• Por Eduardo “Pipó” Dios
  • Columnista

Más perdido que Marito buscando votos. Hay que ser justos, el nivel de idiotez del presidente Marito no tiene antecedentes en la historia... de la humanidad...

Pero para tener semejante idiota y encima creyendo que puede salir a pedir votos y, peor que eso, conseguirlos de manera legítima ya hay que llegar a un grado de locura en que lo de idiota queda cortísimo.

Seamos realistas, ¿quién, fuera de su primer anillo familiar, puede sentir alguna estima, respeto y, peor, alguna confianza en semejante personaje como para votarlo a fin de que asuma un cargo? Marito es inapto hasta para delegado de un kindergarten de mascotas. Tiene el liderazgo y la capacidad de gestión de una ameba.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

No entremos a analizar sus cualidades como ser humano, su falta absoluta de decencia, lealtad, responsabilidad, empatía y honestidad son más que evidentes para cualquiera. Aparte de ser una mala persona. Para redondear, digamos.

Pero realmente uno quisiera, más por curiosidad científica ya, saber qué pasa por esa cabeza. ¿Qué carajos pasa por la cabeza del tipo este? ¿Puede realmente alguien no darse cuenta del rechazo, genuino, que realmente genera en 9 de cada 10 paraguayos? ¿Puede alguien normal pensar que ese público que lo está hurreando y aplaudiendo realmente está ahí creyendo lo que balbucea como tonto, compartiendo su forma de pensar, sus análisis payasescos de la realidad, una realidad que no podemos concebir que, al menos, en parte, no conozca?

Una vez leí por ahí que un torturador solo podía cargar con su vida, convenciéndose de que lo que hacía tenía algún fin noble, o al menos justificado, no sé... “salvar a la patria” de algún enemigo, algo por el estilo, porque de lo contrario tendría que tirarse delante de un tren... Creo que para Marito la negación absoluta de su patética realidad es el único camino para cargar consigo mismo. Además no hay trenes...

Etiquetas: #perdido

Déjanos tus comentarios en Voiz