El auge del contrabando y los negocios informales, además de la insuficiente lucha contra estos delitos y la posibilidad de que aumenten los impuestos a los productos nacionales, si prosperan en el Congreso tales proyectos, conforman un panorama poco alentador en estos momentos en nuestro país. El temor del empresariado es unánime en ese sentido y se multiplican los pedidos para conseguir más resultados contra la informalidad y frenar el impuestazo entre los legisladores.
En una reunión con autoridades aduaneras y de la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), representantes del Centro de Importadores del Paraguay (CIP) han señalado que es insuficiente la lucha que se está desarrollando contra la informalidad y que el peligro continúa.
Los empresarios de este sector, que son los más castigados por el auge del contrabando, dijeron que no están conformes con lo realizado hasta ahora en el combate contra el sector informal y la evasión fiscal. Resaltaron que la informalidad no es solo el ingreso irregular de mercaderías desde el exterior, sino que se da en todos los ámbitos, como el no pago de impuestos. Dijeron no estar conformes porque hay demasiado que hacer en ese campo.
Es más, varios empresarios del sector importador denunciaron que actualmente en dependencias de la Dirección Nacional de Aduanas han aumentado los pedidos de coimas ante la mayor exigencia existente. Acusaron que se incrementó el uso del “canal rojo” para que haya más burocracia y se haga más lento el despacho de mercaderías a fin de dar lugar a más extorsión.
Ante esta circunstancia se eleva la amenaza del aumento de impuestos a los productos nacionales, que en estos momentos se yergue como una posibilidad cierta que, si se concreta, empeorará la situación pintada por los distintos actores de la producción y el comercio del país.
El Centro de Importadores llamó la atención sobre este hecho, diciendo que si se aprueban los incrementos impositivos que actualmente estudia el Senado, el contrabando aumentará incontrolablemente, pues será más costoso trabajar de manera legal. En un comunicado, este gremio señaló no estar de acuerdo con que se hagan alzas impositivas sin una medición técnica y una evaluación adecuada. “Los parlamentarios tienen que ser serios al momento de presentar proyectos así porque indudablemente esto va a traer consigo el incremento del contrabando y la informalidad”, expresó uno de sus dirigentes.
Lo mismo dijeron recientemente voceros de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), de la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP) y exponentes del gremio de la Cámara de Bebidas Alcohólicas (Capaba), que resaltaron que si aumentan los impuestos se darán más ventajas aún a los contrabandistas que ingresan mercaderías ilegalmente y las venden sin ningún control.
Ante la situación planteada, el Gobierno debe oponerse claramente en el Congreso a través de los legisladores que le responden a cualquier incremento impositivo o creación de nuevos tributos. Debe seguir la postura de la bancada legislativa de Honor Colorado y el pedido de industriales, importadores y productores y decir no a cualquier intento de creación o suba de impuestos.
Por otro lado, el Ejecutivo no debe aflojar en su tarea de hacer cumplir las leyes y poner todo su esfuerzo en el combate a la informalidad, comenzando con una eficiente lucha contra el contrabando mediante el uso de las fuerzas públicas. El contrabando no es solo un tema para Aduanas y la Marina, sino de todas las instituciones estatales. Como es un ataque a la soberanía nacional, las Fuerzas Armadas también deben tomar parte del combate, con la conducción y coordinación de las autoridades competentes.
En manos del Gobierno está encabezar esta lucha y articular todos los medios posibles para combatir el delito y formalizar el país.