo.
Aunque el acuerdo internacional no tenga una vigencia inmediata, las negociaciones realizadas por los gobiernos del Mercosur harán que se fortalezcan las bases del bloque regional de cara al mundo. Existen muchísimas naciones con las cuales el bloque mercosuriano puede mejorar los intercambios económicos. El convenio suscrito con la Unión Europea hará que se pueda avanzar en las negociaciones internacionales con mayor peso para conseguir los objetivos de los cuatro países que componen el mercado común. Y así avanzar en la tarea de obtener mayor bienestar para la población que compone el bloque.