El precio del dólar (su venta al público) en el 2019 subió 6,7% (minorista o en las casas de cambio), 8,6% (en los bancos, o para las empresas, 8,4% en el promedio de operaciones diarias del libre fluctuante que monitorea el Banco Central del Paraguay (BCP) y 7,8% en el tipo de cambio que la institución responsable de la política monetaria usa en sus cuentas naciones. Las variaciones son punta a punta, es decir final del 2018 (diciembre) versus final del 2019 (diciembre). Para evitar oscilaciones bruscas e imprevistas el Banco Central vendió 1.295 millones de dólares en el mercado privado el año pasado, levemente superior a los 1.273 millones de dólares colocados en el 2018: un total de 2.569 millones acumulados en dos años de turbulencia cambiaria en la región. ¿Se desangró el BCP en su objetivo de estabilizar el precio del dólar, no yendo contra la tendencia natural al alza del mercado (oferta y demanda), pero sí suavizando el encarecimiento de la moneda norteamericana, que impacta en la inflación local (2,8% el año pasado); es decir, en el valor del guaraní y en el bolsillo de la gente? No. No. Habíamos cerrado el 2018 con reservas internaciones por un monto de 8.010 millones de dólares y terminamos el 2019 con un monto de 7.919 millones de dólares al 27 de diciembre pasado y 7.975,6 millones al 3 de enero pasado. Misión cumplida.

Muchos pueden considerar que lo de conservar nuestra estabilidad monetaria y cambiaria es un accidente. Y sí. Accidente que se repite cada año. Y hay muchos delirantes ideológicos y analfabetos políticos que aún consideran que la macro (grandes números como las reservas internaciones del BCP o los 2.569 millones vendidos para calmar las aguas) nunca llega a la micro (el bolsillo, el estómago de la gente). ¿Qué golpea más a la gente un dólar a 6.350, 6.472 y 6.464 guaraníes, al final del 2019 u otro a 6.600, 6.800, 7.000 y, por qué no 7.500 a 8.000 guaraníes, precios que podrían haberse dado relativamente y fácilmente? Un solo ejemplo de la diferencia: tuvimos una sola suba en el precio de los combustibles importados en el 2019. ¿Tres serían suficientes o quizás menos o quizás más con aumentos verdaderamente de estallidos? Nada es más peligroso en economía cuando ignorantes intelectuales menosprecian la estabilidad monetaria y cambiaria. Y con hipocresía la desvalorizan al mismo tiempo que tranquilamente compran dólares con rapidez y seguridad para adquirir todo lo importado que los hace felices en sus acomodados hogares, escribiendo en sus notebooks: “La estabilidad es insuficiente y no llega a nuestra gente”. No hay peor paraguayo que aquel que no respeta su ignorancia (PHerken).

Sé que las comparaciones son odiosas, pero da gusto hacerlas. ¿Cómo les fue en materia de encarecimiento del dólar en el 2019 a otros países vecinos y referenciales?: Argentina 62,2%, Brasil 3,6% (pero se le escapó en un momento), Uruguay 15,3% y Chile 8,4%% (al final, porque casi toco las nubes). Ahora, si tomamos en consideración los dos años de turbulencia entre diciembre del 2017 y diciembre del 2019 ¿cuál fue la suba del precio del dólar en los mismos países considerados agregando el nuestro? Veamos: 232,9%, 21,1%, 14% (Paraguay), 29,8% y 22,3%, respectivamente. Sí. Nuestra estabilidad no es un accidente. Tampoco la ignorancia hipócrita de muchos inestables con sus escasos “sentido común” revestido de sabiduría acomodada en beneficio de sus propios intereses. Pese al mal año volvimos a demostrar que sabemos cuidar el valor del dinero de la gente y que no somos Argentina. Duele decirlo, pero hay que decirlo. DDPHQD

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