La cuarentena nos puso creativos a todos y nos estamos animando a ser cocineros, bailarines, maestros y hasta peluqueros. Sobre la peluquería en casa: muchos, quizás, lo llamarían ocio, pero, según este artículo, sí existe una psicología detrás de ella, ya que es posible que las personas decidan cortarse el cabello porque se sienten mal.
No sabemos si fue el caso de ciertos famosos que metieron tijerazo en casa y luego hicieron lucir sus nuevos looks en redes sociales. Lo que sí sabemos es que sin sus estilistas a mano y con mucho tiempo libre, se animaron a tal hazaña.
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La cantante española Rosalía cambió su raya en el medio por un flequillo que le sienta superbién; la excéntrica Miley Cyrus no se quedó atrás y se sacó de encima el cabello que iba por delante de sus orejas; la actriz española Najwa Nimri también lo hizo, rapándose parte de su cabello colorado. Los hombres también se sumaron a esta “tendencia” y entre los que se dejaron pasar la máquina se encuentran Maluma, Iker Casillas, entre otros.
“Yo creo que canalizamos a través del cabello porque es prácticamente lo único reversible que tenemos en el cuerpo o, mejor dicho, lo único que vuelve a su estado original sí o sí. Entonces, ante un evento transcendental, sobre todo en las mujeres, genera emociones buenísimas como adrenalina, alivio, satisfacción, entusiasmo y hasta esperanza en eso nuevo y diferente que nos sucede o sucederá”, reflexiona la estilista Luján Halley.
Desde lo sucedido con la senadora María Eugenia Bajac, hubo confusión en torno a si las peluquerías podían o no abrir para atender a sus clientas por turnos. Desde el Ministerio de Industria y Comercio (MIC), respondieron que la institución se basa en el decreto presidencial que establece el aislamiento hasta el 12 de abril, en el que se establece que los habitantes sólo podrán realizar desplazamientos mínimos e indispensables para aprovisionarse de alimentos, medicamentos y artículos de limpieza.
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Teniendo en cuenta esto, es lógico pensar cuán creativos podemos ser con lo que tenemos a mano. “No es malo cortarse el pelo en casa, pero sí es muy atrevido. Hay personas habilidosas y seguras que se animan a hacerlo. Lo bueno es que, ante un resultado fallido, el cabello siempre tiene solución porque vuelve a crecer y recuperarse”, menciona Halley. Y asegura que cuando la pandemia termine, los estilistas estarán esperándonos con las tijeras listas.