En entrevista exclusiva con La Nación y GEN TV, los jefes del Comando de Operaciones de Defensa Interna (Codi) y de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) hablaron de la misión que tienen estas unidades. Los efectivos explicaron lo que está pasando actualmente en el Norte, las motivaciones del EPP y la presión ciudadana.

• POR LOURDES PINTOS
• lourdes.pintos@gruponacion.com.py
• Fotos PÁNFILO LEGUIZAMÓN

El Cnel. Leonardo Ibarrola, jefe del Comando de Opera­ciones de Defensa Interna (Codi), y el Cptán. Óscar Chamorro, comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), dieron una entrevista exclusiva a La Nación y GEN TV. El diálogo se registró en la base de operaciones que se encuentra en Arroyito, Con­cepción.

Ibarrola explicó las funcio­nes específicas del Codi y de la FTC en los departamentos de Concepción, San Pedro y Amambay. Mencionó además los resultados de las opera­ciones realizadas en la zona norte en el combate contra el crimen organizado, el narco­tráfico y las asistencias a los pobladores.

Por su parte, Chamorro con­firmó que el Ejército del Pue­blo Paraguayo (EPP) se está desplazando a otras zonas donde pueden incursionar con mayor libertad y causar daño. Esto sucede debido a que los criminales se sienten acorra­lados por las autoridades que resguardan el territorio.

“El Codi fue creado para combatir a estos grupos cri­minales organizados. Está conformado por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC); es una fuerza militar formada por las tres armas de las Fuer­zas Armadas, el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea. También otro elemento del Codi es la Policía Nacional. Las fuerzas especiales de la Policía están trabajando con­juntamente con la FTC. Otros de los elementos son la Fis­calía y las fuerzas especia­les de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad). Todas estas instituciones son com­ponentes del Codi”, explicó Ibarrola.

Además, mencionó que actual­mente tienen un territorio específico en el que están auto­rizados a operar, que son los tres departamentos mencionados anteriormente. Sostiene que la misión es conducir, planear y dirigir las operaciones milita­res con la finalidad de neutrali­zar a los grupos terroristas. Esa es la principal misión, asegura el comandante.

Consultado acerca de los mecanismos empleados para neutralizar a estos grupos, explicó al menos parte de los mecanismos empleados con este fin. “Sabemos que este problema es un problema sociopolítico. Ellos aprove­chan tal vez las condiciones de precariedad de la gente y son un caldo de cultivo para que ellos puedan ganar adeptos. Tenemos una parte social donde trabajamos coordinadamente con todos los elementos del Gobierno, haciendo rutas, casas, escue­las, arreglando centros de salud; es parte del Gobierno Nacional y la parte del Codi por medio de FTC y los otros elementos, estamos direc­tamente en la persecución y aislamiento de esta gente, eso es lo que hacemos cada día y vamos a seguir haciendo hasta que podamos vencer a estos grupos criminales orga­nizados”, manifestó.

Agregó que el trabajo del Codi es realizar las operaciones mili­tares con el propósito de conse­guir que los criminales se entre­guen o lograr la captura de todos ellos. En cuanto a los resultados obtenidos con los operativos, menciona la captura de varios miembros del EPP y la elimi­nación de la Agrupación Cam­pesina Armada (ACA).

“Tuvimos la eliminación de elementos del EPP y práctica­mente todo el ala de la Agru­pación Campesina Armada ha sido eliminada; solo que­daron uno o dos elementos de esos grupos que han tratado de resurgir, pero sin mucho éxito”, aseguró.

Ibarrola cuenta que tras la conformación del Codi, en el 2013, los personales se aboca­ron al trabajo de hacer inte­ligencia en un 90% y un 10% responde a operaciones mili­tares con base en los resulta­dos obtenidos de inteligencia.

“Ahora mismo tenemos grupos en los montes que están haciendo patrulla­jes, buscando a esta gente en las áreas en las que noso­tros creemos que se están movilizando. En forma per­manente tenemos equipos tácticos, fuerzas especiales que están revisando todos los montes de los departa­mentos de acuerdo al ser­vicio de inteligencia. Es por eso que el 90% es inteligen­cia, analizar dónde podrían estar operando estos grupos y esos lugares son los que estamos revisando. En los tres departamentos tene­mos 983 personales milita­res”, señaló.

Los lugares considerados como zonas rojas son Azo­tey, Arroyito, Yby Yaú, Hor­queta, Concepción, Tacuatí, San Pedro del Ycuamandyyú, Santa Rosa del Aguaray, entre otras localidades.

El Cptán. Óscar Chamorro, comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta, confirmó que en lo que se refiere a la agrupa­ción criminal EPP, hay buenas noticias. Explica que por pre­sión de la propia ciudadanía y del trabajo realizado por las autoridades, sus miembros se están desplazando hacia otras zonas menos peligrosas para los pobladores.

“Actualmente se produce un efecto que podríamos llamar globo. Cuando apretamos el globo en un lugar se achica de un lado y se agranda en el otro. Básicamente lo que tene­mos, sin entrar en demasiados detalles, de adónde se están desplazando, se aprecia ese fenómeno. Si bien no estamos contentos solamente con eso, lo consideramos como algo positivo debido a que no lo hicieron por gusto, lo hicie­ron por presión, tanto de la sociedad que va entendiendo de que esa no es la forma en la que hay que pelear por las rei­vindicaciones y, por otro lado, las acciones de los diversos órganos de seguridad, entre ellos la FTC, que generó por acción ese desplazamiento”, manifestó Chamorro.

Explicó también que al hablar de grupos crimina­les vinculados al EPP y otros similares, se habla especí­ficamente de una finalidad inicial basada en la polí­tica. Ellos buscan tomar el control político y para con­seguir ese control político necesariamente necesitan ganar adeptos. Estos adep­tos son los que eventual­mente les sirven como con­trol de seguridad para poder camuflarse entre los pobla­dores de la zona.

“Nosotros creemos que man­tienen ese objetivo porque su motivación es política, es tomar el poder. Su objetivo no es económico, es intermedia­riamente económica porque necesitan recursos para con­seguir sus fines, pero el obje­tivo final es tomar el poder de una forma totalmente ilícita, perimida y que en ningún país dio resultado”, sostuvo.

Consultado sobre posibles nexos que el EPP estaría teniendo actualmente con agrupaciones terroristas internacionales, como las Fuerzas Armadas Revolucio­narias de Colombia (FARC) o el Primer Comando Capital (PCC) de Brasil, Chamorro dijo que no existen pruebas, pero considera que ninguna posibilidad puede ser descar­tada.

“En el tema de los víncu­los que eventualmente podrían tener, en el caso de las FARC, en el pasado se ha demostrado eso sobrema­nera debido a que esto fue judicializado y constan en los diferentes juicios orales en los que fueron ofrecidos como prueba, de eso pode­mos estar seguros de que por lo menos en el pasado lo han tenido. Si actualmente tendrían relación no podría contestar con precisión esa pregunta, obviamente hay un nuevo escenario que se presenta en Colombia, que aparentemente va a escalar un poco la situación por­que parte de las FARC ha asumido otra vez la lucha armada. No podríamos des­cartar de que podrían seguir teniendo esos vínculos. Con relación a los otros grupos organizados, como el PCC, Comando Vermelho u otras organizaciones criminales con otras motivaciones, no podemos ni afirmar ni des­cartar porque seríamos muy irresponsables al no tener pruebas”, aseguró.