El entrenador uruguayo, Eduardo Rivera, reveló que decidió salir de Luqueño, porque algunos directivos le quisieron imponer jugadores y “borrar” a otros.

Rivera duró un poco más de un mes y seis partidos en Luque, para terminar renunciado a su cuarto ciclo en el Auriazul. El experimentado DT dijo que su salida no fue a causa de los malos resultados, sino por la presión y el intento de imposición que tuvo de “los de arriba”.

“Luqueño es un club particular, donde se mezcla política con fútbol y yo no soy político. Nos sentimos condicionados con algunos jugadores, nos decían este jugador sí, este jugador no. Incluso querían que algunos jugadores desaparecieran del club, y eso yo no voy a aceptar. Yo no soy sicario de futbolistas, no voy a matar a ningún futbolista”, comentó Rivera en conversación con la 730 AM.

El DT agradeció a la hinchada por acompañar siempre, le deseó éxitos al club y asegura que se va “con la conciencia muy tranquila”. Además no descarta regresar en algún momento para firmar su quinta etapa en Luqueño.

Eduardo Rivera se despidió de su cuarto ciclo, con 6 partidos dirigidos, 2 victorias, 2 empates y 2 derrotas. Apenas 8 puntos sumados de 18 en juego.