- Por Víctor Benítez
Ha terminado el Mundial de Rusia y es un buen momento para dejar un registro de las cosas que hemos visto con el pretexto del fútbol. Así queda un testimonio preciso de este momento de la historia signado por un hecho deportivo.
Básicamente fue campeón del mundo África. La historia oficial dirá que fue Francia, pero todos hemos visto a los jugadores que poco o nada tienen que ver con la llamada “rubia albión”. Tiraban más a “moreno carbón”. Todos ellos con documentos de identidad de Francia. Los inmigrantes e hijos de inmigrantes africanos le dieron una cachetada a la xenofobia francesa.
Croacia fue vicecampeón futbolísticamente hablando, pero en los corazones de muchísimas personas del mundo entero se ganó el primer lugar. Aprendimos que es un pueblo sufrido, castigado por años de guerra, sacrificios humanos y vejámenes. Su presidenta nos metió en su bolsillo con su simpatía y su arriero pórte. Reivindicaron el valor patriótico y simbólico del mantel a cuadros.
No pasó nada con Argentina, Brasil, Inglaterra, Alemania y ni siquiera llegaron Italia y Holanda, por ejemplo. Quedó confirmado que el fútbol no tiene lógica o al menos previsibilidad. No fue el Mundial de Messi, ni de Cristiano Ronaldo ni Neymar. Todo esto me hace dudar de los conocimientos de los periodistas deportivos. ¿Cómo pudieron equivocarse tan grande? Me hacen acordar de las encuestas y las bocas de urnas que padecemos acá.
La FIFA “recomendó” que los canales de televisión dejen de mostrar a mujeres atractivas para no distraer la atención de los televidentes en cosas que no tengan directamente que ver con el juego del fútbol. Un disparate que no sé si hay que atribuir a algún pelotudo o a algún mariposón con poder en la FIFA. Me dijeron que es para no cosificar a la mujer. Mientras tanto se muestran a 22 jugadores, tres árbitros más los suplentes corriendo en la cancha sin más prenda que una camiseta y calzoncillos. ¿Eso pio no es cosificar al hombre?
Hay más cosas que comentar, pero el espacio no es suficiente para abarcar tanto. Sean estas últimas líneas para destacar la ausencia de la selección paraguaya. No es que nos hayan extrañado ni que el Mundial fracasó porque no estuvimos, pero te da pena ver que hasta Panamá se clasificó y hasta Corea le ganó a Alemania mientras nosotros no le pudimos ganar ni a Venezuela. Y así nos fue.