El presidente Santiago Peña con­vocó el lunes a la primera reu­nión del Consejo de Ministros, en el Palacio de López, en la que dio las principales directivas de trabajo para impulsar la política del Gobierno. En la ocasión, puso énfasis en que el combate contra la corrupción es una de las prin­cipales tareas que se enfocará en todos los frentes, como la lucha contra el con­trabando y sus consecuencias en toda la economía. Solo así se podrá fortalecer la situación del país para poner en mar­cha los proyectos que se tienen previstos, como la creación de nuevos puestos de trabajo, el fortalecimiento de la tarea edu­cativa, la oferta de más posibilidades de vivienda propia y la ampliación de la ayuda social a los sectores más desfavorecidos.

Fue el primer encuentro orgánico con los principales responsables de la política económica y social que llevará adelante la nueva administración estatal, ocasión en que el mandatario fijó algunas pautas decisivas de su conducción.

Refiriéndose a uno de los principales temas del Gobierno, habló del compli­cado panorama que tienen actualmente con los problemas que dejó la administra­ción saliente. “Al día de hoy estamos tra­tando de entender la situación real de las finanzas públicas y cuáles son los niveles de deuda y de atraso, porque en cada ins­titución encontramos una nueva deuda financiera o social. Pido que dediquen los próximos días a esto para que, a partir del diagnóstico en cada ministerio, se pueda planificar el Presupuesto General de la Nación (para el 2024)”, señaló.

Luego comenzará la tarea de conversar con los legisladores que tienen que apro­bar la ley de presupuesto, tarea en que pidió que los ministros no hagan ningún lobby particular.

El vicepresidente Pedro Alliana, que estuvo en la reunión, señaló: “La clave de todo esto es que exista un trabajo coordi­nado, y por eso me comprometo a colabo­rar con los ministros y trabajar con cada uno de los congresistas en la necesidad de que este año, así como los siguientes, se pueda hacer un Presupuesto General de la Nación acorde”. La Constitución Nacional establece que el rol que tiene el vicepre­sidente de la república es hacer de nexo entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legis­lativo.

Uno de los mensajes clave que dio el pre­sidente en la primera reunión con sus ministros es que no se tolerará la corrup­ción. Refiriéndose a la cumbre de los tres poderes del Estado que ya convocó en dos ocasiones, Peña sentenció: “Esta­mos decididos a combatir la corrupción”, agregando que desde el Poder Ejecu­tivo no se la tolerará. “Pero no podemos luchar solos. Esta debe ser una política de Estado”, por cuya razón está coordinando tareas con los otros poderes y organismos especiales.

“Tenemos que mantenernos enfocados y coordinados. Lo que podamos resolver en estas reuniones es esencial para que poda­mos salir con soluciones y así mejorar nuestra gestión”, sentenció. Agregó que el Paraguay está condenado al éxito porque tiene absolutamente todo para que sea el país más desarrollado.

La tarea que ha iniciado el nuevo gobierno es de enormes proporciones, en todo sen­tido. Porque no se trata solo de arreglar las desprolijidades de la administración saliente, que son muchas, sino también de proyectar al país hacia los objetivos pro­puestos en su programa de trabajo: dina­mizar la actividad económica para que haya más inversiones, lo que permitirá también que se genere mayor cantidad de empleo para la gente, aparte de enfren­tar la enorme deuda dejada por los que se fueron, además de hacer que la lucha con­tra el contrabando obtenga éxito para que mejoren las recaudaciones tributarias y se canalice la actividad legal por encima de los hechos ilícitos, que toman ahora una gran parte de la vida del país.

Las ideas del Gobierno son claras y sus objetivos están bien establecidos en su programa de trabajo. Acaba de comenzar su gestión y todo está por hacerse. Por eso sería bueno que tenga el acompañamiento de los sectores empresariales de las diver­sas actividades, de los operarios de la eco­nomía, que son los trabajadores, y de toda la ciudadanía.

El éxito de esta nueva administración no será el triunfo político de un partido. Será la conquista del bienestar de buena parte de nuestro querido Paraguay.