En las elecciones internas colo­radas del domingo último para candidatos a presidente y vicepresidente de la Repú­blica triunfó la dupla Santiago Peña-Pe­dro Alliana, de Honor Colorado, sobre la representación oficialista conformada por Arnoldo Wiens-Juan Manuel Bru­netti, por más de 8 puntos porcentuales de diferencia. Para presidir la Asocia­ción Nacional Republicana (ANR) se llevó la victoria el ex presidente Horacio Cartes sobre Mario Abdo Benítez, por más de 12 puntos, con lo que el triunfo del cartismo fue amplio en ambos capí­tulos de la competición comicial.

Los números que saltaron en la com­pulsa de la más importante agrupación política del Paraguay actual, el Partido Colorado, son suficientes para indicar las preferencias, los rechazos y también las esperanzas de los miles de votantes de esa agrupación partidaria. Es un gran espejo que refleja claramente la realidad y, en ese sentido, no permite ningún tipo de discusiones, porque responde a los elementos que todos los paraguayos per­cibimos en el día a día.

Una de las primeras conclusiones, y la más visible, es que el gran derrotado de estas internas republicanas es el pre­sidente de la República, Mario Abdo Benítez, fallido candidato a titular del partido y promotor de la candidatura de Arnoldo Wiens. Por algo en las internas partidarias recibió tan solo el 38,16% de los votos de sus correligionarios como candidato a presidente de la ANR, lo que indica que, de forma contundente, los afiliados al partido de gobierno no están con él y que son muchos más los que lo rechazan de los que lo aceptan.

Como resumió el senador Juan Carlos Galaverna, el gran perdedor de las inter­nas coloradas ha sido el presidente Abdo, quien, de ese modo, dentro de su mismo partido, recibió una fuerte demostra­ción de descontento con su administra­ción gubernamental. Los números can­tan y no admiten discusión: Marito hizo mal las cosas y eso no le perdonaron ni siquiera los que lo habían votado en el 2018, que hoy se sienten desencantados.

Santiago Peña fue el contundente gana­dor de las internas coloradas, pues sus correligionarios lo consagraron como candidato a presidente para las elec­ciones generales del 30 de abril. Pedro Alliana será la persona que lo acompa­ñará como vicepresidente. Los números refieren que más de la mitad de los repu­blicanos (51,60%) han decidido que Peña sea el colorado que los represente como la mejor propuesta para los comicios men­cionados. Y, con mucha probabilidad, será el próximo presidente de la República que asumirá el 15 de agosto del 2023.

Para conducir al Partido Colorado fue electo por amplia mayoría el líder de Honor Colorado, Horacio Cartes, quien aplastó al oficialista Mario Abdo, por una diferencia de más de 12 puntos por­centuales. De ese modo el presidente de la República actual, que solo tiene que dedicarse a su tarea al frente del Ejecu­tivo, según la Constitución Nacional, no podrá ser presidente de su partido, ya que fue rechazado por la mayoría de sus correligionarios.

La determinación más importante de las internas del Partido Colorado es que los ciudadanos republicanos, luego de considerar a todos los candidatos, sus conductas y sus propuestas, deci­dieron que la dupla Santiago Peña-Pe­dro Alliana es la mejor para el país. Le dieron sus votos por la confianza que le inspira, porque representa la esperanza de un gobierno mejor y las posibilida­des ciertas del bienestar. Lo cual es un gran compromiso para el economista de 44 años, que, en su pasado de funcio­nario como ministro de Hacienda, ha demostrado suficientes conocimientos técnicos en el manejo de la economía y la capacidad de trabajo que requiere la conducción que necesita el país para salir de las dificultades luego de los som­bríos años de Mario Abdo. La mala ges­tión económica, la enorme cantidad de pobres y desocupados y el amenazante avance de la pobreza que deja el gobierno actual hacen imprescindible instalar una administración más capaz, sabia y decidida para sacar al Paraguay de esta situación mediante la tan necesaria recuperación económica y social.

La decisión tomada por los colorados al elegir a Santiago Peña es la mejor pro­puesta que se puede hacer para nues­tro país en las actuales circunstancias. El pueblo paraguayo tendrá la decisión final cuando le toque votar.