El año que se inicia será, probablemente, uno de los años más políticos de los últimos tiempos. Debemos estar preparados para lo que se viene, serán doce meses de pura política y electoralismo.

El manual dice que lo primero que necesitamos saber los estrategas y asesores políticos, así como aquellos que pretendan ser candidatos, es el marco legal y reglamentario que rodea a las elecciones. En los últimos días del 2021, el Tribunal Superior de Justicia Electoral dio a conocer el cronograma electoral rumbo a las elecciones generales del 2023, en similar tono, el Tribunal Electoral Partidario del Partido Colorado hizo pública la hoja de ruta que apunta a las elecciones internas del 18 de diciembre de este año. Las distintas modificaciones que se realizaron al Código Electoral (financiamiento de campañas y desbloqueo de listas) acortan los tiempos y plazos para movimientos, partidos y candidaturas. Muchos de estos últimos desconocen el detalle del cronograma, así como las exigencias en lo que hace tanto a financiamiento como a Comunicación Política. Y como se suele decir, en una campaña ellos tienen el trabajo más importante de todos, uno que es exclusivo e intransferible: ser candidatos.

En ese sentido, en la ANR se dará lo que me gusta llamar una Super Elección. Estarán en disputa tanto las precandidaturas para cargos nacionales y departamentales (presidente y vicepresidente de la República, senadores, diputados, gobernadores y juntas departamentales) así también los cargos partidarios (presidente y miembros de la junta gobierno, presidentes y miembros de seccional, delegados convencionales). Este volumen de candidaturas lleva a un ejemplo concreto de lo que les citaba más arriba, la inscripción de candidaturas se haga durante la primera quincena de junio, sólo por citar un detalle absolutamente estratégico a la hora de planificar una campaña.

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En el otro lado, la oposición está haciendo el intento de articular una concertación que agrupe en una sola fuerza electoral para enfrentar a la ANR, se pretende imitar el proceso que los llevó a ganar en el 2008 y además en lo que hace a listas para cargos plurinominales, fue un doloroso aprendizaje que dejaron las municipales: consolidar todas las fuerzas en una sola lista. Aún hay cierto escepticismo sobre como resultará el armado de la unidad opositora. El factor Efraín Alegre es un elemento que hace cuesta arriba la consolidación, conscientes de que esta vez se pretende obtener la victoria se formó otro arco, el compuesto por el llanismo, el movimiento de Dionisio Amarilla y el diputado Carlos Rejala como candidato a presidente de la República, al igual que el gobernador de Cordillera, Hugo Fleitas. Encolumnado detrás de Alegre, está el sector mas reaccionario de la oposición. Mismo candidato, mismo nivel de virulencia en el discurso.

Esta es apenas la primera de las muchas columnas que se escribirán en este 2022, un año que estará repleto de esa mala palabra que empieza con p y termina con a: la política. Un año en el que el acompañamiento profesional en lo que hace a asesoría política cobra cada vez más relevancia, se hace imprescindible y no se debe dejar para última hora. Al contrario, cuanto antes mejor

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