Tiempo de conflictos en Argentina. Sustentabilidad puesta a prueba
Ricardo Rivas
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Por Ricardo Rivas
Corresponsal en Argentina
Twitter: @RtrivasRivas
El gobierno de Alberto Fernández cumplirá mañana tres meses. El período de gracia, por llamar de alguna manera al lapso de tiempo que las sociedades otorgan a las nuevas administraciones, por estos días, parece llegar a su fin. Los indicios son, sin dudas, preocupantes.
Un acuerdo con los acreedores privados y con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para resolver la situación de la deuda pública, se demora; con el sector agropecuario (con el campo), las tensiones crecen por el incremento gubernamental a los derechos de exportación (retenciones); y, con las iglesias católica y evangélica, la relación se endurece, como consecuencia del rechazo de esas dos organizaciones eclesiales al proyecto para legalizar el aborto que impulsa el presidente.
Veamos. Las reuniones del ministro de Hacienda, Martín Guzmán con la directora ejecutiva del FMI, Kristalina Georgieva, son solo discusiones. Nada se negocia por ahora porque no hay nada para negociar sobre la mesa. La posición del gobierno argentino es clara desde el mismo momento en que Fernández era candidato a triunfar sobre Mauricio Macri. "Así, no se puede pagar. Necesitamos no menos de tres años de plazo para comenzar a cumplir con los acreedores".
Con los acreedores privados, la situación no es mejor. Sabedores de que la Argentina no puede pagar, aceptan la imposibilidad pero, para recuperar lo invertido, proponen una tasa de interés cercana al 6% para los nuevos compromisos. El ministro Guzmán sólo dice que aceptará, por imposibilidad financiera, acercarse al 3%.
Los negociadores de los fondos Northern Trust, Greylock, BlackRock, Fidelity, Templeton y Pimco, dejaron Buenos Aires sin responder. Los bonos locales cayeron en los mercados. La tasa de riesgo país alcanzó los 2.500 puntos porcentuales. Los fondos de riesgo analizan comprar esos bonos deprimidos para, en un futuro -muy parecido al pasado reciente- recuperarse con importantes ganancias a través de la vía judicial en tribunales extranjeros a los que están sometidos esos papeles. El gobierno deja trascender que tiene una propuesta de pago que dará a conocer. Hay quienes sostienen que no podrá pasar de mayo venidero.
Con el campo, va mal. Desde el primer minuto de este lunes y hasta la medianoche del próximo jueves, el sector se mantendrá en huelga para la comercialización de granos y haciendas. Revive el enfrentamiento que en 2008, el entonces gobierno de la presidente Cristina Fernández, mantuvo con los mismos actores con daños políticos irreparables. Alberto Fernández –el actual mandatario- como consecuencia de aquello, renunció al cargo de Jefe de Gabinete de Ministros que ocupaba desde 2003. La tensión actual se debe a que el gobierno incrementó los derechos de exportación hasta el 9% por dólar lo que hace que, en el caso de la soja, que se encontraba en 18%, tribute un 27%. El presidente Fernández sostiene que “ellos saben que tenemos razón”. Pese a ello, categoriza públicamente al campo como “el socio estratégico” y admite que “nosotros necesitamos que crezca porque exporta”. Oxímoron. “Nos veremos en las rutas”, respondieron los productores. Diálogo caído.
Ayer, domingo, en torno de la Basílica de Luján, principal templo católico en la Argentina una multitud se expresó en contra de la decisión del presidente Fernández de legalizar el aborto. La convocatoria fue realizada por la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) que conduce el obispo Oscar Ojea, bajo el lema “Sí a las mujeres, Sí a la Vida”. La CEA –diseñada prolijamente por el Papa Francisco- protagonizó un acto político y religioso. Puso en debate un tema de la agenda pública desde la perspectiva dogmática. Los prelados están disgustados con Alberto F. Tres obispos que exigieron reserva sobre sus identidades, confidenciaron a este corresponsal que “la bronca” es porque “el presidente, con su proyecto, no sólo despenaliza las prácticas abortivas sino que va más allá y quiere hacer legal la interrupción del embarazo por una cuestión volitiva”. Al parecer, Fernández manifestó semanas atrás a la CEA que eso no habría de ocurrir. Añadió entonces que propondría al Parlamento, como lo hizo, un “Plan de los mil días para garantizar la atención y el cuidado integral de la vida y de la salud de la mujer embarazada y de sus hijos o hijas en los primeros años de vida” porque “procuraré evitar que se llegue al aborto por una situación de pobreza” y habría aclarado, “despenalizar no es abortar libremente”. Los católicos “no estamos solos” en la movida “contra el aborto no contra el gobierno, aclaró uno de los religiosos. “Lo hacemos unidos con las iglesias evangélicas tradicionales, no las electrónicas, porque en este tema tenemos la misma mirada”.
En el Instituto Patria, think tank del partido Unidad Ciudadana que conduce la vicepresidente Cristina Fernández, el miércoles último, cuando la entidad cumplió cinco años, Oscar Parrilli, senador nacional y titular de la organización, dijo, dirigiéndose al Presidente: "Va a tener en nosotros el apoyo y la colaboración que necesite", pero lo advirtió: "Cuando veamos cosas que nos parezca que están mal, también lo vamos a hacer saber". Luego, le recordó: "Cuando se fundó el Patria, dijimos: 'Somos, primero, opositores al gobierno de Cambiemos (Mauricio Macri) y nos conduce Cristina Kirchner'. Hoy decimos: 'Somos oficialistas, somos parte del gobierno de Alberto Fernández y nos conduce Cristina Kirchner'". ¿Condiciona el kirchnerismo a Alberto F?
Deuda, campo, aborto, iglesias y el flanco K de la coalición en alerta. La sustentabilidad declamada y reclamada puesta a prueba. No sólo para la economía, las finanzas y la producción. En lo social y en lo ideológico lo sustentable aparece aquí como una carencia a resolver en el seno de la coalición de gobierno.
Aconsejan estiramientos y caminar durante viajes largos para cuidar la columna
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La Sociedad Española de la Columna Vertebral (GEER) ha aconsejado que se hagan pausas frecuentes durante viajes largos en coche para salir a estirar y caminar, entre otras recomendaciones básicas para cuidar la espalda y evitar dolores lumbares o cervicales durante las vacaciones de verano. La sociedad científica agrupa a médicos y cirujanos especialistas en el diagnóstico, prevención y tratamiento de las enfermedades de la columna vertebral en España.
GEER apunta varias sugerencias a tomar en cuenta antes, durante y después de los desplazamientos. Así, en la preparación del viaje, los expertos recomiendan cuidar la postura a la hora de hacer la maleta, especialmente si es grande, ya que llevará más tiempo, por lo que se debe preparar a una altura adecuada que evite una flexión de tronco excesiva. Además, han pedido evitar cargar las mochilas en un solo hombro y tirar de las maletas con una sola mano.
Justo antes de viajar, los especialistas han aconsejado realizar algunos ejercicios de movilidad previos, sobre todo las personas con antecedentes de dolor lumbar o cervical. Durante el viaje, para estas personas puede ser también beneficioso utilizar un soporte lumbar; un cojín o una toalla colocada en forma de rulo valen.
Los expertos han hecho hincapié en la importancia de adoptar una buena postura durante los trayectos, pues si estos son largos se suele tender a ir deslizando la zona baja de la espalda hacia la parte delantera del asiento, colocándola en una posición inclinada que no es aconsejable.
Por el contrario, la posición adecuada es la de la espalda bien apoyada en el respaldo, con rodillas y caderas en ángulo recto. En esta línea, han puntualizado que la típica posición de las rodillas por encima de las caderas, con la que se asocia la comodidad, tampoco es recomendable.
Viajes en avión y tren
Si se viaja en avión o en tren y la duración del trayecto es superior a las dos horas, los especialistas han aconsejado levantarse cuando esté permitido, caminar por el pasillo, hacer rotaciones de tobillos y estiramientos suaves. Asimismo, en el asiento o de pie es conveniente realizar algunas flexiones suaves del cuello y hombros, rotación de tronco, si el espacio lo permite), estiramiento de isquiotibiales y gemelos y elevaciones de talones y puntas para activar circulación.
Asimismo, han llamado a evitar comidas muy pesadas antes o durante el viaje, algo que no solo repercute en la espalda sino en el bienestar general, pues pueden producir inflamación o molestias abdominales, que a su vez pueden alterar la postura. La hidratación también resulta clave para prevenir la rigidez muscular. En este punto, han recordado que en muchos aeropuertos ya se pueden rellenar las botellas de agua después del control de seguridad.
Al llegar al destino, lo mejor es caminar unos minutos y hacer estiramientos suaves. Las recomendaciones que se han dado para hacer las maletas sirven también para deshacer las maletas. En caso de dolor de espalda, hay que evitar quedarse tumbado mucho tiempo durante el primer día, de forma que debe priorizarse un ejercicio suave sobre el reposo absoluto.
En el contexto estival, los expertos del GEER han advertido también sobre las lesiones medulares, uniéndose a las autoridades sanitarias para pedir mucha precaución al volante y también en las playas y piscinas. Como han apuntado, cada año se registran en España entre 500 y 1.000 casos nuevos de lesión medular, más frecuentes en verano y asociadas sobre todo a los accidentes de tráfico y a imprudencias en las prácticas deportivas, con una incidencia cada vez mayor en personas jóvenes.
Según los datos del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, centro de referencia nacional, el mayor número de lesiones ocurre entre las edades de 16 y 30 años. De hecho, aproximadamente el 80 por ciento de estas lesiones se dan en el grupo de 16 a 45 años de edad.
La Encuesta de Discapacidad, Autonomía Personal y Situaciones de Dependencia de 2022 del INE muestra que casi 150.000 personas viven con este problema en centros y residencias. Se trata de un dato que prácticamente se ha quintuplicado con respecto al de hace una década y que podría revertirse notablemente si se tiene en cuenta que muchos accidentes de tráfico y lesiones en playas y piscina son muy evitables.
Bombas sin bombarderos… sin paquetes sospechosos… asemejan a peligrosas herramientas incrustadas en la vida cotidiana… Quienes diseñan y desarrollan – quiero pensar que, sin desearlo, planificarlo ni gestionarlo– no siempre ven (o quieren ver) con claridad a las señoras y señores de la guerra y sus despreciables prácticas.
Por Ricardo Rivas
Periodista X: @RtrivasRivas
Fotos: Gentileza
En la construcción de la verdad necesariamente interviene la cultura. ¿Qué es verdad? “La realidad”, responden algunos y algunas. Pero... “la verdad no es una representación unívoca de la realidad”, sostiene Yuval Noah Harari en la página 44 de la edición que leo y releo de Nexus, una de sus obras más vendidas en nuestra maltratada aldea global. La realidad es compleja. Tanto como la humanidad. “¿Es tan sapiens el homo?”, recuerdo que decía irónicamente un tan querido como veterano colega periodista, corresponsal de la prensa internacional, con el que compartimos no menos de cinco años de trabajo en Latinoamérica. “¡Tendrá que demostrarlo!”, agregaba a modo de respuesta a una pregunta que nadie había expresado. Reíamos y brindábamos con otra cerveza para dejar atrás las mil formas de violencias que verificábamos en nuestras búsquedas periodísticas.
No conviene conceder “a la IA un mayor control sobre las sociedades del siglo XXI (...) futura dictadura de la IA podría ser muy distinta de lo que hemos conocido hasta ahora”, sentencia Yuval Noha Harari
De todas formas, aquel interrogante lanzado al aire todavía hoy no me animo a responderlo. Lo mío es la pregunta. El interrogante permanente. Solo políticos y creyentes en lo que venga e internalicen se presentan y actúan como propietarios de las respuestas. Los pongo en duda. ¡Sépanlo! Y aunque lo hago con respeto y, de alguna forma, en defensa propia, tengo claro y coincido con Harari en que “el poder no es sabiduría”.
Algunas palabras se ponen de moda. Muchas. Inteligente (smart) y dron son dos de ellas. Esperanza es la otra, aunque debo decirlo, rescato solo esas tres con el propósito de construir esta historia en esta noche de frío (¡muy frío!), de viernes junto a los leños crepitantes y sentado en la vieja mecedora. Afuera, la niebla es densa. Las nubes decidieron desplomarse sobre la tierra para quedarse allí. Silenciosas. Como en acecho de aquellos y aquellas que se atrevan a andar sin la certeza de saber qué hay dentro de tamaña tiniebla.
Con casi sesenta guerras activas –desde algún lugar– el hábitat global es tenebroso. Con la popularización de los que se plantan como creadores revolucionarios de los desarrollos tecnológicos y, a veces, mucho más, el espanto crece. Bombas sin bombarderos… sin paquetes sospechosos… asemejan a peligrosas herramientas incrustadas en la vida cotidiana. Quienes diseñan y desarrollan –quiero pensar que, sin desearlo, planificarlo ni gestionarlo– no siempre ven (o quieren ver) con claridad a las señoras y señores de la guerra y sus despreciables prácticas. En ese campo también crece la IA (inteligencia artificial) que deslumbra, preocupa y deviene en símbolo que simboliza a partir de la cultura de quienes simbolizan para relatarla y producir sentido. Nada existe sin relato. Primero fue el verbo. Vuelvo a Harari. “La IA es la mayor revolución de la información que ha conocido la historia (que) no es el estudio del pasado, sino el estudio del cambio. (Porque) nos enseña lo que se mantiene inmutable, lo que cambia y cómo cambian las cosas”. Yuval Noah señala, desde esa perspectiva, sobre la inconveniencia de conceder “a la IA un mayor control sobre las sociedades del siglo XXI” dado que “se diferencia (entre otros desarrollos tecnológicos de alto impacto en las prácticas bio-psico-sociales) de la imprenta y de la radio (porque una eventual) futura dictadura de la IA podría ser muy distinta de lo que hemos conocido hasta ahora”. Desde la atenta observación y profunda reflexión hace públicas algunas de sus conclusiones. La inteligencia artificial “es la primera tecnología de la historia que puede tomar decisiones y generar nuevas ideas por sí misma”. La IA “puede procesar información por sí sola, (y) por lo tanto, sustituir a los humanos en la toma de decisiones (porque) no es una herramienta, es un agente”. ¿Por qué tanta preocupación? Su respuesta no se hace esperar con ejemplos concretos. “En el momento actual, en la fase embrionaria de la revolución de la IA, los ordenadores toman decisiones por nosotros: la concesión de una hipoteca, un contrato de trabajo o la imposición de una pena de cárcel. Esta tendencia no hará más que aumentar y acelerarse, lo que nos dificultará la comprensión de nuestra propia vida. ¿Podemos confiar en los algoritmos informáticos (sobre los que también se apoyan las operaciones de la IA) para tomar decisiones sensatas y construir un mundo mejor?”.
“La IA puede simular aspectos del razonamiento humano y realizar tareas específicas con velocidad y eficiencia, pero no puede (con) el discernimiento moral ni (...) establecer relaciones genuinas”, sostiene el papa León XIV
CONOCIMIENTO VERDADERO
Muy poco más de una década atrás, Tenzin Gyatso (90), el Dalai Lama –Premio Nobel de la Paz en 1989, en el transcurso de una cumbre de premios nobel que se realizó en Roma– sostuvo que la tecnología “puede convertirnos en esclavos” porque “si todo está mecanizado, no tenemos la capacidad de ver más allá” y exhortó para que “sea bien utilizada” dado que al “conocimiento verdadero (por muy desarrollada que esté la IA) “es imposible llegar y que sea mejor que la mente humana (porque) siempre será mejor y más inteligente (que) máquinas y robots (sin que importe) lo sofisticados que sean”.
Era el sábado 13 de diciembre de 2014. En nuestro presente, un puñado de días atrás, en Ginebra, Suiza, la Unión Internacional de las Telecomunicaciones (UIT) –asociada con otras agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)– desarrolló la “Cumbre de la IA (Inteligencia Artificial) para el bien”. Las preocupaciones de quienes allí convergen claramente crecen y así lo expresan. “La humanidad se encuentra en una encrucijada ante el inmenso potencial generado por la revolución digital impulsada por la inteligencia artificial”, sentenció en un mensaje que envió a la UIT el papa León XIV. En ese texto reseñó que el impacto de la inteligencia artificial se percibe en campos tales como “la educación, el trabajo, el arte, la sanidad, la política, el ámbito militar o la comunicación” y, justamente, por ello el jefe del Estado Vaticano demanda de quienes trabajan en ese tipo de desarrollos “responsabilidad y discernimiento”. El también líder del catolicismo advierte que “la inteligencia artificial puede simular aspectos del razonamiento humano y realizar tareas específicas con velocidad y eficiencia, pero no puede replicar el discernimiento moral ni la capacidad de establecer relaciones genuinas”. Al cabo de esa argumentación sobre la IA abogó a expertos y desarrolladores por el “respeto por los valores humanos y sociales, capacidad de juicio con conciencia clara y crecimiento en la responsabilidad” para garantizar –desde marcos éticos y jurídicos– “que se base en el reconocimiento compartido de la dignidad inherente y las libertades fundamentales de la persona”.
“Es preciso trabajar juntos para detener a los robots (y drones) asesinos”, propuso Daisaku Ikeda (1925-2023) ante la Organización de las Naciones Unidas
TECNOLOGÍA Y VIOLENCIA
El uso de los más recientes desarrollos tecnológicos aplicados al ejercicio de las violencias se expande con proyección global. La IA es esencial en el desarrollo de armas autónomas no tripuladas. La guerra digital parece haber llegado para quedarse. En un reciente reporte de la organización Drone Wars UK (https://dronewars.net/) se consignan los resultados de una investigación que, en sus conclusiones, revela “la magnitud del daño a civiles causado por los ataques con drones militares en países africanos, como Etiopía, Mali, Burkina Faso, Nigeria, Somalia y Sudán”. Sin dejar afuera de sus búsquedas Ucrania, Gaza o todo Oriente cercano, añade que “drones armados tipo MALE importados en todo el continente, de fabricantes de Turquía, China e Irán” se utilizan ampliamente. “Como mínimo, se determinó que más de 943 civiles han muerto en al menos 50 incidentes separados entre noviembre de 2021 y noviembre de 2024”, según consta en las pesquisas desarrolladas y precisan que “de los seis estados investigados, cinco han sido verificados por operar drones Bayraktar TB-2, producidos por el fabricante turco de drones Baykar, (que en) varios también operan drones armados Wing Loong II y (sistemas de armas autónomos) Mohajer-6 de Irán”. Destaca el sitio que esos equipos también intervienen “en campañas militares nacionales (internas, dirigidas) contra grupos insurgentes armados (y que) regularmente (esas armas llamadas inteligentes) no distinguen entre civiles y combatientes en sus operaciones”. Los analistas precisan que “en un incidente ocurrido en la región etíope de Amhara, más de 85 civiles murieron en un ataque con drones contra la aldea de Ch’obi en octubre de 2022”. Luego que, “en otro incidente, en Nigeria, un error de inteligencia militar causó la muerte de al menos (otros) 85 civiles –y, según algunos informes (podrían ser) hasta 125 (las víctimas)– que (estaban reunidas) para celebrar la festividad islámica de Mawlud, (y fueron asesinadas) en dos ataques con drones mal dirigidos en diciembre de 2023”.
Las matanzas (incidentes) de civiles sin riesgo alguno para quienes operan los drones porque se encuentran en áreas alejadas de las operaciones en desarrollo se multiplican. “Hace tres semanas, el 10 de junio, un dron británico Reaper comenzó a rastrear una motocicleta en el noroeste de Siria, cerca de la frontera con Turquía”, relata dronewars.net “mientras (en tierra) alguien descrito por la inteligencia de un país europeo central como ‘un miembro conocido’ de ISIS (Estado Islámico de Irak y Siria, por su sigla en inglés) la conducía. El individuo, que aparentemente había sido monitoreado por el dron ‘durante algún tiempo’, fue rastreado y abatido por un misil Hellfire disparado por el dron poco después”. ¿Es necesario añadir información al reporte? ¿Algo no se entiende? ¿También existe el llamado “gatillo fácil” en el ecosistema digital de las nuevas guerras?
Los drones atacan incluso en áreas civiles densamente pobladas. Los daños no deseados se repiten. ¿Existen y se cumplen disposiciones para preservar y mitigar eventuales daños sobre la población civil? “Estos casos demuestran la urgente necesidad de reforzar los controles sobre la proliferación de drones armados y la clara falta de responsabilidad de quienes exportan estas armas al proporcionarlas a gobiernos aparentemente poco dispuestos a respetar el derecho internacional humanitario. La magnitud del sufrimiento civil que se muestra en este informe debería dejar clara la amenaza que supone la rápida expansión de la guerra con drones en todo el mundo, facilitada por el acceso a sistemas de armas cada vez más baratos producidos por fabricantes irresponsables y con ánimo de lucro”. Acechan los drones y, por ello, “las actividades más básicas de la vida cotidiana –visitar un mercado o asistir a un lugar de culto– (son) potencialmente mortales”.
“Solo existen dos días en el año en que no puedes hacer nada. Uno se llama ayer y otro mañana. Por lo tanto, hoy es el día para amar, crecer, hacer y vivir”, predica el Dalai Lama, Premio Nobel de la Paz 1989
PAZ, SIEMPRE
En mayo de 2019, Daisaku Ikeda (1928-2023), filósofo budista, educador, constructor de la paz, escritor y poeta, ante la Asamblea General de la ONU –invitado por António Guterres, secretario general de esa organización multilateral– propuso la prohibición de las armas autónomas letales (SAAL, por su sigla en inglés). “Existe en la comunidad internacional la creciente inquietud de que los SAAL transformen radicalmente el entorno de la seguridad global”, dijo Ikeda aquel día. Aseguró después, sin que nadie lo desmintiera o contradijera, que “una de las amenazas que representan estos sistemas (de armas) es la posibilidad de iniciar combates sin intervención humana directa”. Aleccionó luego que ello “reduce el umbral de las acciones militares y genera situaciones potenciales que podrían violar gravemente el derecho internacional humanitario”. Esperanzado, exhortó “enfáticamente (…) a los Estados que ya han solicitado la prohibición de los SAAL; a países como el Japón, que han declarado su intención de no fabricar tales armas; y a las oenegés participantes en la Campaña para Detener a los Robots Asesinos, a unirse y trabajar juntas por la pronta aprobación de un instrumento jurídico vinculante que prohíba por completo el desarrollo y el uso de estos sistemas”. Miles lo escuchamos, aplaudimos y vitoreamos. Pensamos como él, sentimos como él. Decimos enérgicamente no a drones y robots asesinos. Deseamos la paz. Sabemos que se puede y se debe. ¿Cuándo? Siempre. Alguna vez, el Dalai Lama lo dijo claramente. “Solo existen dos días en el año en que no puedes hacer nada. Uno se llama ayer y otro mañana. Por lo tanto, hoy es el día ideal para amar, crecer, hacer y vivir”.
Los operarios de la Administración Nacional de Electricidad (Ande) rápidamente acudieron al sitio y tras unas horas de trabajo lograron restituir el servicio a los usuarios. Foto: Ilustrativa.
Bus sin freno terminó chocando contra una columna y dejó sin luz al barrio
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Un ómnibus al servicio de la empresa Ñandutí sin freno se llevó por delante un automóvil y una moto, para luego terminar derribando una columna de la Administración Nacional de Electricidad (Ande) dejando sin luz a todo un barrio de la ciudad de Itauguá.
Según la Policía, el conductor paró en una estación de servicios para abastecerse de combustible, puso el freno de mano, pero aparentemente, éste falló y el transporte se deslizó por la calle Marcial Samaniego causando cuantiosos destrozos materiales a su paso.
“Según manifestaciones del conductor, éste dejó estacionado como para reabastecer de combustible su ómnibus. Le puso con freno de mano y minutos después ya se percata que el ómnibus se desprende del freno de mano”, relató el subcomisario Paulo Alcina a Telefuturo.
Siguió contando que el colectivo se llevó por delante una motocicleta y un vehículo, pertenecientes a empleados de la citada empresa de transporte. Posteriormente terminó impactando contra la columna de alta tensión de la Ande, dejando sin luz a todo el barrio, inclusive a la comisaría local.
El percance se produjo ayer aproximadamente a las 22:00 cuando la unidad ya se encontraba cerca de la parada, tras completar su ronda habitual, en la compañía Ita Guasu de la ciudad de Itauguá.
Es así que el chofer estacionó en el lugar y activó el freno de mano, pero aparentemente falló el dispositivo, con lo que el bus avanzó sólo hacia la entrada principal de la empresa, generando los daños materiales y afectando a varias personas.
De viejas y viejos en plenitud. Edadistas, abstenerse
Ricardo Rivas
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Ricardo Rivas
Periodista
X: @RtrivasRivas
Fotos: Gentileza
El edadismo es una patología social que da cuenta de quienes victimizan y discriminan por edad sin observar la condición humana ni respetar la dignidad infinita de cada persona.
La semana que viene –el domingo– finalizará el Mundial de Clubes de la FIFA (Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol). Habrá terminado también esta suerte de ensayo general de otro campeonato “mundial”, el de selecciones nacionales, que durante el 2026 se desarrollará en México, Canadá y Estados Unidos.
Es preciso, entonces, para las entidades organizadoras, capacitar a quienes tendrán la responsabilidad de aportar sus conocimientos para que ese evento cuatrienal –deportivo y cultural– sea estupendo y, finalmente, un meganegocio brillante.
También es preciso capacitar a los públicos que –por qué no decirlo– tienen prácticas sociales diferentes para consumo y disfrute de ese tipo de espectáculos. No es sencillo, por cierto. El encuentro en el que se definirá el campeón se realizará en el Metlife Stadium de Nueva Jersey, a las cinco de la tarde de la hora del este.
Los múltiples ecosistemas comunicacionales –con medios tradicionales o no– también son parte de tales aprendizajes que se realizan sobre la marcha. Las narrativas –en línea con lo dicho– también serán diferentes ante tanta diversidad. Con esos objetivos obvios entre tantos otros que solo conocen unos pocos, desde el 14 de junio último –cuando el Inter de Miami y el Al-Ahly empataron sin goles en el Hard Rock Stadium de Miami Gardens– 32 formaciones constituidas con destacados deportistas disputaron y disputan sin descanso, aunque algunos, por los avatares de las competencias, ya volvieron a casa porque sus formaciones quedaron en el camino.
DATOS, METADATOS Y CURIOSIDADES
Entre los 230 futbolistas de alta competencia que se enfrentan en cada disputa, 80 de ellos tienen 22 años; 77, más de 21; 69 superan los 25 y 64 son mayores de 29. En este último grupo se encuentran Lionel Messi (38), Luis Suárez (38), Sergio Busquets (36) y Jordi Alba (36). Seguramente, ese cuarteto bien podría devenir en quinteto si añadiéramos a Cristiano Ronaldo (40), que no participa de la copa en juego, pero claramente son gigantes profesionales de altísima competencia con máxima visibilidad –entre aficionados y quienes no lo son– desde poco más de un par de décadas.
Sin embargo, no son pocas ni pocos aquellos que no dudan en llamarlos viejos y criticarlos por ello, dado que “ya no juegan como antes”. Para muestra alcanza con un botón. Apenas un año atrás, el periodista Dylan Hernandez (36), en el diario Los Angeles Times, enlazó apenas once palabras para decir de sus contemporáneos futbolistas que “Messi es viejo. Luis Suárez está viejo. Sergio Busquets está viejo”. Pese a ese parecer, su mirada crítica fue benevolente con Jordi. “El único miembro del (ex) cuarteto de Barcelona que no parecía estar jugando con el depósito de gasolina vacío fue Alba, el lateral izquierdo de 34 años que corría de un lado a otro de la banda como si fuera 10 años menor que él”.
Bordeó el edadismo, esa patología social que da cuenta de quienes victimizan y discriminan por edad sin observar la condición humana ni respetar la dignidad infinita de cada persona. “Es preciso comprender y comprehender que desde el mismísimo momento en que se abandona la vida intrauterina comienza el envejecimiento, también llamado senescencia”, decía el bien querido Helvio “Poroto” Botana, uno de mis maestros de vida que me indujo al periodismo. “Es inevitable”, advertía.
Hay quienes, pese a ello, se animan a explicar que la vejez comienza en torno de los 60 años. Eufemistas, muchas y muchos, nos dicen que somos parte de la llamada tercera edad, mientras que otros nos señalan como “adultos mayores”. En China, no son pocas las y los periodistas con los que compartimos 15 años de trabajo en la agencia de noticias Xinhua que me apodan lǎo . Veterano. Confieso que me divierte. Y, cuando los tiempos dan tiempo para la reflexión, me sorprendo y asombro de ser tan viejo como lo era don Ricardo, nuestro querido viejo. ¡Y que mis hijos me llamen amorosamente “viejo” como llamábamos a mi viejo!
ESPERANZA DE VIDA
Allá por 1951 –cuando nací, en Buenos Aires, Argentina, unos 1.250 kilómetros al sur de mi querida Asunción, un viernes 12 de enero, tal vez, cerca de las cuatro de la tarde– médicos, médicas y expertos en estadísticas explicaban que la esperanza de vida era de 65 años. Especificaban también que ese dato era “un promedio” (¿cuándo no lo es el resultado de un trabajo estadístico?) porque los estudios de entonces precisaban que las mujeres llegaban hasta los 68 y los hombres hasta los 63.
Esperanza de vida… Curiosa expresión. Aunque –ahora que lo pienso, en esta noche de viernes arropado por la silenciosa paz de la nocturnidad, muy cerca de los leños crepitantes, sentado en mi exclusiva silla mecedora– la esperanza era de ellos y ellas, productores de estadísticas. Sonreí.
Afuera, en las calles desiertas los termómetros marcan -6°. La ola polar pega con la fuerza. Veintisiete mil doscientos cuatro días pasaron desde entonces hasta este domingo. La luz encandiló mis ojos por primera vez hace ya seiscientos cincuenta y dos mil ochocientas noventa y seis horas. La curiosidad me llama.
DeepSeek –la IA (inteligencia artificial) china de código abierto– me dice que las niñas y niños que nazcan este domingo, siempre según los estudios de aquellas y aquellos que todo lo miden– en promedio vivirán 77,5 años. La vida se prolonga. “¡Ahora vivimos más y mejor!”, escuchamos una y otra vez. ¿Será tan así? No puedo con el oficio. Siempre me emergen preguntas. Nunca respuestas. Esas solo aseguran tenerlas los que se dedican a la política o a las creencias. Pensamientos y recuerdos vuelan por sobre mí. Descubro que no tienen techo.
PLENITUD
No son pocos los viejos y viejas que aparecen y desaparecen luego de entrecerrar mis ojos. Ringo Starr (84), Paul MacCartney (83), Mick Jagger (81), Keith Richards (81), Ronnie Woods (78), Bill Wyman (88), Mick Avory (81), Ricky Fenson (80), Palito Ortega (84), Yoko Ono (92), Raúl Lavié (87), Amelita Baltar (84), Arnaldo André (82), Joan Manuel Serrat (82), Joaquín Sabina (76), Pedro Almodóvar (76) y millones más de anónimos que –como como ellos, ellas, Lionel, Luis, Sergio y Jordi– no son viejos ni viejas, sino que están en otra etapa de sus vidas y en plenitud.
¿Qué es lo que no se entiende? “Este día no significa mucho para mí… Cuando cumplí un año, seguramente mi madre (Leonor Acevedo Suárez) celebró. Aquellos doce meses eran toda mi vida. Hoy, usted me pregunta qué significa cumplir 85… Debo decirle que… muy poco. Se trata solo la 85ava parte de mi vida”, me dijo Jorge Luis Borges, el gran maestro, durante una entrevista para la tele.
Era el 24 de agosto de 1984. Después de aquella respuesta que –palabras más palabra menos– recibí en silencio y, lo aseguro, sin comprender, me reuní con él socialmente unas pocas veces más para compartir momentos simples, sencillos, graciosos (el viejo maestro era un fino humorista). Profundos, inolvidables. Sé que algo –no mucho– conocí a Borges y que me aceptó como tertuliano.
Matusalén (3074-2015 antes de nuestra era), el abuelo de Noé, según el libro del Génesis, murió a los 969 años. ¿El más longevo de la historia?
Algunas veces dialogábamos en el tan mítico como histórico café La Biela, frente al mismísimo cementerio de la Recoleta, hacia donde don Jorge miraba sin ver con sus manos apoyadas en descanso sobre el cayado de su bastón. Siempre inconsulto, Ricardo, el calvo mesero, servía un café ristretto y un té en hebras. Yo iba por el primero. Con las campanas de la iglesia Nuestra Señora del Pilar, ubicada allí, a unos 200 metros, donde los jesuitas la construyeron en el 1732, sabía que eran las seis de la tarde. “Hora del Ángelus…”, recordaba que decía su madre. También era el momento de desandar el camino. Lentamente lo acompañaba. Caminábamos primero unos pocos pasos hacia el Paseo de Chabuca Granda y –desde allí– hasta el 994 de la calle Maipú, donde vivía en el sexto piso.
TIEMPO DE DICHA
“La vejez (tal es el nombre que los otros le dan) / puede ser el tiempo de nuestra dicha. / El animal ha muerto o casi ha muerto. / Quedan el hombre y su alma. / Vivo entre formas luminosas y vagas / que no son aún la tiniebla…”, dije una tarde en su presencia. ¿El tiempo de la dicha? “Sí, Cicerón estaba equivocado cuando escribió, en ‘Senectute’, que ‘la vejez es la peor edad del hombre’”, respondió.
Guardé silencio. Recordé, mientras andábamos, que aquel poema –“Elogio de la sombra”–, que Borges escribió en 1969, concluía con cuatro sencillas palabras: “Pronto sabré quién soy”. Casi finalizaba agosto de 1985. Nos despedimos con un afectuoso apretón de manos. En el fin de aquel año marchó a Suiza, donde también viviera cuando quinceañero entre 1914 y 1919. No regresó. Su noche eterna transcurre – desde el 14 de junio de 1986– en el cementerio de los Reyes, Ginebra. Allí fue inhumada toda su vida, aunque sobrevive en sus obras y legado.
Desde su ausencia comprendí que Borges, cuando aquel último paseo, me indujo a reflexionar sobre el paso de los años. Sobre el envejecimiento. En la senectud. Inusual, tal vez, a los 35. Cuando don Jorge nació, la esperanza de vida en la Argentina la medicina la estimaba en torno de los 40 años. Borges partió cuando le faltaban pocos días para cumplir 87.
A quienes inevitablemente alguna vez lo consultamos sobre la muerte, con ironía solía responder que “no” podía imaginar, “siendo tan viejo, que pudiera conocer algo nuevo”. Sospecho que su encuentro con la Parca hubo de ser “para alquilar balcones”. Especular sobre el paso de la vida a la muerte o… a la otra vida, para quienes creen en que la hay en un posible más allá, desde siempre es un tema atrapante. Envejecer, también. Aunque en ambas situaciones es común que se vean esos temas como propios de las otredades.
MATUSALÉN
¿Qué es lo viejo? ¿Qué es ser viejo? ¿Quién es viejo? Aunque casi es una expresión caída por derribo, hasta no mucho tiempo atrás ser señalada o señalado como “más viejo que Matusalén” socialmente determinaba y no positivamente. Así llamado, el hijo de Enoc, el padre de Lamec y, también, el abuelo de Noé –el constructor del arca antediluviana– en el libro del Génesis, al parecer, nació en el Antiguo Oriente Próximo en el 3074 y murió en el 2015 antes de nuestra era. No es un error. No. Según esos textos sagrados para cristianos, judíos y musulmanes, vivió 969 años. Existen aún quienes lo señalan como “el hombre más longevo de la historia”. ¿Habrá sido así? ¿Será así o solo será una relevante y muy respetable cuestión de dogma o fe? ¿Será acaso metafórico?
PENUMBRA
Vuelvo a Borges y a su “Elogio de la sombra” que fragmentariamente recuerdo… “Siempre en mi vida fueron demasiadas las cosas; / Demócrito de Abdera se arrancó los ojos para pensar; / el tiempo ha sido mi Demócrito. / Esta penumbra es lenta y no duele; / fluye por un manso declive / y se parece a la eternidad. / (…) Mis amigos no tienen cara, / las mujeres son lo que fueron hace ya tantos años, / las esquinas pueden ser otras, / no hay letras en las páginas de los libros. / Todo esto debería atemorizarme, / pero es una dulzura, (…) pronto sabré quién soy”.
Sospecho que Borges sentía que aquel del 85 era parte de su último viaje. Tal vez, sus ojos que no veían se miraban en aquel Hamlet que, atormentado –como William Shakespeare lo creó– sostiene que “la conciencia, así, hace a todos los cobardes y, así, el natural color de la resolución; se desvanece en tenues sombras…”.
El relato de los tiempos produce sentido. Lionel, Luis, Sergio y Jordi no son viejos. Diego Bernardini, médico que recorre una y otra vez la aldea global para explicar de qué se trata la “nueva longevidad”, suele comentar que “en la adolescencia, te preguntas qué quieres ser de mayor; a los 40 años, miras qué has hecho con tu vida; cuando ya has cumplido con los demás, te planteas qué quieres hacer con el tiempo que te queda”.
Lionel Messi (38), Luis Suárez (38) y Sergio Busquets (36), en otra etapa de sus vidas, según el periodista estadounidense Dylan Hernandez, están “viejos”. Jordi Alba (34) no tiene aún “el depósito de gasolina vacío”