Hasta ayer Paraguay era uno de los pocos paí­ses del continente que no contaba aún con un satélite propio. Eran las 14:36 (hora de Paraguay) de este sábado 20 de febrero del 2021, cuando en el Puerto Espacial Regional del Atlántico Medio, Virginia (Esta­dos Unidos) a bordo del carguero Cygnus en el cohete Antares, se lanzó al espacio exterior el pri­mer nanosatélite paraguayo, el GuaraniSAT1, que fue creado por ingenieros paraguayos de la Agen­cia Espacial del Paraguay (AEP), en colaboración con técnicos de Japón, del Instituto de Tecnología de Kyushu. Este hecho es un ver­dadero hito en la historia del desa­rrollo de la ciencia en Paraguay.

El 5 de marzo del 2014, en los ini­cios del gobierno del presidente Horacio Cartes, el entonces man­datario promulgó la Ley 5151 que creaba la Agencia Espacial del Paraguay, siete años después de esa visión innovadora, final­mente se plasmó el primer obje­tivo de dicha institución, poner en órbita un satélite, este es un gran paso hacia la generación de nuevos e importantes cono­cimientos para el desarrollo de nuestro país.

En medio del estado de incer­tidumbre y hechos poco feli­ces por causa de la pandemia y la extraviada gestión guberna­mental de la misma, hitos como este constituyen un verda­dero hálito de esperanza. Por­que marcan el camino de que es posible un Paraguay diferente, que el talento humano formado apuesta cada vez más por la innovación.

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GuaraniSAT1 deberá cumplir diez misiones en el espacio, la primera de ellas será el monitoreo de los vectores del mal de Chagas en el Chaco paraguayo, lo que permi­tirá establecer políticas reales para el combate de la enfermedad colocando 200 sensores. Estos datos serán enviados en tiempo real a la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Otra de las apli­caciones de observación de la tie­rra, para un país como el nuestro, expuesto anualmente a inun­daciones, sequías o incendios, puede aportar información vital y útil para que las instituciones del sector público y privado pue­dan con antelación planificar las soluciones o alternativas a estas y otras problemáticas.

Para la carrera espacial nacio­nal gestionada por la Agencia Espacial del Paraguay (AEP), que invirtió en total para este saté­lite solamente US$ 250.000 (G. 1.637.500.000). La vida útil de este pionero dispositivo será de alrededor de dos años, nunca regresará al planeta Tierra, puesto que una vez que cumpla sus misiones se desintegrará en la atmósfera. Tan pocos recursos para tan enorme y valioso aporte, que más del conocimiento generó un efecto dominó que movió la economía nacional, gracias a la creación de equipos y grupos de investigación en el sector espa­cial, aplicados a solucionar pro­blemas en el planeta.

GuaraniSAT1 es un mensaje a los gobiernos sobre la importancia de invertir más en educación, salud e innovación, porque esto es alta­mente rentable. Si lo hacemos con los niños en su edad temprana, fomentamos la escolaridad, redu­cimos la delincuencia, mejora­mos las aptitudes de los niños, lo que los lleva a obtener mejores niveles de ingresos económicos en su vida profesional futura. Un mayor nivel de renta repercute en mejora de vida de las personas y que estas contribuyan con el pago de impuestos a la sociedad y, por tanto, se genera un mayor bien­estar social, es decir, mejora el nivel de vida y la economía de las personas. Festejamos este hito nacional y que el mismo sea el modelo de la buena gestión de las políticas públicas.

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