Por Eduardo “Pipó” Dios
Desde que tengo uso de razón –bueno, algún uso de razón si quieren– escucho lo de la separación entre la Iglesia y el Estado.
Así también veo que éramos desde siempre un “país eminentemente católico”, o sea éramos católicos casi todos. Vino un Papa, después vino el otro y cada vez que vienen salimos todos los paraguayos a saludar o a mirar o a curiosear o a reemocionarnos, ndajeko. Banderitas, criaturas disfrazadas, etc., no faltan, al igual que los 8 de diciembre.
Hace un tiempo aparecieron con furor “los cristianos”, de la mano de pastores con gran sentido histriónico y, al parecer, con mayor tolerancia a los otrora considerados “pecados” para la Iglesia Católica. Esos curas con los que si eras divorciado, gay, hijo natural y hasta medio bolche ya tenías asegurado el infierno sin escalas, VIP oro y mesa para 10 todo incluido. Gran parte de los fervientes católicos huyeron de las reglas de la Edad Media y encontraron cobijo en esos lindos templos nuevitos.
Sin embargo, a la hora de los actos oficiales, seguimos siendo un Estado laico, pero reeeeecatólico… o sea hay Tedeum, monseñor que bendice, rezan todos, nambre loo. Ni qué decir el cholulismo en su máxima expresión, cuando hay que ir a saludar al Papa. Alguien me explique qué… (iba a poner qué diablos o qué cuernos, pero mejor no…) se van a hacer en el Vaticano. Delegaciones de 20 personas o más se sacan fotos, le besan la mano al Papa, agarran el rosario, las mujeres se visten como si fueran viudas del siglo 19. Una cosa de locos.
¿Qué acuerdo importante, qué tratado, qué donación, qué crédito, aunque sea eso de “cielos abiertos” que firmamos con cuanto paisucho nos viene de visita, vamos a firmar con el Vaticano? ¿En qué gua’u nos beneficia esa relación tan cool con el Papa?
Aclaro que me cae bien el Papa este, como me caía bien Juan Pablo II (ese del medio que se parecía al malo de la Guerra de las Galaxias no tuve tiempo de digerirlo mucho, pero no importa…), pero no entiendo el show de ir todos a besarle la mano al Papa. Está bien si quieren ir Marito y familia, de repente cuando pasan cerca. Onda “ya que estamos por Europa, papi, y si nos sacamos una foto con el Papa”. Y se pegan una escapadita, pagando de su bolsillo si es posible, pero ir con toda esa banda de tekorei disfrazados ya es mucho.
Al final, seguro que la mitad de los que fueron son de algún culto cristiano y el miércoles van a estar ahí con su pastor, o sea fueron de cholulos, por la foto. Eso sí, pagamos todos, señores. Estos no ponen un centavo nunca para nada.
O en serio somos un Estado laico o no. Después se enojan porque el senador fulano se bautiza en la pelopincho del pastor Abreu, cuando eso no nos cuesta pasajes y viáticos para la comitiva de cholulos y sus familias.
Ya me plagueé todo. Del robo del clásico no voy a hablar. Buen día.