Al cumplirse los cinco meses de la asunción del nuevo gobierno nacional, el Paraguay va dibujando claramente su perfil de país triunfador, que al fin de cuentas es el rostro deseado para seguir en el rumbo del crecimiento y bienestar. Mirando los números y cotejando el movimiento de la actividad económica paraguaya, se puede afirmar categóricamente que el 2023 ha sido un buen año y que el que se ha iniciado recientemente muestra un rostro positivo que se puede concretar con el esfuerzo de siempre y la conjunción de factores favorables.
Como el futuro tiene un fuerte porcentaje de imprevisibilidad, sobre todo cuando los elementos dependen de cuestiones relacionadas con el clima o la política internacional que condiciona al comercio mundial, a menudo llena de sorpresas, todo cuanto se diga tiene siempre una carga de limitada certeza.
No se puede desconocer que lo que está ocurriendo hoy en gran medida depende de lo que se hizo u ocurrió ayer y que lo que suceda en el futuro será consecuencia del presente. Que es donde y cuando se elabora casi todo lo que vendrá. Si hay buena cosecha, es porque se realizó una buena siembra, por lo que siempre es mejor sembrar mucho y bien para conseguir un final feliz, como siempre se espera.
Debido a la buena siembra realizada en términos políticos y económicos es que razonablemente se espera un año con números positivos y nuevos logros. Para comenzar, hay que apuntar que en 2023 el crecimiento de la economía paraguaya fue de 4,5 %, según el Banco Central del Paraguay (BCP), el más alto de América del Sur y más de 3,5 % por encima del promedio regional. Según la previsión del Banco Mundial, se llegó al 4,8 %.
Con el excelente desempeño, se está dejando atrás los efectos negativos de las sequías en la producción y exportaciones agrícolas y la menor producción de energía eléctrica desde 2019. El crecimiento registrado últimamente es consecuencia del buen comportamiento agrícola, que hizo crecer las exportaciones, el aumento en la producción energética y el mayor consumo detectado debido al menor crecimiento inflacionario. Lo que habla de lo bien que se ha trabajado y que da pie a sentimientos positivos para este año que recién comienza.
Un dato importante es que la inflación de nuestro país es una de las más bajas de la región, que cerró el 2023 con 3,7 %, por debajo de la meta oficial de 3,8 %. Solo Ecuador, Bolivia y Perú tuvieron índices menores al paraguayo. En diciembre, la confianza del consumidor subió en Paraguay, por las buenas perspectivas que avizora la gente que trabaja y produce, según el BCP.
La economía paraguaya tendrá este año un crecimiento del 3,8 %, según el Banco Mundial, y estará en primer lugar, por encima de los demás países de la región sudamericana.
Otra información positiva es que el organismo norteamericano especializado en agricultura (USDA) dice que nuestro país tendrá un aumento en la producción de soja por encima de las estimaciones iniciales. Dice que, de los 10 millones de toneladas previstas anteriormente, ahora subirá a 10,3 millones, lo que representa un alza del 3 %.
Con los datos y estudios que se tienen, el panorama que está dibujando el nuevo año para nuestro país es para ponerse optimista. Todo lo conseguido en 2023 y lo que se avecina es para crear una buena dosis de ilusión. Sin dejar de tener en cuenta los elementos adversos que pueden surgir, estamos ante un desafío que promete nuevos logros, por lo que no es exagerado afirmar que estamos en un país con un perfil indiscutiblemente triunfador. Que aguarda seguir avanzando en pos de sus objetivos, como lo hace un vencedor, mediante la conducción política adecuada, el esfuerzo inteligente y el trabajo constante. Este año es otra oportunidad para más logros, y el país lo sabe, por lo que está insistiendo en la única fórmula válida, trabajar insistentemente para obtener nuevos triunfos.
Por eso hay que insistir en la venida de nuevos inversionistas interesados en apostar en más proyectos en los distintos sectores de la actividad económica. Mediante el esfuerzo creador, aquí les esperan nuevos logros y grandes conquistas.