La actividad económica subió 19,3% en abril con respecto a igual mes del año pasado del -13,5% (segundo mes positivo con el de marzo pasado 8,4%), acumulando un aumento global del 4,7% en los primeros cuatro meses del presente (apenas 0,8% a marzo último), versus mismo período del 2020, el avance fue del 0,1%. La variación acumulada promedio de 12 meses móviles –la marcha económica desde la perspectiva de un plazo mayor (un año)– fue del 1,1% en abril, a continuación de tres meses negativos (enero, febrero y marzo). En abril del año pasado se ubicó en 1,5%.

El informe del Banco Central del Paraguay (BCP) explica con respecto al Indicador Mensual de la Actividad Económica del Paraguay (Imaep): “En el comportamiento interanual han incidido los desempeños favorables de los servicios, manufacturas, construcción y la ganadería. No obstante, la agricultura y la generación de energía eléctrica continúan atenuando la expansión de la actividad económica. La construcción sigue mostrando un desenvolvimiento interanual favorable, explicado principalmente por el dinamismo verificado en la ejecución de las obras tanto privadas como públicas. Finamente el Imaep, que excluye a la agricultura y a las binacionales, ha registrado un crecimiento interanual del 25,3% y, con este resultado, acumula una variación del 7,6% a abril del 2021”.

Por el lado del consumo o de las ventas minoristas o al consumidor el salto en abril del 2021 versus abril del 2020 fue del 34,9% (22,2% en marzo pasado y -19,8% en abril del año pasado). En el primer cuatrimestre del 2021 se dio un aumento del 11,4% frente a una caída del -2,5% en igual período del 2020. Desde la perspectiva de la marcha a más largo plazo el crecimiento fue del 3,7% (1,5% a abril del 2020). Si precisamos el comportamiento por sectores de venta al consumidor se puede resaltar el siguiente comportamiento positivo de todos las agrupaciones en abril del 2021 versus abril del 2020: supermercados 5,9%, grandes tiendas de vestir 30,6%, equipamiento del hogar 41,6%, venta de automóviles 109,2%, combustibles 49,7%, farmacéuticos 19,4%, materiales de construcción 71,2% y servicio de telefonía móvil 7,1%.

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Para el BCP, “el resultado del indicador Estimador Cifras de Negocios del Paraguay (ECN) se encuentra explicado por los buenos desempeños observados en la manufactura, el comercio y los servicios, asociados a la baja base de comparación registrada en abril del año pasado como consecuencia de las duras restricciones sanitarias implementadas por la pandemia del covid-19. En el sector manufacturero han registrado incrementos en las ventas de las industrias productoras de químicos, carnes, bebidas y tabaco, productos metálicos, minerales no metálicos, metales comunes, textiles, papel y aceites. No obstante, las ramas de producción de lácteos y azúcar han presentado comportamientos adversos. Por su parte, en el comercio sobresalen las variaciones positivas de las ventas de insumos agropecuarios, combustibles, vehículos, productos para el equipamiento del hogar y productos químico-farmacéuticos. Finalmente, en el sector servicios han presentado dinámicas favorables las ventas de las actividades de servicios a los hogares, transportes, servicios a las empresas, telecomunicaciones, hoteles y restaurantes y servicios inmobiliarios”.

El año pasado, abril fue el peor mes desde el punto estrictamente económico con una caída en prácticamente “todo”. No se salvó el Gobierno (ingresos impositivos) ni el sector privado en casi todas sus agrupaciones. De ahí la importancia de ir revirtiendo los números negativos de aquel desastroso abril del 2020. Lo que se ha logrado en el primer cuatrimestre del 2021, con dos meses negativos (enero-febrero) y dos meses positivos (marzo y abril), estos últimos con una pujanza destacada, marcando la gran diferencia abril. Queda el desafío de mantener la marcha, pero no a costa de la vida, la salud y el sufrimiento de la gente, en el combate al coronavirus. Qué vergonzoso sería terminar el 2021 con la economía ganando y la gente perdiendo. La historia no perdonará a aquellos que hicieron dinero sobre la sangre derramada. Was gesagt werden muss, muss gesagt werden. Duele decirlo, pero hay que decirlo.

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