Ford confirmó el pasado 27 de abril su perspectiva de utilidades para 2022 pese a las bajas ventas de vehículos, cuyo alto precio compensa el impacto de los costos de operación más altos y de la escasez de chips semiconductores.
En la misma línea de los comunicados de General Motors, los ejecutivos de Ford describieron la demanda de automóviles como “reprimida”, en un mercado con una oferta limitada pese al aumento de la inflación. El resultado es un aumento en los precios de los vehículos que por ahora les permitió a los fabricantes de Detroit compensar los elevados costos del acero, el níquel y los fletes.7
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Ford mantuvo su pronóstico de entre 11.500 y 12.500 millones de dólares en ganancias antes de intereses e impuestos, citando el efecto de la “continuación de precios fuertes”. Ford dijo que los suministros de semiconductores estuvieron aún limitados en enero y febrero, pero que las tasas de fabricación “mejoraron significativamente” en marzo.
La compañía espera que lleguen más vehículos al mercado en la segunda mitad de 2022, lo que significa que el mercado estará “en constante cambio”, dijo John Lawler, director de finanzas. “Si las materias primas siguen subiendo, seremos agresivos”. Las acciones de Ford subieron un 1,0% a 15 dólares en las operaciones posteriores al cierre.
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Fuente: AFP.