Madrid, España | AFP |
Un día después del histórico partido a puerta cerrada del Barcelona, la selección española se concentra para afrontar dos duelos decisivos para llegar al Mundial de Rusia-2018 con todos los focos puestos en Gerard Piqué, defensor del derecho a decidir catalán y también defensor de la camiseta española.

Las lágrimas del central internacional al hablar el domingo de las intervenciones policiales en Cataluña para impedir un referéndum de autodeterminación, prohibido por la justicia española, dieron la vuelta al mundo y copan portadas este lunes.

"Soy y me siento catalán, y esto es algo que hoy más que nunca me siento orgulloso de la gente de Cataluña", dijo Piqué en zona mixta, tras jugar el partido a puerta cerrada contra Las Palmas (3-0).

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"Sólo pensaba que acabara lo antes posible" este encuentro, que el Barcelona decidió jugar con el Camp Nou vacío como mensaje de protesta al mundo por lo que estaba ocurriendo en las calles catalanas.

"Piqué y otros jugadores -según el diario deportivo Marca- eran partidarios de no jugar" el encuentro cuando la directiva del Barcelona, ante la negativa de Federación Española y Liga a suspender el encuentro, sondeó a técnicos y jugadores la posibilidad de anularlo unilateralmente.

 ‘Vergüenza’

Finalmente, el Barcelona optó por jugar a puerta cerrada, algo que no había hecho desde 1925, como forma de protesta y al mismo tiempo de evitar una posible sanción deportiva, lo que provocó las críticas de la prensa catalana.

"vergüenza. El Barça decidió jugar a puerta cerrada un partido que no debía haberse celebrado jamás", tituló el diario Sport, que contrapone en su primera "Y dignidad. Piqué estalla en lágrimas: "sólo queríamos votar".

En un club emblema del catalanismo, Piqué siempre ha mostrado su apoyo al derecho de decidir de los catalanes, mostrándose en manifestaciones e, incluso, votando el domingo.

Esta postura le ha convertido en los últimos tiempos en sus convocatorias con la selección en blanco de pitos y abucheos por cierta parte del público, que lo considera independentista, pese a que él nunca se ha pronunciado al respecto.

El domingo, el central, campeón del mundo y de Europa con la Roja, volvió a reiterar su compromiso con la elástica nacional.

"Creo que puedo seguir yendo a la selección porque de verdad creo que hay muchísima gente en España que está en total desaprobación con estos actos que han sucedido hoy en Cataluña y que de verdad creen en la democracia", aseguró.

Pero, también afirmó que "si el míster (el seleccionador Julen Lopetegui) o cualquier persona de la federación cree que soy un problema o que molesto, no tengo ningún problema en dar un paso al lado y dejar la selección antes de 2018", la fecha que había adelantado para su retirada internacional, después del Mundial de Rusia.

 ‘Da ejemplo’ con la selección

El central tiene previsto concentrarse este lunes con la Roja para los dos próximos partidos clasificatorios mundialistas contra Albania e Israel y todos los focos estarán puestos en él.

Especialmente cuando salte al terreno de juego por la tarde para un entrenamiento a puerta abierta en la Ciudad del Fútbol, cerca de Madrid.

En el último partido contra Italia (3-0) el 3 de septiembre, unos pocos pitos contra Piqué fueron silenciados en el estadio Santiago Bernabéu con aplausos, en lo que se interpretó como una reconciliación del público español con el central, que siempre ha tenido el apoyo del seleccionador.

"Gerard se parte el alma cada vez que viene con nosotros, da ejemplo, es comprometido y estamos encantados con él. No entramos a valorar ninguna cosa más", aseguró el viernes Lopetegui al dar la lista de los seleccionados.

El seleccionador reiteraba así su confianza en el central, que acababa de publicar un tuit en favor del referéndum.

Este lunes y el viernes en Alicante, el central, al que también arropan sus compañeros, volverá a pasar el examen del público.

Etiquetas: #Gerard Piqué

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