- POR BERNT ENTSCHEV
- Presidente y fundador de The Bernt
Por mucho tiempo se oyó decir que Brasil solo funciona después de las fiestas del Carnaval. Esto ha cambiado mucho en los últimos años. Sin embargo, es innegable que al final de la segunda quincena de diciembre, incluyendo enero e inicio de febrero son los períodos preferidos para tomar vacaciones. Y ahí son varios los factores que difícilmente cambiarán: verano, hijos en período de receso escolar y, por supuesto, el propio Carnaval, que funciona como una línea de corte.
En este escenario, empresas y empleados sienten el impacto en la productividad cuando un empleado retorna al trabajo. Y es lógico, pues retornar de vacaciones, por más simple que pueda parecer, no es fácil en ningún período del año. Suena incluso como una paradoja, a la vez que es esencial para recargar las baterías, las vacaciones también pueden ser una "villana", si no es planificada con antelación y si no es disfrutada dentro de su propósito.
Hace muchos años, charlando con un gran amigo sobre este tema, él en su sensatez me dio un consejo simple que no voy a olvidar y que hasta hoy lo uso en mis visitas en las empresas.
Para evitar que el retorno al trabajo, después del período de vacaciones, no sea un fardo pesado y estresante me dijo lo siguiente:
Antes de las vacaciones: Al acercarse el período debe finalizar su trabajo. Organizar las demandas, si fuese necesario, dedicarse una hora a más del día para ello. Transferir con precisión las actividades del período a quien dedicará tiempo para cubrir su ausencia. Pero no se olvide, no debe pasar a su colega actividades que no pudo concluir. El colega lo reemplazará dando apoyo en situaciones que ya se iniciaron y de actividades corrientes. Él no será la persona que tendrá que encargase de ello, eventualmente ni usted tuvo tiempo de ejecutar.
Haciendo esto, incluso puede salir un poco más cansado, pero consciente de que hizo todo lo que debería ser hecho para el buen progreso de las actividades. La mente tranquila libera espacio para nuevas actividades, en este caso la dedicación para su descanso.
En este contexto, algunas personas tienen algunas estrategias: uno o dos días antes de retornar, por ejemplo, puede llamar a su colega que está cubriendo sus vacaciones, pidiéndole un panorama de la situación. Así, se anticipa para los primeros días de trabajo.
El retorno: Recuerde que usted es humano. Es imposible querer responder a todos los e-mails y demandas en un solo día. Dedique un tiempo para leer y separar los mensajes en importantes y prioritarios.
Charle con la persona o los profesionales que han desempeñaron el papel de cubrir sus vacaciones. Y, así como dejó las actividades en el modo "en progreso" es justo que también reciba las actividades en el mismo estándar. Quien empezó, finaliza.
No debe cambiar su rutina 360 grados, su organismo no va aguantar. Trabaje el período y, al contrario de "antes de las vacaciones" no exceda en horarios, para evitar el estrés y el gasto de energías que han sido recargadas.
Después de tener una dimensión del escenario, de nuevo, debe planificar las actividades y la rutina va entrar en los ejes naturalmente. No es bueno es retornar de vacaciones y no saber por dónde empezar. Si esto ocurre el estrés, el cansancio y la productividad se van a pique. Piense en eso y que tenga un feliz retorno al trabajo.