• Jorge Torres Romero
  • Columnista

Para este miércoles, Horacio Cartes, presidente de la Asociación Nacional República, convocó a una sesión ordinaria, para escuchar el informe de gestión del presidente de la República, Santiago Peña, quien acudirá a la sede partidaria en compañía de los integrantes de su gabinete.

Se trata de un hecho político que revela la armonía entre el Ejecutivo y el partido de gobierno. Una práctica de madurez cívica y natural que un partido de gobierno haga análisis de gestión como una señal de interés de evaluar aciertos y desaciertos.

Sin embargo, la lectura negativa que hacen algunos actores políticos es hasta entendible, en el sentido de que dichos actores vienen de partidos pequeños o familiares donde todo se resuelve en un dormitorio o en el living de la casa. Son partidos que no tienen vida orgánica, sin estructuras, sin músculos democráticos ejercitados.

La ANR, por su naturaleza organizacional, su estructura misma, genera todos los días iniciativas sociales, becas, atención médica, formación de líderes, capacitación laboral en diversos rubros, etc. Planes que apuntan a generar políticas públicas, además del monitoreo y balances permanente de acciones lo que les permite seguir y mantenerse en el poder.

Las elecciones últimas otorgaron legitimidad y una mayoría a los colorados en el Congreso, lo que hoy constituye el soporte de gestión del presidente Peña, lo que a la vez le permite tener la tan anhelada gobernabilidad. Esta gobernabilidad le brinda seguridad al mandatario para enfocarse en los temas urgentes y prioritarios, a fin de seguir esa hoja de ruta trazada en campaña.

La presentación del informe de gestión del presidente ante la cúpula de su partido político es además la confirmación de la armonía que existe entre el Ejecutivo y el partido de gobierno, lo que a toda costa, detractores opositores y mediáticos pretenden destruir. La oposición, que desea que al gobierno le vaya mal, para así ellos posicionarse como opción de poder, anhela que exista un quiebre entre Peña y Cartes.

Si la rendición de cuentas del presidente de la República a su partido político es la razón de la crítica opositora es la señal clara del desatino en el que están y la razón del porqué pierden elecciones. Nunca una lectura acertada de la realidad, por el contrario, especialistas en boicotearse a sí mismos. Puedo estar equivocado, pero es lo que pienso.

Dejanos tu comentario