Técnicos y altos funcionarios del área económica del Poder Ejecutivo presentaron recientemente varios proyectos de ley con los que desean impulsar el ambiente de negocios en nuestro país y así mejorar la actividad económica actualmente un tanto deprimida. Pero hay sectores del área empresarial que quieren medidas más rápidas de parte del Gobierno que en el cortísimo plazo ayuden a mejorar la situación económica y piden medidas anticíclicas.
Las propuestas del Ejecutivo serán presentadas al Congreso como proyectos de ley para que los estudie y luego se conviertan en normas, por lo que llevará un cierto tiempo su vigencia, si es que no tropiezan con otras dificultades por el camino.
Uno de los proyectos de ley pretende crear la figura de las sociedades de acciones simplificadas, con el propósito de darle más agilidad y sea menos oneroso el hecho de abrir una empresa que hoy día tiene numerosos trámites y lleva un cierto tiempo. La otra iniciativa es hacer una ley que crea la figura de la garantía mobiliaria, que consiste en que poniendo como garantía hipotecaria su flujo de caja, sus máquinas o el inventario de mercaderías, las micro, pequeñas y medianas empresas (mypimes) puedan acceder a créditos para financiar sus actividades. También hablaron de un proyecto de ley que pretende establecer normas para hacer más fácil y menos costoso el cierre de las empresas.
Son interesantes los planteamientos del Ejecutivo incluidos en los tres proyectos de ley y muy loable la iniciativa. Hacen falta normas nuevas que agilicen a las pequeñas y medianas empresas para trabajar e impulsar la producción y el comercio. Hay que terminar con la pesada burocracia que en vez de ayudar pone trabas a los que quieren trabajar, crear empleos y producir.
Pero teniendo en cuenta la situación actual de dificultades que requieren pronta solución, no bastan y ni siquiera ayudarán en el corto plazo a paliar los problemas que está teniendo el desenvolvimiento económico del Paraguay, que está ralentizado desde hace medio año.
Por eso es muy atendible la iniciativa lanzada por el gremio de armadores fluviales y marítimos de nuestro país, que han solicitado que el Gobierno adopte medidas anticíclicas para salvar las actuales dificultades y dar un fuerte empujón al crecimiento del país. Aunque hay gente que sostiene que todavía no es necesario adoptar ese tipo de medidas en la actualidad.
Llaman medidas anticíclicas a la política económica que consiste en acciones directas del Gobierno para salir de la crisis de la economía. En los países en problemas, el Estado reduce los impuestos, aumenta fuertemente las inversiones que estimulen la economía, incluso mediante el déficit fiscal gastando más de lo que recauda, se facilita el crédito a las empresas para movilizar la producción y el comercio.
Está claro que en este momento el Paraguay está necesitando de urgentes medidas económicas que impulsen a los más diversos sectores para reactivar la economía. No se ha llegado aún a una situación de recesión, pero desde los últimos meses del año pasado hay realidades que paulatinamente pueden ir empeorando el panorama hasta desembocar en una fuerte caída económica. No todos los sectores están siendo golpeados del mismo modo, pero la producción agrícola, la industria y el comercio en general están sintiendo más fuertemente los embates y piden insistentemente una tabla de salvación.
Por ello hay que insistir en que el Gobierno debe ponerse las pilas y actuar rápidamente con determinaciones que ayuden a reactivar los sectores con más problemas.
Es imprescindible que aumenten fuertemente las inversiones en obras públicas para impulsar el sector de la construcción. Que a través de la banca oficial y de incentivos a la banca privada se ofrezcan créditos en buenas condiciones para activar las inversiones, la producción, el comercio y los servicios. Que se persiga fuertemente al contrabando y la economía informal estimulando a las empresas legales con medidas fiscales y económicas. Que se picanee el consumo con el aumento del empleo y la mejora salarial de los trabajadores.
Que, en definitiva, se apueste con todo por la actividad económica para superar las amenazas y garantizar que el Paraguay siga creciendo a buen ritmo.