- Por el Hno. Mariosvaldo Florentino
- capuchino.
Después de toda esta semana intensa como no explotar de alegría con esta noticia. Cristo resucitó. La vida venció a la muerte. Ni la muerte es más fuerte que Dios. La sepultura está vacía. María es toda alegría, no fue defraudada. Como también no será nadie de los que en él esperan.
La resurrección de Cristo es la comprobación de: que su proyecto de amor y de servicio era correcto, y que vale la pena asumirlo; que perdonar a los demás aun cuando nos clavan es lo mejor para no cargar pesos en el corazón; que dar la otra mejilla no significa ser el perdedor; que amar y ayudar hasta a los enemigos no es ser un chiflado; que el cielo es el mejor lugar para guardar nuestros tesoros; que no necesitamos pisar en nadie para poder crecer; que lavar los pies de los demás espontáneamente no es perder la dignidad; que acoger a los pecadores y a las prostitutas no me contamina; que no juzgar o condenar a nadie no me hace un despistado; y en fin que el mal aun siendo fuerte no vencerá; pues solamente Jesús venció al mundo, y aquellos que están con él podrán participar de su victoria.
¡Felices Pascuas! Que Cristo Resucitado sea la luz de tu vida.
Un fuerte abrazo, en el amor de Cristo que nos une.
El Señor te bendiga y te guarde,
El Señor te haga brillar su rostro y tenga misericordia de ti.
El Señor vuelva su mirada cariñosa y te dé la PAZ.
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“¿Por qué buscan entre los muertos al que está vivo? No está aquí, resucitó.” (Lc 24, 5-6)
- Hno. Mariosvaldo Florentino
- Capuchino
Estimados hermanos, sin dudas, estas palabras que los ángeles dijeron a aquellas mujeres que fueron a la tumba de Jesús muy tempranito son la mejor noticia que fue dada en toda la historia de la humanidad.
Desde el inicio de la historia humana, el hombre empezó a experimentar a la muerte, que se presentaba como un límite trágico e intraspasable. Ante la muerte el hombre se sentía impotente, derrotado, destruido y sin palabras. La tristeza y la desesperación eran compañeras de la muerte. Eso era lo que sentían aquellos que veían acercarse a su propia muerte, o acercarse la muerte de otros.
El hombre no sabía cómo resistirle. Casi siempre llegaba en los momentos más inoportunos. A veces de un modo improviso, en un accidente, con una enfermedad repentina y fulminante, o a causa de una violencia. Y así terminaba la vida de una persona llena de sueños y de proyectos. Ni el dinero y los bienes podían prolongar o evitar su llegada. La muerte era el signo de cómo era estúpida la vida humana en esta tierra. El hombre que se daba cuenta de su irremediable destino hacia la muerte, estaba condenado a la angustia, la tristeza, la depresión. Se decía: para todo se puede encontrar una solución, menos para la muerte. La muerte era vista, también, como el gran castigo que se podría dar a una persona. Así las personas para reivindicarse o las sociedades para castigar y protegerse, daban muerte a quien había hecho el mal. Nada podría ser peor para una persona que morir.
También al inicio de la revelación, en los primeros siglos del pueblo de Dios, así se pensaba. Al inicio la Biblia no habla de resurrección. Se pensaba que los muertos sencillamente habitaban en el Sheol, o también llamado infierno (esta palabra quería decir solamente lugar bajo la tierra). De hecho, el salmo 6,6 nos dice: “Nadie entre los muertos se acuerda de ti. ¿Quién en los infiernos canta tu alabanzas?” Al inicio de la revelación se pensaba que los muertos pertenecían a un mundo completamente olvidado. Solo en los últimos siglos antes de Cristo es que los judíos empezaron a hablar de la resurrección, pero ocurriría solamente en el último día, o sea al final de la historia, hasta allí los muertos todos estarían en el Sheol.
También los discípulos de Cristo creían en la resurrección, y esperaban que su maestro fuera a resucitar, pero en el último día, al final de la historia. Una vez muerto, él ya no podía intervenir en sus vidas. Por eso, cada uno tendría que volver a sus cosas. La muerte de Jesús, para ellos, significaba el fin de todo aquel sueño.
Las mujeres que van al sepulcro en la mañanita del domingo cuando aún era oscuro, van para dar al cuerpo de Jesús los honores que se hacían a los muertos, y que no habían podido hacerlo el viernes por la prisa que tenían para sepultarlo antes de que apareciera la primera estrella del atardecer, pues sería el inicio del sábado, y el sábado no se podía hacer nada. Estaban buscando solo un cadáver. Ellas querían colocar los aromas, despedirse más sentidamente, y después entregar a Jesús a la tierra para que se descompusiera. Después de esto, pensaban seguramente volver cada una a su vida anterior, sabiendo que con Jesús ya no podrían contar más, pues él ahora pertenecía al mundo de los muertos.
Por eso, cuando escuchan la voz de los ángeles que les dicen: “¿Por qué buscan entre los muertos al que está vivo? No está aquí, resucitó”. Sus corazones se llenan de alegría por dos motivos: en primer lugar, porque Jesús había vuelto de la muerte. Aunque lo habían asesinado, Dios lo había resucitado, y él podía continuar interviniendo en la historia. Ellas no tenían que retornar a sus vidas de antes y podían continuar con la propuesta de vida nueva que les había hecho Jesús. En segundo lugar, porque la resurrección de Jesús cambiaba completamente la relación del hombre con la muerte. En él, todos podrían vencer a la muerte. Lo que Dios hizo con él, puede hacer con todos los hombres que se unen a él. En Cristo, Dios puede hacer nueva a todas las cosas. La resurrección de Cristo hacía cambiar toda la perspectiva de futuro. El hombre ya no viviría la angustia de la muerte, ya no se sentiría impotente y ni la temería. Ahora el dicho tenía que ser cambiado: “Para todo en la vida se tiene una solución, hasta para la muerte.”
Estaba empezando allí la nueva historia de la humanidad. Los cristianos tenían una buena noticia para dar a todos los hombres: Jesús venció a la muerte. La vida humana en este mundo no es una tragedia. Tiene un sentido, basta saber direccionar. Y los discípulos lo anunciaron por todas partes. Y delante de las amenazas: ¡cállense o les mataremos!, ellos decían la muerte no es un problema para nosotros. Ni la muerte nos puede paralizar. Es por eso que la resurrección de Cristo es el centro más importante de nuestra fe. Pues de un lado confirma y da autoridad a todo lo que Jesús había predicado antes de su muerte, y por otro lado cambia completamente la perspectiva de la vida humana en este mundo.
Ciertamente la pregunta que nos debemos hacer en este día de Pascua es:
¿De verdad yo acepto la buena noticia de la resurrección de Cristo con todas sus implicancias en mi vida? ¿Ante la muerte yo actúo como cristiano o aún como pagano? ¿Vivo sabiendo que también yo puedo con Cristo vencer a la muerte, esto es resucitar? O ¿solo intento huir de la muerte?
¡Hermano, pascua es esto: resurrección!
El Señor te bendiga y te guarde,
El Señor te haga brillar su rostro y tenga misericordia de ti.
El Señor vuelva su mirada cariñosa y te dé la PAZ.
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¿Por qué creer en la resurrección?
- Emilio Aguero Esgaib
- Pastor
Jesús predijo su propia resurrección. “Y comenzó a enseñarles que le era necesario al Hijo del Hombre padecer mucho, y ser desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes, a los escribas, y ser muerto, y resucitar después de tres días”. Marcos 8:31. También lo hace en el verso 10:33 y en Lucas 13:32 entre otros. Pero los discípulos no comprendieron lo que les decía. “Porque aún no habían entendido la Escritura, que era necesario que él resucitase de los muertos”. Juan 20:9.
Jesús fue sepultado honorablemente en un sitio puntual y reconocible con testigos oculares, según Marcos 15:42-47 y otras varias referencias más (esto ayuda a contrarrestar los rumores que las mujeres pudieron haberse confundido de tumba).
Las mujeres fueron el domingo muy temprano para terminar de ungir el cuerpo de Jesús (es evidente que ni ellas entendieron lo que Jesús predijo de que resucitaría al tercer día. Ellas no fueron a ver si la tumba estaba vacía, sino a ungir el cuerpo) Marcos 16:1-8. Es más, ellas pensaban que el cuerpo fue robado. Juan 20:1,2;15.
Lejos de pensar que los apóstoles eran personas crédulas se ve que ellos estaban sorprendidos de la desaparición del cuerpo atribuyendo a un robo, ni siquiera les venía en mente lo que Jesús tantas veces les dijo, que él resucitaría al tercer día.
Los mismos opositores de Jesús reconocieron que la tumba estaba vacía e idearon una conspiración para desmeritar la desaparición (Mateo 28:11-15). Para los escépticos esto no demuestra una resurrección, pero sí demuestra que la tumba estaba vacía. Si no fuera así lo más sencillo, sería mostrar el cuerpo de Jesús para que el rumor de la resurrección no se dé.
Los discípulos no pudieron robar el cuerpo, no solo porque estaban escondidos, atemorizados e incrédulos, sino porque una guardia romana fue puesto en el sepulcro con un sello imperial en la tumba (la entrada atada y lacrada). Mateo 27:62-66.
Las apariciones de Jesús resucitado. Jesús se apareció resucitado en varios lugares, a cientos de personas y durante cuarenta días. No se trata de una persona o dos que dicen haberlo visto una o dos veces o que les pareció verle o que era algo simbólico o espiritual su resurrección. La Biblia no da pie a eso.
Aparece en Judea a las mujeres “he aquí, Jesús les salió al encuentro diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron” Mateo 28:9 (podemos ver también que Jesús resucitado recibió adoración y no lo impidió que lo hagan, así como también lo hizo Tomás al reconocerlo). A María Magdalena, ella insistía en el robo del cuerpo hasta que Jesús mismo se le aparece. Juan 20:11-18. A Pedro Lucas 24:24. En Emaús a dos personas Lucas 24:13-15. A un grupo de personas. Los 10 apóstoles en Jerusalén Lucas 24:36-40 (ellos pensaron que era un espíritu, pero Jesús les comprueba que era él en carne y hueso). A los once apóstoles Juan 20:24-29 (acá Tomás, el último en creer, toca a Jesús y lo adora). Luego les aparece a siete discípulos, pero esta vez en Galilea Juan 21:1-14 y fue la tercera vez en distintos lugares que se les apareció a sus discípulos (versículo 14). A los que se habían reunido Hechos 1:6-9. Nuevamente a los once apóstoles en Galilea Mateo 28:16-20. A más de 500 al mismo tiempo (1 Corintios 15:6). A Jacobo el hermano incrédulo del Señor que terminó siendo líder de la iglesia de Jerusalén y mártir a causa de Cristo (1 Corintios 15:7). Y a Pablo, perseguidor de la iglesia, en Hechos 9. Según Lucas escribe en Hechos 1:3 estas apariciones se dieron durante 40 días y terminó con la ascensión delante de muchos testigos.
Jesus ha resucitado para salvación de todo aquel que cree. Romanos 10:9
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Buscan a paraguayo que habría asesinado a otro compatriota en Argentina
Durante el fin de semana pasado se reportó el fallecimiento de un paraguayo en manos de otro compatriota en la localidad de José Carlos Paz, Argentina. La gresca se habría originado por un ajuste de cuentas y se presume que el asesino estaría intentando pasar a Paraguay para refugiarse y huir de la justicia. Los familiares de la víctima en redes sociales buscan pistas del homicida.
Según el reporte dado por las autoridades del vecino país, el hecho se reportó durante la madrugada del domingo pasado, en una conocida bodega de la zona y que se presume sería aguantadero de consumidores. A este lugar llegó Silvio Acosta, de 41 años, quien ya mantenía un conflicto desde hace tiempo con Ricardo Espínola Cañete, de 36 años, quien se encontraba en el sitio.
En videos de las cámaras de seguridad se puede ver que Ricardo estaba sentado en una de las mesas, compartiendo una ronda de tragos con otras dos personas y en eso llega Silvio para hacer unas compras. Luego se acercó y extendió la mano para saludar a su compatriota. Luego de soltarse, Ricardo se levantó y le dio una estocada a la víctima.
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Silvio cayó al suelo y mientras era auxiliado, su agresor huyó del sitio. El hombre fue llevado a un centro asistencial y se confirmó su fallecimiento. La hipótesis que manejan las autoridades es que se trató de un crimen por ajustes de cuentas y pese a que la víctima intentaba buscar la paz, un solo apretón de mano no bastaba.
Familiares de Silvio sospechan que Ricardo, que ya cuenta con antecedente por otro homicidio, estaría intentando cruzar la frontera para refugiarse en Paraguay, por lo que están realizando campaña para dar con esta persona y que pueda ser entregado a las autoridades para que pague por el crimen que cometió.
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Buscan identificar a motociclista que manoseó a una joven que salía de un gimnasio en Itapúa
Este viernes, se hizo viral un video en el que se puede ver cómo un motociclista extendió la mano y tocó a una joven que acababa de salir de un gimnasio en la localidad de Tomás Romero Pereira, departamento de Itapúa. La víctima realizó la denuncia y ahora la Policía Nacional busca dar con el paradero de este hombre, que podría atentar contra otras mujeres e incluso niñas.
Según el reporte de la Comisaría 16 de la citada localidad, el supuesto hecho de acoso sexual se registró pasadas las 21:00 de ayer jueves, sobre la calle Bernardino Caballero. Todo quedó grabado en imágenes de cámaras de seguridad a las que hoy viernes pudieron acceder los investigadores del caso y que socializaron para que la ciudadanía pueda identificar al hombre.
En el material se puede ver cuando la mujer iba caminando sobre una calle empedrada y en un momento dado fue alcanzada por el motociclista. Este se acercó por completo a la joven que estaba con el celular en la mano y la manoseó. Ella quedó bastante asustada por la situación y con su termo de metal le propinó dos golpes a la altura del rostro de su agresor.
El hombre quedó conmocionado por el golpe que le propinó su víctima y con mucho susto la mujer siguió su camino, a la vez volteó varias veces para ver si este no la seguía. Tras cometer el hecho, el motorizado dio vuelta y retomó la vía por el que vino. La zona donde ocurrió el hecho es bastante iluminada y en el lugar se contaba con una cámara de seguridad de la Policía.
La denunciante manifestó que no conoce al individuo que la manoseó en plena vía pública, pero brindó detalles de que este vestía una campera y pantalón de color oscuro, conducía una motocicleta tipo trail. Desde la Policía Nacional buscan identificar y detener al acosador, para evitar que existan otras víctimas entre ellas niñas o adolescentes.
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